¡°Pagu¨¦ muchos vuelos privados del Rey em¨¦rito, pero no soy su testaferro¡±

?lvaro de Orleans-Borb¨®n, de 73 a?os, estuvo en el ojo del hurac¨¢n en julio de 2018 cuando un juzgado de la Audiencia Nacional abri¨®, y posteriormente archiv¨®, una investigaci¨®n sobre una grabaci¨®n de Corinna Larsen, antigua amiga de Juan Carlos I, realizada por el excomisario de polic¨ªa Jos¨¦ Manuel Villarejo (actualmente en prisi¨®n provisional por organizaci¨®n criminal, escuchas ilegales, cohecho y blanqueo de capitales), en la que esta le se?ala como testaferro del Rey em¨¦rito. Las cuentas suizas de Orleans fueron embargadas temporalmente por un fiscal de Ginebra y su nombre cuestionado. Por primera vez, ?lvaro de Orleans ha decidido hablar con un medio de comunicaci¨®n. La entrevista con EL PA?S se celebra en el despacho de su abogado en la calle Rh?ne, el pulm¨®n ginebrino que congrega m¨¢s tiendas de moda y lujo de la ciudad. Hoy, nieva copiosamente.

El ingeniero, empresario y piloto de vuelo sin motor italiano ha viajado seis horas en su coche desde M¨®naco, su lugar de residencia, para acudir al encuentro. Viste una americana de tweed marr¨®n, camisa azul, corbata con banderas de medio mundo, pantal¨®n de sport y zapatos n¨¢uticos. Junto a ¨¦l, sus abogados Philippe Cottier y Jean-Marc Carnic¨¦ escuchan atentos sus respuestas, sin intervenir, y muestran los movimientos de la cuenta suiza que durante 11 a?os pag¨® vuelos privados en jet de don Juan Carlos I.

Pregunta. ?Es usted el testaferro del Rey em¨¦rito?

Respuesta. No se?or. Ni testaferro ni fiduciario de nadie. Soy el ¨²nico due?o de mis propiedades.

P. ?Cu¨¢l es su relaci¨®n con Juan Carlos I? Ustedes son primos lejanos.

R. Cuando empec¨¦ a volar deportivamente y me nombraron presidente del Real A¨¦reo Club de Espa?a, en los a?os noventa, iba de M¨®naco a Madrid y nos vimos un par de veces. Conoc¨ªa mejor a la reina, porque mi padre era primo del rey Pablo de Grecia y mi abuelo, padrino de la infanta Elena. Les visit¨¢bamos con frecuencia en Corf¨². Cuando iba a Madrid, me invitaban a comer a La Zarzuela. Fue una relaci¨®n lenta, hasta que me di cuenta de nuestra afinidad por la tecnolog¨ªa. A trav¨¦s de varias iniciativas en ese campo lo pude conocer mejor. Y cuando me cas¨¦ por segunda vez y tuve una hija me dijo: ¡°?Necesitas un padrino!¡± Y vino al bautizo a Sanl¨²car de Barrameda. Hace ya 13 a?os.

P. Usted es propietario de la Fundaci¨®n Zagatka en Vaduz. Las fundaciones en Liechtenstein son instrumentos opacos y una de sus caracter¨ªsticas es ocultar a sus beneficiarios. ?Cu¨¢ndo y por qu¨¦ cre¨® esta fundaci¨®n?

R. La cre¨¦ en 2003 aqu¨ª, en Ginebra, para tener una gesti¨®n separada de mi patrimonio en Z¨²rich. Pregunt¨¦ por el nombre de un buen gestor y me dieron el de Arturo Fasana y ¨¦l me recomend¨® al abogado Dante Can¨®nica. Cre¨¦ la fundaci¨®n para responder a un mandato de mi padre, quien me pidi¨® que estuviera disponible para echar una mano a las familias reales cuando lo necesitaran. Lo hizo mi abuelo, lo hizo mi padre y quise hacerlo yo. En cuanto a las fundaciones en Vaduz, es cierto que antes hab¨ªa opacidad, pero ahora Liechtenstein se abri¨® a la transparencia y tiene firmados convenios con muchos pa¨ªses.

P. ?De qui¨¦n son los fondos que administra esta fundaci¨®n vinculada a una cuenta en Suiza?

R. Son estrictamente de la fundaci¨®n y el ¨²nico beneficiario soy yo. Soy el ¨²nico propietario indirecto de los fondos. Hay un director que es quien firma y administra, el se?or Can¨®nica. Y un asesor de inversiones, en este caso Arturo Fasana. Ha sido as¨ª desde el principio y no ha cambiado.

P. ?A cu¨¢nto ascienden los fondos de Zagatka?

R. Ahora, 10 millones de euros. El 31 de octubre de 2003 se abri¨® con 9.235 euros y en 2014 ten¨ªa 14.386.785 euros.

P. ?Ninguno de esos fondos pertenece al Rey em¨¦rito?

R. De forma absoluta, la respuesta es no. En ning¨²n momento, nunca. Ni formal, ni moralmente. Son m¨ªos y solo m¨ªos.

P. La cuenta suiza vinculada a la fundaci¨®n ha pagado vuelos de don Juan Carlos I en varias compa?¨ªas a¨¦reas de vuelos privados. ?Por qu¨¦ sufragaba usted estos gastos? ?Se lo pidi¨® su primo?

R. Es muy f¨¢cil de explicar. Un d¨ªa me llama el Rey, que conoce mi relaci¨®n con el mundo de la aviaci¨®n, y me pregunta si puedo encontrarle una compa?¨ªa privada para un vuelo. Llam¨¦ a mi asistente en M¨®naco y se pusieron de acuerdo para encontrar una. Pagu¨¦ yo... Distancia real... Y me olvid¨¦ del tema. As¨ª fue el inicio, anecd¨®tico.

P. Pero los vuelos continuaron.

R. Hubo un segundo y un tercero, un cuarto...Empezamos en 2007 y termin¨® en 2018. Al final hubo muchos vuelos.

P. Y mucho dinero.

R. La fundaci¨®n se manten¨ªa bien con las inversiones. No tuvo impacto.

P. ?Le explic¨® don Juan Carlos por qu¨¦ necesitaba esos vuelos privados?

R. No me lo explic¨® la primera vez. Imagino que ser¨ªa para no figurar en las listas de un vuelo oficial o comercial. Supongo que quer¨ªa volar con discreci¨®n, por una cuesti¨®n de privacidad y de protecci¨®n de su intimidad. Lo interpret¨¦ as¨ª.

P. ?Utiliz¨® la se?ora Larsen esos vuelos?

R. En varias ocasiones.

P. ?Cu¨¢ndo terminaron estos vuelos?

R. Un d¨ªa el Rey me dijo: ¡°Ya has pagado muchas cosas¡±. Lo hice porque consider¨¦ que estaba dentro de esa tradici¨®n familiar que le expliqu¨¦ antes. Nada m¨¢s. No hay m¨¢s secreto.

P. ?Hubo otros pagos adem¨¢s de los vuelos a cargo de la fundaci¨®n?

R. Alg¨²n regalo. Nada relevante.

P. El se?or Fasana estuvo investigado en el caso G¨¹rtel, en Espa?a, por gestionar el dinero de Francisco Correa, uno de los principales implicados. El abogado Dante Can¨®nica prest¨® tambi¨¦n declaraci¨®n en la misma causa. ?No le preocup¨® que su fundaci¨®n estuviera en manos de personas con esa reputaci¨®n?

R. Pregunt¨¦ a Fasana y me explic¨® que hab¨ªa colaborado con la justicia espa?ola y que no hubo ninguna consecuencia contra ¨¦l. Can¨®nica me dijo lo mismo. Fasana es buen gestor y no es f¨¢cil encontrar uno bueno.

P. El fiscal suizo Bertossa abri¨® una investigaci¨®n, cuyo sumario es secreto, por blanqueo de capitales en la que figuran usted y el se?or Fasana.

R. Apareci¨® publicado que ?lvaro de Orleans era un testaferro. El fiscal ley¨® la noticia en el peri¨®dico Tribune de Gen¨¨ve e hizo lo que ten¨ªa que hacer: investigar de forma exhaustiva. Inicialmente, me embargaron todas mis cuentas en Suiza. Lo congelaron todo. Hicieron una radiograf¨ªa econ¨®mica total. Un d¨ªa, en septiembre de 2018, quise hacer una transferencia y no pude. Fue una sorpresa extrema. En fin, al borde del infarto. En el banco me informaron de que era por una causa abierta por el fiscal Bertossa.

P. ?Cu¨¢l es ahora su situaci¨®n procesal?

R. El 10 de octubre de 2018 fui a declarar a petici¨®n propia como testigo. A la declaraci¨®n asistieron tambi¨¦n Fasana y Can¨®nica, por su relaci¨®n con mi fundaci¨®n. No hay situaci¨®n procesal de ninguna clase. Al terminar mi declaraci¨®n, el fiscal me comunic¨® que desbloqueaba mis cuentas, salvo 4 millones que se liberaron un mes despu¨¦s, y ya est¨¢.

P. La Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n espa?ola ha abierto unas diligencias de investigaci¨®n para determinar si hubo un delito de corrupci¨®n en transacciones internacionales en la construcci¨®n del AVE a La Meca que llev¨® a cabo un consorcio de empresas espa?olas. ?Conoce a la intermediaria y supuesta comisionista iran¨ª Shahpari Zanganeh, a la que se ha tomado declaraci¨®n?

R. Ni la conozco ni o¨ª hablar de ella jam¨¢s.

P. El diario brit¨¢nico Sunday Telegraph public¨® hace d¨ªas que usted cobr¨® 39 millones de libras por intermediar en la venta del Banco Zaragozano al Barclays Bank y que el dinero se ingres¨® en su cuenta del Credit Suisse.

R. Es totalmente falso. La fundaci¨®n tiene una sola cuenta y aqu¨ª est¨¢n sus movimientos desde su apertura. ?Ve usted el ingreso de esa cantidad en alg¨²n sitio?

P. ?Conoce o ha mantenido relaci¨®n con Alberto Cortina y Alberto Alcocer, antiguos accionistas del Banco Zaragozano?

R. Conoc¨ª a uno de ellos en una comida hace a?os. No son mis amigos ni he tenido negocios con ellos.

P. Imagino que habr¨¢ hablado con el Rey em¨¦rito sobre las grabaciones efectuadas a la se?ora Larsen.

R. Le pregunt¨¦: ¡°?Tienes idea de d¨®nde sale todo esto?¡± Me respondi¨® que no lo sab¨ªa.