¡°Soy radi¨®loga, pero aqu¨ª soy solo la que limpia¡±
Cientos de m¨¦dicos y enfermeras inmigrantes en Espa?a no pueden trabajar. Sin poder contribuir, observan la pandemia desde casa

Yasmine Chac¨®n era radi¨®loga en El Salvador, pero como no tiene su t¨ªtulo homologado, limpia casas en un pueblo de Valencia. Jos¨¦ Alejandro Pinto era m¨¦dico en Venezuela pero, sin autorizaci¨®n de trabajo, vive la pandemia de brazos cruzados en su piso de Madrid. El uruguayo Lucas Ferraz trat¨® decenas de casos de malaria en la Rep¨²blica Democr¨¢tica del Congo como auxiliar de enfermer¨ªa, pero no tiene papeles y hace reformas para sobrevivir. No son una excepci¨®n. Como ellos, cientos de sanitarios extranjeros acompa?an el avance de la pandemia por televisi¨®n. Quieren ayudar, pero la burocracia para homologar t¨ªtulos y las trabas de extranjer¨ªa les obligan a ver la crisis desde el sof¨¢.
Yasmine Chac¨®n y Juan Jos¨¦ Hern¨¢ndez, de 31 y 32 a?os, se conocieron en la facultad de Medicina de San Salvador, se formaron en radiolog¨ªa en 2014, consiguieron su plaza en un hospital y tuvieron dos hijas. Dejaron todo para huir de la violencia de las bandas locales y pidieron asilo en Espa?a en septiembre de 2018. Residen legalmente, tienen autorizaci¨®n de trabajo, pero sus t¨ªtulos no est¨¢n homologados. Ella limpia casas y levanta y acuesta a una se?ora mayor; ¨¦l a¨²n no ha encontrado trabajo. ¡°He solicitado para limpieza, supermercados¡ Me he ofrecido hasta para recoger naranjas y no me han llamado. Necesito encontrar un empleo, pero mi objetivo es trabajar de lo que he estudiado¡±, lamenta Hern¨¢ndez. ¡°Es dif¨ªcil ver que tenemos los medios para ejercer y no poder hacerlo. Es duro darte cuenta de que all¨¢ ¨¦ramos alguien, pero al llegar aqu¨ª no vales nada porque solo eres ¡®la que limpia casas¡±, sentencia Chac¨®n.
Recluido en casa, el m¨¦dico venezolano Jos¨¦ Alejandro Pinto, de 30 a?os, tiene la impresi¨®n de que se ha declarado una guerra y no le dan permiso para salir a curar heridas. A su lado, en el sof¨¢ del sal¨®n, su novia, Yessica Moy tampoco puede contribuir a pesar de que es una enfermera titulada en una especialidad crucial en estos momentos, t¨¦cnico cardiopulmonar. Por vocaci¨®n y necesidad, los dos venezolanos residentes en Madrid quieren ayudar en la lucha contra el coronavirus. Pero como no tienen permiso de trabajo, no les queda otra opci¨®n que esperar en casa. Ni siquiera les apetece ver la tele porque se frustran m¨¢s. ¡°Estamos viendo el techo de brazos cruzados¡±, afirma resignado Pinto. Lo dice con iron¨ªa, porque en realidad est¨¢ moviendo cielo y tierra para responder a la gran necesidad de sanitarios que ha provocado la crisis y as¨ª conseguir un trabajo, el primero desde que lleg¨® a Espa?a, el 4 de noviembre, para solicitar asilo.
Pinto homolog¨® su t¨ªtulo antes de emigrar y est¨¢ colegiado en Madrid. Asisti¨® incluso a un taller de formaci¨®n para tratar a pacientes de coronavirus, pero su solicitud de asilo tiene menos de seis meses y carece de autorizaci¨®n para trabajar. Por culpa de los papeles, le han rechazado dos veces en las ¨²ltimas dos semanas en procesos de selecci¨®n de m¨¦dicos en un centro de salud de Madrid y en una residencia de ancianos. ¡°Por favor, cuando lo consigas nos env¨ªas tu n¨²mero de la Seguridad Social", fue la respuesta. "Es tan simple como querer. Solo pido que vean mi expediente y me den el permiso de trabajo¡±, ruega.
La falta de personal sanitario y el contagio de m¨¢s de 25.000 profesionales han llevado al Gobierno a intentar reclutar estudiantes, jubilados y tambi¨¦n m¨¦dicos y enfermeras inmigrantes. El Ministerio de Sanidad se ha comprometido a flexibilizar los tr¨¢mites de reconocimiento de especialidades cursadas en el extranjero y el de Universidades ha priorizado la homologaci¨®n de m¨¦dicos y enfermeras. Ya son algo m¨¢s de 400 t¨ªtulos convalidados durante el estado de alarma. En paralelo, se ha acelerado la autorizaci¨®n de trabajo de 390 profesionales por parte de la Secretar¨ªa de Estado de Migraciones. Tambi¨¦n el Ministerio de Educaci¨®n ha homologado en los ¨²ltimos 15 d¨ªas 223 t¨ªtulos de Formaci¨®n Profesional, en su mayor¨ªa de auxiliares de enfermer¨ªa. Esto ha sido un alivio que ha permitido a algunos dejar trabajos no cualificados, repartiendo como riders o haciendo llamadas en call centers, pero cientos de sanitarios quedan a¨²n al margen de estas medidas.
Sobre la mesa de varios ministerios sigue la propuesta de un nuevo procedimiento para que m¨¢s inmigrantes cualificados, residentes en el ¨²ltimo a?o de formaci¨®n o m¨¦dicos que han superado el MIR pero se quedaron sin plaza puedan solicitar la convalidaci¨®n de sus t¨ªtulos junto a una autorizaci¨®n de trabajo. Esta v¨ªa, que pretende resolver los tr¨¢mites de forma expr¨¦s, podr¨ªa incluir a solicitantes de asilo como el doctor Pinto, pero su aprobaci¨®n, que parec¨ªa urgente, a¨²n est¨¢ en discusi¨®n. El Ministerio del Interior, seg¨²n fuentes conocedoras del proceso, quiere dejar claro que la propuesta no implique un proceso de regularizaci¨®n de extranjeros en situaci¨®n irregular y pone en duda la rapidez con la que podr¨¢n homologarse los t¨ªtulos, un proceso que como m¨ªnimo lleva seis meses. El departamento de Fernando Grande-Marlaska no se opone a incluir solicitantes de asilo, pero rechaza que tengan una menci¨®n espec¨ªfica en el texto. ¡°La finalidad es dar un permiso de residencia y trabajo por motivos extraordinarios a nacionales de terceros pa¨ªses que se hallen legalmente en Espa?a. El que sean solicitantes de asilo o no, no aporta nada¡±, se?ala el ministerio en sus observaciones.
La situaci¨®n irregular de muchos profesionales sanitarios complica su incorporaci¨®n al mercado laboral. Lucas Ferraz, un auxiliar de enfermer¨ªa uruguayo de 40 a?os, est¨¢ en Valencia sin papeles hace un a?o. Trabaja haciendo reformas porque su regularizaci¨®n ha tropezado con m¨²ltiples obst¨¢culos. Ya vivi¨® aqu¨ª entre 2004 a 2012 y nunca lo consigui¨®. ¡°Siempre me faltaba algo¡±, recuerda. Estos d¨ªas est¨¢ m¨¢s frustrado que de costumbre: ¡°Tengo formaci¨®n para centros de terapia intensiva cardiol¨®gicos, manejo bombas de infusi¨®n y respiradores, pero he trabajado m¨¢s en la obra que como enfermero¡±. Ferraz cuenta su experiencia en un buque militar en la Ant¨¢rtida y en una misi¨®n de paz en el Congo donde atendi¨® casos de malaria y se form¨® para tratar pacientes con ¨¦bola. ¡°Entiendo que pol¨ªticamente pueda ser dif¨ªcil, pero ?c¨®mo es posible que est¨¦n doblando turnos o trabajando personal sanitario contagiado y no nos den la posibilidad de ayudar?¡±, cuestiona. ¡°Me veo con un t¨ªtulo y unos conocimientos encerrado en mi casa sin poder hacer nada¡±.
Formados sin papeles
La Asociaci¨®n de M¨¦dicos Venezolanos en Espa?a (Amevesp) calcula que hay cientos de sanitarios de ese pa¨ªs sin permiso de trabajo en Espa?a, muchos de ellos en Madrid, principal destino de la inmigraci¨®n de Venezuela. Asociaciones de argentinos, colombianos y cubanos tambi¨¦n han pedido sumarse a la lucha contra el virus. El uruguayo Lucas Ferraz no pertenece a ninguna asociaci¨®n, pero hace unos d¨ªas se desahog¨® en Facebook, y comenz¨® a recibir decenas de testimonios similares. Cre¨® un grupo que ya tiene m¨¢s de 200 miembros. Todos formados, asegura, pero la mayor¨ªa sin papeles.
Informaci¨®n sobre el coronavirus
- Aqu¨ª puede seguir la ¨²ltima hora sobre la evoluci¨®n de la pandemia
- As¨ª evoluciona la curva del coronavirus en Espa?a y en cada autonom¨ªa
- Preguntas y respuestas sobre el coronavirus
- Gu¨ªa de actuaci¨®n ante la enfermedad
- En caso de tener s¨ªntomas, estos son los tel¨¦fonos que se han habilitado en cada comunidad
- Pinche aqu¨ª para suscribirse a la newsletter diaria sobre la pandemia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.