La presi¨®n de Bruselas complica al Gobierno los cambios en la reforma laboral

Es tiempo de reformas pero no de contrarreformas. En el ¨¢nimo del Gobierno de coalici¨®n del PSOE y Unidas Podemos conviven ambos impulsos, pero las negociaciones en Bruselas sobre el fondo europeo para hacer frente a la crisis del coronavirus apuntan a condiciones m¨¢s exigentes de las inicialmente previstas. Los llamados pa¨ªses frugales aprietan a Espa?a para que no suavice leyes laborales y para que replantee el sistema de pensiones. En ese contexto, abordar de inmediato la derogaci¨®n de la reforma laboral del Ejecutivo de Mariano Rajoy puede no ser prioritario, se?alan fuentes del Gobierno.

¡°No renunciamos a derogar la reforma laboral¡±, aseguran en Unidas Podemos. ¡°No vamos a desistir de eliminar las partes m¨¢s da?inas¡±, afirman fuentes del PSOE sobre la ley aprobada por Mariano Rajoy en 2012. El acuerdo firmado en diciembre de 2019 por Pedro S¨¢nchez y Pablo Iglesias para formar un Gobierno de coalici¨®n dice expresamente: ¡°Derogaremos la reforma laboral. Recuperemos los derechos laborales arrebatados¡±. Pero ambos partidos interpretan de forma distinta ese compromiso y la negociaci¨®n en Bruselas del fondo de recuperaci¨®n por la crisis del coronavirus amenaza ahora con retrasar esos planes, lo que puede abrir una nueva grieta entre los socios del Ejecutivo.

Ambos partidos insisten en que su compromiso sigue vigente, pero trimestre a trimestre, esa reforma de la reforma va posponi¨¦ndose. El calendario para abordarla y su alcance acaba de entrar en zona de sombra. Tanto la contrarreforma laboral como el sistema de pensiones vigente en Espa?a pueden chocar frontalmente con las exigencias de Bruselas en la negociaci¨®n para aprobar el fondo europeo por el coronavirus del que Espa?a aspira a ser uno de los principales receptores.

Pero el asunto ya era delicado para el Gobierno antes de la negociaci¨®n con Bruselas, porque Unidas Podemos y el PSOE tienen distintas visiones sobre la ley. El plan era renunciar a que la derogaci¨®n fuera ¨ªntegra, a cambio de que la ministra de Trabajo, Yolanda D¨ªaz, abordase un nuevo estatuto de los trabajadores. Pero la pandemia lo ha trastocado todo.

Espa?a necesita la ayuda del fondo europeo que el presidente, Pedro S¨¢nchez, negocia desde hace tres d¨ªas en Bruselas en un clima de clara divergencia con Holanda, que encabeza y abandera a los llamados pa¨ªses frugales, que quieren imponer condiciones, vigilar y vetar a los receptores si no cumplen con lo que ellos creen que hay que hacer para recibir el dinero. Todo lo que se hace en Bruselas afecta a la pol¨ªtica nacional, pero la reforma laboral y las pensiones son uno de los aspectos m¨¢s sensibles del proyecto pol¨ªtico firmado en el acuerdo del Gobierno de coalici¨®n. Por ello, las fuentes gubernamentales consultadas, a¨²n sin poder precisar y prever c¨®mo terminar¨¢ la negociaci¨®n, admiten que entorpecer¨¢ los planes sobre esa materia. La intenci¨®n era empezar en septiembre el estudio de la reforma laboral, aunque sin entrar en algunos aspectos. ¡°Con 300.000 empresas con ERTE no se puede abordar a¨²n completamente la reforma. Estamos en medio de una pandemia¡±, afirman fuentes del Gobierno.

Podemos y los sindicatos quieren que la negociaci¨®n se produzca sin demora en septiembre. Aunque un sector del PSOE se alinear¨ªa con los ministros de Unidas Podemos, singularmente con la de Trabajo, Yolanda D¨ªaz, la parte socialista del Gobierno de coalici¨®n ve dificultades para abordar la reforma laboral a tan corto plazo. El Ejecutivo logr¨® recientemente un acuerdo de empleo con la patronal y los sindicatos, pero los primeros se?alan la derogaci¨®n de la reforma laboral como una l¨ªnea roja y los segundos apremian para que se haga, ante la previsi¨®n de una fuerte ca¨ªda de los salarios en oto?o, y empiezan a impacientarse.

La reforma laboral ya ha dado varios quebraderos de cabeza al Ejecutivo de coalici¨®n. El pasado 21 de mayo el PSOE y Unidas Podemos firmaron un acuerdo con Bildu para derogar la norma del Gobierno de Rajoy. Pero el texto acordado dur¨® un suspiro. Los socialistas empezaron a matizar los t¨¦rminos y dos vicepresidentes exhibieron p¨²blicamente sus discrepancias. Iglesias insisti¨® en que la derogaci¨®n era ¨ªntegra. Nadia Calvi?o, vicepresidenta econ¨®mica, asegur¨® que eso era ¡°absurdo¡± y mantiene que no debe tocarse nada por ahora. Finalmente, a petici¨®n suya, se rehizo la redacci¨®n del documento con Bildu. Ya no se fijaban tiempos. Portavoces de Unidas Podemos aseguran que para ellos la reforma laboral es una prioridad, pero a?aden que no pondr¨¢n en peligro la coalici¨®n de Gobierno por ¡°el ajuste¡± que haya que hacer.

Sacrificios econ¨®micos

No solo el primer ministro holand¨¦s, Mark Rutte, se opone a tocar, para suavizar, leyes laborales. El Gobierno tambi¨¦n tendr¨¢ en frente a un sector del Parlamento, especialmente, el del padre de la norma, el PP, que defender¨¢ tanto en Espa?a como en Europa que la reforma laboral aprobada por Mariano Rajoy siga vigente. Los populares han estado, adem¨¢s, especialmente atentos para se?alar y explotar discrepancias en el Ejecutivo de coalici¨®n, especialmente en el ¨¢mbito econ¨®mico, donde insisten en transmitir la idea de que manda Podemos.

Aunque en las ¨²ltimas 72 horas Pedro S¨¢nchez ha estado centrado en la dur¨ªsima negociaci¨®n comunitaria, tiene claro c¨®mo afectan a Espa?a las exigencias para la reconstrucci¨®n, apuntan fuentes gubernamentales. El presidente no ha anunciado a¨²n ning¨²n sacrificio econ¨®mico ni cambio de planes, pero estos llegar¨¢n, se?alan fuentes gubernamentales. Se ver¨¢ entonces hasta d¨®nde puede llegar el Gobierno de coalici¨®n respecto a la reforma laboral, el mantenimiento de las pensiones con subidas anuales o el sueldo de los funcionarios.