Los barones del PP, entre Casado y S¨¢nchez

La lealtad, el respeto y el apoyo moral de los presidentes auton¨®micos del PP al l¨ªder de su partido, Pablo Casado, est¨¢n hoy por hoy garantizados. El presidente Pedro S¨¢nchez, como es sabido, no goza del afecto de los barones regionales del PP, pero estos no est¨¢n por la labor de perder de vista al palacio de La Moncloa ni de separarse del manto protector que pueda extender el Gobierno de Espa?a para ayudarles en las acuciantes necesidades que tiene cada comunidad por la extensi¨®n sin freno de la covid-19. A Pablo Casado le querr¨¢n, pero a Pedro S¨¢nchez le necesitan.

No es posible establecer una estrategia com¨²n de todos los presidentes populares marcada por la sede nacional del partido. No se pueden seguir directrices de rechazo a todo lo que proponga S¨¢nchez ni tampoco pretenden que los presidentes auton¨®micos marquen el mismo paso. El desmarque general lo explota la mandataria madrile?a, Isabel D¨ªaz Ayuso. Su af¨¢n de limitar las restricciones porque ¡°Madrid se muere¡± econ¨®micamente no tiene seguimiento en el resto. Casado puede pedir el ¡°mando ¨²nico¡±, pero cada presidente regional tiene sus propias preferencias y, adem¨¢s, cambiantes, respecto a qui¨¦n debe mandar.

Al presidente andaluz, Juan Manuel Moreno, le duele ¡°en el alma¡± apretar las tuercas, pero probablemente este mi¨¦rcoles anuncie el cierre de Andaluc¨ªa desde el fin de semana. Nadie como ¨¦l sabe cu¨¢l es la situaci¨®n de las ocho provincias, como tambi¨¦n conocen al detalle sus situaciones propias los jefes del Ejecutivo de Murcia, Fernando L¨®pez Miras, y Castilla y Le¨®n, Alfonso Fern¨¢ndez Ma?ueco. No dudar¨¢ el gallego Alberto N¨²?ez Feij¨®o en perimetrar, confinar o cerrar las ciudades que lleguen a la alerta roja y desborden el sistema de salud de la Xunta. Tampoco alzar¨¢ la voz el presidente de Ceuta, Jes¨²s Vivas ¡ªsin competencias en Sanidad¡ª si el ministerio dicta instrucciones para su ciudad, o para Melilla, gobernada por Eduardo de Castro, de Ciudadanos. Aun as¨ª, el Gobierno ha dejado en manos de las autoridades locales de ambas ciudades aut¨®nomas que manejen sus necesidades.

Eso har¨¢n todas. Desde el 9 de noviembre, cuando terminen los primeros 15 d¨ªas del estado de alarma, cada autonom¨ªa asumir¨¢ y decidir¨¢ las medidas contra la pandemia. La interlocuci¨®n ser¨¢ bilateral: el Gobierno con cada Ejecutivo regional. No habr¨¢ quejas por este t¨² a t¨². Esta realidad convivir¨¢ con las cr¨ªticas de Casado a S¨¢nchez, empezando este martes por la decisi¨®n del presidente de delegar en su ministro de Sanidad, Salvador Illa, la petici¨®n al Congreso de autorizar el estado de alarma. Los presidentes auton¨®micos seguro que lo consideran censurable, pero tienen otras preocupaciones. Ellos, a coordinarse con el Gobierno frente a la pandemia. Siempre puede haber excepciones. Madrid, por ejemplo.