Prisi¨®n por riesgo de fuga para la etarra extraditada por B¨¦lgica
El juez De la Mata rechaza que la causa por la que ha sido entregada Natividad Jauregui, un asesinato de 1981, haya prescrito
El juez de la Audiencia Nacional Jos¨¦ de la Mata acord¨® este lunes el ingreso en prisi¨®n incondicional de la presunta integrante de ETA Natividad Jauregui Espina, alias Pepona y Jaione, entregada el pasado domingo por la justicia de B¨¦lgica para que sea juzgada por el asesinato del teniente coronel Ram¨®n Romeo, cometido en Bilbao en marzo de 1981. El juez toma la decisi¨®n tras concluir que existe un elevado riesgo de que la terrorista intente fugarse, y recuerda que lleva m¨¢s de 30 a?os huida. El magistrado atribuye a Jauregui los delitos de asesinato y atentado terrorista.
En su auto, el juez sit¨²a a Jauregui como presunta miembro de uno de los dos taldes o grupos del comando Vizcaya de ETA que estuvieron activos entre enero y julio de 1981 en el Pa¨ªs Vasco. Como integrante del mismo, la investigaci¨®n la sit¨²a como autora material, junto a Francisco Javier Zabaleta, ya fallecido, del asesinato a tiros del teniente coronel Romeo, perpetrado el 19 de marzo de aquel a?o en las inmediaciones de la Bas¨ªlica de Bego?a, en Bilbao. La supuesta participaci¨®n de Jauregui en este atentado no fue conocida hasta m¨¢s de seis a?os despu¨¦s, en octubre de 1987, cuando otro integrante del comando, Enrique Letona, fue detenido y la se?al¨® en su declaraci¨®n.
El juez destaca que, desde entonces, ha sido imposible conseguir que la presunta terrorista comparezca y que ahora lo ha hecho ¡°contra su voluntad¡± y tras ser ¡°conducida por la fuerza p¨²blica¡±. Tambi¨¦n recuerda los ¡°largos a?os de espera por los procesos judiciales¡± que se iniciaron para lograr su extradici¨®n tras su primera detenci¨®n en B¨¦lgica, en 2013. Entonces pesaban dos ?rdenes Europeas de Detenci¨®n y Entrega por su supuesta implicaci¨®n en la muerte de seis agentes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, entre ellas la del teniente coronel Romeo. En primera instancia, los tribunales belgas rechazaron la extradici¨®n al considerar que se podr¨ªan vulnerar los derechos fundamentales de Jauregui si era enviada a Espa?a. La situaci¨®n cambi¨® el a?o pasado, despu¨¦s de que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos condenase a B¨¦lgica por no haber cumplido ¡°con la obligaci¨®n de cooperar con Espa?a¡± para esclarecer el asesinato.
Adem¨¢s, el juez cree que la etarra no tiene ning¨²n arraigo en Espa?a, ya que reside desde hace a?os en B¨¦lgica. ¡°Es cierto que acredita que tiene alg¨²n o algunos familiares [en Espa?a], que se ofrecen a acogerla, pero la evidencia es que la procesada tiene absolutamente toda su vida en B¨¦lgica y no tiene lazos en Espa?a¡±, se?ala el magistrado en el auto. ¡°Estas circunstancias, unido a la gravedad de los hechos y la pena que podr¨ªa eventualmente ser impuesta, ponen de manifiesto un elevado riesgo de fuga¡±, concluye.
De la Mata descarta las alegaciones de la defensa sobre la prescripci¨®n de los delitos tras haber transcurrido casi 40 a?os desde que se cometi¨® el atentado. Para ello, repasa a lo largo del auto todas las actuaciones judiciales practicadas desde que se perpetr¨® el asesinato y concluye que las mismas no fueron un simple tr¨¢mite, sino que estuvieron dirigidas ¡°a la efectiva prosecuci¨®n del procedimiento (sin perjuicio de que esto fuera o no posible), por lo que la misma produjo un efecto interruptivo de la prescripci¨®n¡±.
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