PP y Ciudadanos abren una fase hostil que amenaza sus pactos
Los liberales advierten a los populares de que tengan cuidado con las ¡°deslealtades¡±
El sorpresivo fichaje por el PP para sus listas en Catalu?a de la excandidata de Ciudadanos a la presidencia de la Generalitat, Lorena Rold¨¢n, ha abierto una nueva etapa de hostilidad entre los dos partidos del centroderecha. La direcci¨®n de Ciudadanos ha recibido como una ¡°deslealtad¡± del PP el movimiento de Rold¨¢n, y advierte a los populares de que este tipo de pr¨¢cticas amenazan sus pactos futuros, tanto en los territorios como en las posibles alianzas de ¨¢mbito nacional, en la fusi¨®n fr¨ªa que pretende el PP. El partido de In¨¦s Arrimadas no prev¨¦ dejar caer los cinco Gobiernos que comparten.
No hay tregua en la derecha. Tras la ruptura del PP con Vox en la moci¨®n de censura del pasado octubre, ahora la discordia se aviva en el lado m¨¢s centrista. La relaci¨®n entre el PP y Ciudadanos ha girado hacia el enfrentamiento abierto a ra¨ªz de la sacudida que para el partido de In¨¦s Arrimadas ha supuesto que el PP le robara a su excandidata a la Generalitat a mes y medio de que se abran las urnas. Ciudadanos ha recibido ese movimiento como ¡°un acto de deslealtad¡± por parte del PP, con el que comparte cinco Gobiernos principales ¡ªcuatro auton¨®micos y el del Ayuntamiento de Madrid¡ª y ahora advierte a sus socios de que por ese camino sus acuerdos futuros corren peligro.
PP y Ciudadanos hab¨ªan acordado evitar los ataques entre s¨ª en la campa?a de las pr¨®ximas elecciones catalanas, por su condici¨®n de socios y por la fluida relaci¨®n que Pablo Casado e In¨¦s Arrimadas est¨¢n cultivando desde hace meses pensando en alianzas a medio plazo. El l¨ªder del PP sabe que tiene que reunificar el centroderecha para tratar de llegar a La Moncloa, y lleva tiempo trabajando en ese camino con la presidenta de Ciudadanos. Pero el fichaje de Lorena Rold¨¢n como n¨²mero dos del PP en las listas electorales de Catalu?a ha ca¨ªdo como un meteorito entre los liberales, que se han dado cuenta de que no se pueden fiar del PP. Y de que los populares han pasado ¡°de pretender una OPA amistosa, a lanzar una OPA hostil¡± contra su partido, como interpreta uno de los principales dirigentes de la c¨²pula de Arrimadas.
El vicesecretario general de Ciudadanos, Carlos Cuadrado, transmiti¨® su queja formal por lo sucedido con Rold¨¢n la semana pasada al secretario general del PP, Teodoro Garc¨ªa Egea. Hablaron por tel¨¦fono y Cuadrado le reproch¨® que no les hubieran avisado del fichaje. El n¨²mero dos de Pablo Casado sac¨® entonces a relucir el caso de ?ngel Garrido: Cs fich¨® a traici¨®n al expresidente de la Comunidad de Madrid del PP a las puertas de las elecciones generales de abril de 2019, cuando Albert Rivera cre¨ªa que tocaba con los dedos el sorpasso a Casado. Una pu?alada por otra, vino a decir.
El PP niega una OPA hostil
¡°Quieren desestabilizar y hacer da?o a Ciudadanos¡±, sostiene uno de los principales colaboradores de Arrimadas. Los populares niegan buscar una OPA hostil, y aseguran que est¨¢n en una fase ¡°de espera, hasta el Rubic¨®n de las catalanas¡±. Despu¨¦s, conf¨ªan en que Cs entienda que ¡°por separado, no ganan las elecciones¡± y deben ir a ¡°un proceso de integraci¨®n, serena y calmada¡±, apuntan fuentes de la direcci¨®n del PP.
Ciudadanos advierte al PP de que debe cuidar sus relaciones si quiere que sus pactos territoriales se mantengan en el futuro, o incluso si pretende una fusi¨®n fr¨ªa para las pr¨®ximas elecciones generales. ¡°El PP tiene el poder que tiene gracias a Ciudadanos. Cuidado con morder la mano que te da de comer¡±, alerta un importante dirigente de la direcci¨®n de Arrimadas. No se refiere a que el partido vaya a dejar caer los Gobiernos que comparten PP y Cs, pero s¨ª a replantearse esas alianzas a medio plazo. ¡°No est¨¢ en nuestra cabeza romper Gobiernos, pero si tenemos que llegar en el futuro a nuevos pactos, no es lo mismo con quien te ha demostrado deslealtad¡±, precisa.
Estocadas como la de Rold¨¢n tambi¨¦n enfr¨ªan el acercamiento entre ambos partidos para la reunificaci¨®n del centro derecha que ans¨ªa Casado. ¡°Si el PP quer¨ªa una fusi¨®n fr¨ªa o un abrazo era mucho m¨¢s efectiva la OPA amistosa que la hostil¡±, sostienen en la direcci¨®n de Ciudadanos. Aunque los fichajes de cargos de Arrimadas por parte del PP tienen un efecto ambivalente. Por un lado, pueden provocar, como afirman en la c¨²pula de Cs, un repliegue identitario en el partido de Arrimadas que aleje ese posible pacto. Pero, por otro, tambi¨¦n son un incentivo para Arrimadas, para decidirse a anticipar una alianza con el PP que evite una posible desbandada de sus cuadros. El debate sobre la convergencia con el PP ya est¨¢ abierto internamente en Cs, pero todo el mundo coincide en que hay que esperar a conocer el resultado de las elecciones catalanas, donde la formaci¨®n examina su viabilidad como proyecto aut¨®nomo.
El PP sostiene que su voluntad es absorber votantes y no dirigentes de Ciudadanos. Pero al mismo tiempo, en la direcci¨®n popular conf¨ªan en que muchos cuadros liberales caigan en el PP como fruta madura. Fuentes del PP en el Ayuntamiento de Madrid aseguran, por ejemplo, que la vicealcaldesa, Bego?a Villac¨ªs, de Ciudadanos, ¡°est¨¢ esperando su momento¡± para dar el salto al PP, un extremo que ella niega rotundamente. ¡°Mi proyecto es Ciudadanos¡±, zanja la regidora en conversaci¨®n con EL PA?S. Las mismas fuentes populares creen que a partir de la grieta abierta por Lorena Rold¨¢n van a ir recibiendo llamadas a la puerta de cargos de Cs porque en el partido de Arrimadas ¡°se han dado cuenta de que quien primero salta del barco, elige puesto¡±.
El Partido Popular sabe que debe cuidar la estabilidad de los Gobiernos que comparte con Cs. Pero el caso de Rold¨¢n ha abierto un camino y los populares, motivados por encuestas recientes en las que crecen en intenci¨®n de voto nacional, aceleran para reunificar el centro derecha.
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