Casado quema las naves

Vuelve el PP de las recogidas de firmas contra el Estatut ¡ªahora contra los indultos¡ª y el de la plaza de Col¨®n, aunque con el intento de evitar la reedici¨®n de la foto maldita con Vox. La estrategia de oposici¨®n de Pablo Casado ha regresado a la l¨ªnea m¨¢s dura, arrastrado por los halcones de la derecha, espoleado por la victoria de Isabel D¨ªaz Ayuso en Madrid y porque cree que, ahora s¨ª, est¨¢ en disposici¨®n de llegar a La Moncloa. Casado quema las naves contra S¨¢nchez por su plan para Catalu?a, respaldado en el partido aunque con algunos dirigentes y barones advirtiendo del riesgo de perder el foco ante un asunto tan delicado para el PP.

El PP sigue euf¨®rico tras la victoria de Madrid, y eso explica muchas cosas. ¡°Yo no recuerdo una buena noticia en el PP desde que entr¨¦ en la direcci¨®n en 2015¡±, reconoce un miembro de la c¨²pula, como ejemplo de la traves¨ªa del desierto que el partido ha pasado hasta llegar a este momento, en el que por primera vez en la era Casado las encuestas le sit¨²an por delante del PSOE. El aldabonazo de Isabel D¨ªaz Ayuso el 4-M ha sido el hecho m¨¢s trascendental para el PP desde que Casado lleg¨® a la presidencia en 2018, y desde entonces en el puesto de mando del principal partido de la oposici¨®n han cambiado el paso y apretado el acelerador.

El l¨ªder del PP juega fuerte contra un Gobierno que percibe ahora d¨¦bil. Despu¨¦s del 4-M, Casado no ha perdonado una al Ejecutivo, sea en una crisis diplom¨¢tica con Marruecos o en la renovaci¨®n del caducado Poder Judicial, que los populares han decidido que, en estas condiciones y con este clima pol¨ªtico, no tienen intenci¨®n de renovar.

Fuentes del entorno de la presidenta madrile?a, de hecho, valoran el giro constatado hacia la l¨ªnea m¨¢s arisca y se atribuyen parte del m¨¦rito: ¡°Casado suena ahora bien, cuando est¨¢s en la oposici¨®n se te tiene que ver como oposici¨®n. Esto de los indultos es insoportable. S¨¢nchez viv¨ªa tras un trampantojo, con una lona preciosa que Ayuso rasg¨® y ahora se ve que ah¨ª no hay nada y Casado est¨¢ aprovechando ese viento a favor¡±.

En la ¨²ltima semana, adem¨¢s, Casado ha ido a por todas contra el intento de Pedro S¨¢nchez de indultar a los l¨ªderes del proc¨¦s independentista, un asunto que en el PP saben que despierta un rechazo transversal en una parte de la sociedad espa?ola, incluido en el PSOE. El l¨ªder popular ha decidido salir a recoger firmas por todo el pa¨ªs como contra el Estatut y participar en una protesta que se har¨¢ en la simb¨®lica plaza de Col¨®n, en la que hace dos a?os se visualiz¨® por primera vez un bloque de derechas que solo benefici¨® a Vox.

La c¨²pula del PP intenta desmarcarse de aquella foto tan estigmatizada y ha elaborado un argumentario de autodefensa: ¡°Ante una concentraci¨®n convocada por una plataforma af¨ªn al partido, ante un asunto tan grave, no pod¨ªamos no ir, y es natural que nos adhiramos. Si decidi¨¦ramos no ir nos criticar¨ªan m¨¢s. Hemos testado que nuestro electorado, y parte del socialista, est¨¢ muy inc¨®modo y quiere decirle al Gobierno que no soporta esos indultos. Si Vox no hubiera ido habr¨ªamos acudido igual¡±.

La estrategia de l¨ªnea dura coincide con el segundo intento del PSOE ¡ªdespu¨¦s del Estatut, hace 15 a?os¡ª de poner en v¨ªas de soluci¨®n el conflicto en Catalu?a. En el equipo de Casado tambi¨¦n hay voces que no quieren centrar el eje de oposici¨®n en este asunto, ya que consideran que no es una fortaleza para el PP por su pasado de Gobierno y porque Vox siempre va a ganarle en espa?olidad y mano dura. En relevantes presidencias auton¨®micas del PP se pide cautela: ¡°Hay que tener mucho cuidado con c¨®mo se explica la recogida de firmas contra los indultos. Si la interpretaci¨®n es que estamos en contra de Catalu?a, gana el independentismo. Si la interpretaci¨®n es que una parte de la sociedad no se imponga y arrincone a la otra, habr¨¢n entendido el mensaje¡±.

En otra presidencia auton¨®mica coinciden en que ¡°concordia no puede ser impunidad¡±, pero reafirman que Casado debe medir la firmeza en otros asuntos: ¡°No puede estar quemando las naves continuamente¡±.

La participaci¨®n en la protesta de la plaza de Col¨®n junto a Ciudadanos y Vox contra los indultos es controvertida en el PP m¨¢s all¨¢ de Madrid. ¡°Nosotros tenemos un planteamiento autonomista y constitucional. Con los que no lo tengan no es bueno que nos vean de forma conjunta, porque no estamos en la misma posici¨®n¡±, dicen fuentes de una importante presidencia auton¨®mica. ¡°Hagamos defensa de la autonom¨ªa catalana, pero digamos con claridad que nos vamos a equivocar de una forma no menor dando un indulto al que no lo pide y que va a seguir delinquiendo¡±. ¡°Lo que est¨¢ claro es que no se dan ninguna de las condiciones para que S¨¢nchez indulte a un socio, pero si de aqu¨ª le damos alguna herramienta al independentismo, o a la coalici¨®n de Gobierno, para trasladar que el PP est¨¢ en contra de la autonom¨ªa catalana, ser¨ªa un efecto no perseguido. No vamos a dejar de ser un partido autonomista¡±, enfatizan en una presidencia del PP.

En esta misma l¨ªnea se manifiestan quienes han tenido responsabilidades de Gobierno en el PP en la ¨²ltima etapa con el auge del independentismo. Jos¨¦ Luis Ayll¨®n, que fue director de gabinete de la presidencia de Gobierno de Mariano Rajoy, cree que el PP ¡°tiene que ser capaz de trasladar una opini¨®n firme respecto de esta cuesti¨®n, pero muy cuidadoso en las formas¡±. ¡°El PP est¨¢ consiguiendo construir una formulaci¨®n de su proyecto en los ¨²ltimos meses en unos t¨¦rminos m¨¢s moderados de los que hab¨ªa empezado la legislatura, y no deber¨ªa ser modificada por muy grave que sea la situaci¨®n¡±, opina. ¡°Cuando el debate se excita es muy dif¨ªcil no subirse a la excitaci¨®n, pero el PP debe tener convicci¨®n y no caer en la provocaci¨®n¡±, aconseja.

Este dilema, en cualquier caso, no est¨¢ resuelto. Otros barones s¨ª ven con buenos ojos una oposici¨®n ¡°sin contemplaciones¡± contra los indultos. ¡°Estamos ante uno de los mayores esc¨¢ndalos de la democracia. El PP no puede estar m¨¢s que en la posici¨®n que est¨¢ Casado¡±, coinciden en opinar media docena de dirigentes consultados. ¡°El tema catal¨¢n es muy delicado. El PP ha cometido fallos, pero ahora no estamos en uno de ellos. Esto no es pol¨ªtica, esto es derecho¡±, argumenta un bar¨®n, como la mayor¨ªa de los consultados desde el anonimato.

El que no tiene problemas en explicar con su nombre que Casado no tiene otra opci¨®n ante los indultos que la oposici¨®n contundente es el presidente del PP de Catalu?a, Alejandro Fern¨¢ndez: ¡°En este tema no hay debate, ni matices, ni se puede pensar en t¨¦rminos electorales o territoriales porque afecta a la esencia de la democracia espa?ola, a la dignidad de las instituciones, de la justicia, y el presidente S¨¢nchez tiene que ver claro nuestro rechazo a que ¨¦l haya comprado el discurso separatista de sus socios¡±.

El veterano Francisco de la Torre es considerado en el PP, tras sus 21 a?os con el bast¨®n de la alcald¨ªa de M¨¢laga, como un abanderado de los grandes consensos con el PSOE. En su reflexi¨®n intenta comprenderlo todo, pero concluye que los separatistas se lo est¨¢n poniendo imposible a S¨¢nchez: ¡°El clima pol¨ªtico actual no ayuda al entendimiento, ni entre el Gobierno y el PP ni para un di¨¢logo que ser¨ªa bueno con los independentistas, a los que no se les pueden dar los indultos en estas condiciones¡±. De la Torre se atreve a dar un consejo con su tono constructivo al presidente: ¡°Habr¨ªa que hacerles llegar a los l¨ªderes catalanes el mensaje de que para que ese camino de los indultos sea comprendido en el resto de Espa?a, tiene que ser dentro del marco constitucional, y de que darlos sin m¨¢s fuera de la Constituci¨®n no es algo bueno¡±.

Ceuta y Col¨®n, decisiones clave

Pablo Casado ha intentado hacer complicados equilibrios durante todo su liderazgo, despu¨¦s de tres a?os de campa?as electorales de todo signo y varias derrotas, pero a¨²n m¨¢s desde que rompi¨® con Vox oficialmente en oto?o en el debate de la fracasada moci¨®n de censura. ¡°Hasta aqu¨ª hemos llegado¡±, le solt¨® al l¨ªder de la formaci¨®n ultra, Santiago Abascal, que se lo tom¨® como una traici¨®n. Desde entonces, no han retomado sus antiguas buenas relaciones. Y estos d¨ªas tampoco han hablado para coordinarse sobre la participaci¨®n de ambos partidos en la concentraci¨®n de Uni¨®n 78. En el PP s¨ª admiten haber tenido contactos con Rosa D¨ªez, la exl¨ªder de UPyD, que ahora encabeza esa plataforma con Fernando Savater y Mar¨ªa San Gil, pero no con Vox.

El PP ha endurecido mucho sus ataques al presidente Pedro S¨¢nchez, pero precisan que no son lo mismo que la extrema derecha. Y exponen algunos ejemplos de esas diferencias en las que creen haber ofrecido su ¡°mano tendida¡±: Marruecos, plan b ante la pandemia o el dec¨¢logo sobre la despoblaci¨®n.

En el PP intentan proyectar ahora, al favor de las ¨²ltimas encuestas, una imagen presidenciable de Casado. Pretenden que de la convenci¨®n nacional prevista para oto?o salga un programa completo y ambicioso sobre una alternativa viable. Y, finalmente, insisten en que la actual legislatura est¨¢ ya ¡°en v¨ªa muerta y agotada¡±. Tanto S¨¢nchez como todos los componentes del Ejecutivo, del PSOE y de Unidas Podemos, as¨ª como otros socios habituales han recalcado estos d¨ªas que queda mucho mandato por delante y muchos asuntos por abordar.

Para dotar a Casado de ese perfil de Estado en el PP resaltan los matices que le distancian de Abascal. Y ah¨ª recuerdan que, como consecuencia de la reciente crisis diplom¨¢tica con Marruecos sobre Ceuta, el comit¨¦ de direcci¨®n del partido debati¨® si Casado deb¨ªa ir a la ciudad aut¨®noma ¡ªcomo s¨ª hizo Abascal¡ª y termin¨® imponi¨¦ndose la decisi¨®n de no ir. No quer¨ªan parecer oportunistas ni agitar m¨¢s las aguas. En la protesta del 13-J en Col¨®n, aunque el PP ¡°estar¨¢ representado¡±, intentar¨¢n evitar una foto conjunta con Vox, por lo que se duda de la conveniencia de que acuda el l¨ªder. En cualquier caso, el portavoz nacional y alcalde de la capital, Jos¨¦ Luis Mart¨ªnez-Almeida, ya ha avanzado su disposici¨®n a estar. Y habr¨¢ m¨¢s dirigentes.

En el PP constatan que ante las actuales divergencias sobre Catalu?a ser¨¢ imposible pactar la renovaci¨®n del Consejo General del Poder Judicial, que lleva dos a?os y medio caducado.