Santander-Bilbao: el tren que agoniza por la pandemia
Usuarios de la l¨ªnea reclaman m¨¢s frecuencias y mejoras en el servicio para frenar la paulatina despoblaci¨®n de las zonas rurales
El tren Santander-Bilbao ven¨ªa languideciendo los ¨²ltimos a?os y la pandemia del coronavirus ha terminado por agravar su situaci¨®n. Los usuarios de esta l¨ªnea ferroviaria centenaria han elevado su grito contra Renfe por la supresi¨®n de frecuencias, el p¨¦simo estado de conservaci¨®n de las v¨ªas, los retrasos y aver¨ªas continuas y la falta de personal que est¨¢n poniendo en peligro su continuidad. El presidente de Cantabria, Miguel ?ngel Revilla, ha cal...
El tren Santander-Bilbao ven¨ªa languideciendo los ¨²ltimos a?os y la pandemia del coronavirus ha terminado por agravar su situaci¨®n. Los usuarios de esta l¨ªnea ferroviaria centenaria han elevado su grito contra Renfe por la supresi¨®n de frecuencias, el p¨¦simo estado de conservaci¨®n de las v¨ªas, los retrasos y aver¨ªas continuas y la falta de personal que est¨¢n poniendo en peligro su continuidad. El presidente de Cantabria, Miguel ?ngel Revilla, ha calificado el servicio de ¡°tercermundista¡±. Los alcaldes de las zonas afectadas ¡ªla comarca c¨¢ntabra de As¨®n-Ag¨¹era y las Encartaciones de Bizkaia, principalmente¡ª denuncian que la ¡°falta de un transporte p¨²blico digno¡± est¨¢ provocando una lenta despoblaci¨®n de muchos municipios rurales. ¡°Esto tambi¨¦n es la Espa?a vaciada¡±, se lamenta el alcalde de Ramales de la Victoria (Cantabria), C¨¦sar Garc¨ªa.
El pasado 6 de julio se cumplieron 125 a?os desde la creaci¨®n de la l¨ªnea Santander-Bilbao (118,6 kil¨®metros) que conecta estas dos capitales y atraviesa por peque?as localidades del interior a lo largo de 31 paradas. El servicio funcionaba con tres viajes diarios en ambas direcciones hasta marzo del a?o pasado. Cuando en marzo de 2020 se decret¨® el confinamiento domiciliario durante el estado de alarma, el operador decidi¨® suprimir dos de los servicios y mantener solamente el de la ma?ana. ¡°No pod¨ªamos ir y volver en tren en el mismo d¨ªa¡±, afirma Gloria Lux¨¢n en nombre de la plataforma ciudadana que agrupa a los usuarios que reclaman mejoras. El pasado 11 de julio se recuper¨® el tren del mediod¨ªa, pero los viajeros lo consideran insuficiente. Renfe dej¨® hace muchos a?os de contabilizar los viajeros que usan esta l¨ªnea. La ¨²ltima estad¨ªstica oficial es de 2012, cuando se alcanzaron los 99.652 usuarios, pero la cifra ser¨¢ inferior en la actualidad porque muchas personas han decidido apearse del tren. Esto ocurre, en gran medida, por las numerosas incidencias que soportan, como sucedi¨® este pasado lunes. El tren matutino que ven¨ªa de Santander y deb¨ªa terminar su ruta en Bilbao se dio la vuelta en Karrantza y volvi¨® a tomar la direcci¨®n hacia la capital c¨¢ntabra, ante el asombro y el enfado de todos los pasajeros.
El tren tarda tres horas en recorrer el trayecto completo (cuando los autobuses lo hacen en hora y media y en coche, poco m¨¢s de una hora). ¡°Tres horas si todo va bien¡±, apostilla Lux¨¢n. Un d¨ªa se aver¨ªa la m¨¢quina, otro cae un ¨¢rbol a las v¨ªas, ha solido descarrilar o quemarse uno de los vagones, cae agua del sistema de aire acondicionado¡ Los usuarios cuentan por decenas las incidencias y se quejan del continuo empeoramiento del servicio. Son habituales los retrasos, dice Lux¨¢n, no funcionan las m¨¢quinas expendedoras de billetes, no suele haber revisores. A?ade que en los tramos sin electrificar el tren circula a 10 kil¨®metros por hora. Esta vecina de Karrantza asegura que ¡°muchas veces tiene que venir un autob¨²s a recoger a los viajeros porque el tren ha dejado de funcionar y el maquinista ha terminado su jornada de trabajo¡±.
El alcalde de Karrantza (2.700 habitantes), Ra¨²l Palacio, incide en el ¡°abandono institucional¡± que est¨¢n sufriendo: ¡°La gente no puede usar este tren para ir a trabajar o al m¨¦dico; los estudiantes tampoco, y tienen que pasar la semana en Bilbao. Esta tambi¨¦n es la realidad de Euskadi¡±, comenta enfadado. Y a?ade que ¡°todas las reclamaciones a Renfe han sido bald¨ªas¡± porque ¡°supedita el restablecimiento de las frecuencias a una mayor demanda¡±. ¡°?Pero c¨®mo va a haber demanda de un servicio tan lamentable?¡±, protesta. Su hom¨®logo de Ramales (2.880 habitantes) recuerda que cuando ¨¦l era ni?o ¡°el tren tardaba menos que hoy¡±, e insiste en que ¡°los pueblos del interior necesitan este medio de comunicaci¨®n porque est¨¢n al l¨ªmite de la despoblaci¨®n¡±.
El PNV anunci¨® a finales de julio que ante las quejas de los usuarios y el deterioro del servicio va a reclamar en el Congreso y en el Senado el incremento de las frecuencias diarias en el servicio ferroviario que conecta Bizkaia con Cantabria. Pero tambi¨¦n una mayor inversi¨®n para modernizar la l¨ªnea entre Bilbao y la capital c¨¢ntabra. Renfe responde que va a recuperar la totalidad de los servicios de Media Distancia entre Bilbao y Santander el pr¨®ximo 5 de septiembre de 2021 hasta llegar a las tres diarias que hab¨ªa antes de la pandemia. Pero de incrementar las frecuencias no dice nada.
El Ministerio de Transportes a?ade que Adif, el gestor de la infraestructura, sigue invirtiendo y recuerda que el pasado mayo aprob¨® una partida de 7,8 millones de euros para la reconstrucci¨®n de los t¨²neles de Arroyo y Callejo, en el municipio vasco de Zalla. A?ade que hay proyectos que ascienden a m¨¢s de 100 millones para mejorar determinados aspectos de la denominada v¨ªa de ancho m¨¦trico, en fase de redacci¨®n o de adjudicaci¨®n y ejecuci¨®n, en el tramo de Cantabria, ¡°que confirman el compromiso¡± de la administraci¨®n nacional con el tren Santander-Bilbao.
La Plataforma en Defensa de ese tren ha reunido m¨¢s de 8.000 firmas que apoyan sus reivindicaciones y ha celebrado en estas capitales sendas protestas por el ¡°constante deterioro¡± del servicio ferroviario. La desatenci¨®n institucional, expone en su manifiesto, ¡°est¨¢ condenando a las Encartaciones y a la Cantabria interior a ser comarcas de segunda o tercera¡±. ¡°Hay hartazgo entre los vecinos de esta zona, que ya de por s¨ª est¨¢ castigada por la falta de infraestructuras y con accesos por carretera en p¨¦simas condiciones¡±, asegura la plataforma. El comit¨¦ de empresa de Renfe hace suyas estas reclamaciones ciudadanas, expone Marcos Alejo, del sindicato UGT: ¡°Hemos pedido m¨¢s personal y tambi¨¦n mejoras en la l¨ªnea porque la seguridad no es adecuada. Pero siempre nos dan largas. El dinero p¨²blico va para la alta velocidad y eso est¨¢ repercutiendo negativamente en el tren convencional¡±.
Los alcaldes se han dirigido por carta al Ministerio de Transportes y a los Gobiernos vasco y c¨¢ntabro para reclamar inversiones y un mantenimiento adecuado de la l¨ªnea. Solo han recibido ¡°buenas palabras¡±, comenta el regidor de Ramales. Tienen el compromiso de Revilla de que va a interceder ante el ministerio y la palabra del Ejecutivo de Urkullu de que est¨¢ ¡°peleando¡± por lograr la transferencia de este servicio. Palacio apunta que han llegado a plantear que Euskadi logre una encomienda de gesti¨®n y esta la asuma Euskotren. La soluci¨®n sigue en v¨ªa muerta.