Lecciones aprendidas en Sierra Bermeja

La lluvia que cay¨® durante toda la noche del lunes en el valle del Genal se convirti¨® en la mejor aliada de los m¨¢s de mil profesionales que han estado batallando durante seis d¨ªas contra el incendio de Sierra Bermeja, cuyas llamas, de una virulencia inusitada, acabaron con la vida de un bombero, han calcinado casi 10.000 hect¨¢reas de monte y han mantenido en vilo a los vecinos de la zona. A primeras horas de la ma?ana de este martes se daba por controlado el fuego, aunque a¨²n quedan semanas de duro trabajo para terminar de extinguirlo.

El fuego oblig¨® a evacuar por precauci¨®n a casi 3.000 habitantes. Los 400 vecinos de Genalguacil, desalojados el domingo, fueron ayer los ¨²ltimos en regresar. ¡°Cuando hemos llegado al pueblo, la loma estaba toda negra¡±, lamenta Andr¨¦s, vecino de Genalguacil que ha regresado a casa esta misma ma?ana tras pasar dos d¨ªas en casa de familiares en Benarrab¨¢, ¡°eso s¨ª que impacta¡±. ?l, su mujer, su hija y su suegra fueron desalojados la noche del s¨¢bado de forma preventiva, cuando el fuego empez¨® a amenazar seis municipios de la sierra. Genalguacil ha sido, adem¨¢s, el ¨²ltimo n¨²cleo urbano ad¨®nde se ha permitido hoy el retorno de los vecinos. ¡°El fuego estaba en Casares metido¡±, ilustra, ¡°porque el viento lo ha vuelto, si no se hubiera quemado todo¡±.

Este incendio ha sorprendido a todos los expertos por su agresividad y virulencia, avivada por vientos err¨¢ticos, hasta el punto de ser considerado como de ¡°sexta generaci¨®n¡±. ¡°Lo que nos queda por estudiar es c¨®mo determinamos las previsiones meteorol¨®gicas en situaciones tan complejas, c¨®mo adecuamos determinados procedimientos para incendios en los que se puede meter a muy poco personal y tiene que ser organizado; nos queda por estudiar y explicar a los ciudadanos todo ese tema¡±, se?al¨® este martes el director del Centro de Operaciones Regional del Infoca, Jes¨²s S¨¢nchez, en un resumen de la dimensi¨®n del fuego y de las dificultades en trazar estrategias que deb¨ªan modificar a lo largo del d¨ªa, en funci¨®n de los cambios en los comportamientos de las llamas.

¡°Debemos mantener una nueva relaci¨®n con los incendios. Asumir que estos incendios de tercera, cuarta, quinta o sexta generaci¨®n est¨¢n fuera de nuestra capacidad de extinci¨®n¡±, a?ade V¨ªctor Resco, profesor de Ingenier¨ªa Forestal en la Universidad de Lleida. ¡°Cuando las llamas est¨¢n a m¨¢s de tres o cuatro metros de altura se libera tanta energ¨ªa que es imposible de combatir¡±, abunda.

Mientras unos volv¨ªan a sus hogares, otros se iban de Sierra Bermeja. La activaci¨®n del nivel cero del Plan de Emergencias por Incendios Forestales de Andaluc¨ªa a primera hora de ayer determin¨® el regreso del personal venido de otras comunidades para ayudar en las tareas de extinci¨®n. De los casi mil trabajadores que han estado batallando con las llamas y las 50 aeronaves que los han acompa?ado por el aire, solo 200 bomberos -100 en cada turno- y 11 helic¨®pteros continuaran en la brega.

La mayor efectividad

Los 260 integrantes de la Unidad Militar de Emergencias (UME) tambi¨¦n pusieron rumbo a la base de Mor¨®n de la Frontera entre los aplausos de los vecinos de Estepona que se hab¨ªan acercado al puesto de mando. La UME fue movilizada a primera hora del domingo, despu¨¦s de que durante la madrugada una pavesa originara un nuevo incendio en la sierra que oblig¨® a la evacuaci¨®n de seis municipios. Fue la apertura inesperada de ese nuevo frente lo que determin¨® a la direcci¨®n del Infoca a solicitar el apoyo del Ej¨¦rcito. ¡°Hasta entonces todos los recursos del Infoca eran m¨¢s que suficientes¡±, asegur¨® el jefe de extinci¨®n, Alejandro Garc¨ªa.

La UME ha estado protegiendo los municipios de Jubrique y Genalguacil. ¡°Nos dedicamos a desbrozar y establecer una l¨ªnea de defensa¡±, se?ala un portavoz. Una actividad que extendieron ese mismo d¨ªa a los pueblos de Pujarra y Faraj¨¢n, tambi¨¦n evacuados, y el lunes a Casares, que era adonde tornaron las llamas ese d¨ªa. Entonces tambi¨¦n atacaron la primera l¨ªnea de fuego con los bomberos del Infoca. ¡°Siembre qued¨® un ret¨¦n en Jubrique y Genalguacil¡±, advierte el portavoz de la UME.

¡°Me ha llegado a los o¨ªdos que la gente no entiende por qu¨¦ no met¨ªamos a aviones y m¨¢s personal para apagar el fuego¡±, cont¨® este martes S¨¢nchez, en referencia a las cr¨ªticas por la tardanza en activar la presencia de la UME. ¡°Que entiendan que en una vereda de monta?a, en la que se va a fila de a uno, el que trabaja es el que va delante. Los dem¨¢s no pueden trabajar porque no caben m¨¢s. Eso es lo que ha estado pasando en este incendio¡±, explic¨®.

El presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, puso a disposici¨®n de la Junta esos efectivos y los del Ministerio para la Transici¨®n Ecol¨®gica y el Reto Demogr¨¢fico en la noche del jueves, como reconoci¨® y agradeci¨® el presidente andaluz, Juan Manuel Moreno. Un ofrecimiento que hab¨ªa hecho horas antes el Ministerio del Interior y que reiter¨® un d¨ªa despu¨¦s, informa ?scar L¨®pez-Fonseca. Desde el Gobierno andaluz se ha insistido en que es la direcci¨®n t¨¦cnica del Infoca quien ha determinado la estrategia. ¡°Conf¨ªo plenamente en el Infoca¡±, asegur¨® Moreno este lunes.

El viernes, cuando se activ¨® el nivel 2 de alerta y ya se hablaba de la virulencia inusitada del incendio, Garc¨ªa advirti¨®: ¡°Aunque se duplicaran por 10 los efectivos no se lograr¨ªa apagar este incendio¡±. ¡°La sensaci¨®n de que si no va gente a apagar un fuego este empeora es irreal, muchas veces no se va a solucionar nada¡±, advierte Resco. ¡°La lucha contra este tipo de incendios no pasa por la extinci¨®n, sino por la prevenci¨®n. Es necesaria una modificaci¨®n a gran escala del paisaje¡±, incide, en la misma l¨ªnea que hace unos d¨ªas hizo el director del Infoca. ¡°Llevamos mucho tiempo hablando de la complejidad que provoca el abandono del medio rural o el cambio clim¨¢tico y hoy lo estamos viviendo en primera persona¡±, se lament¨®.

Las llamas no han llegado a las casas, pero s¨ª han consumido hect¨¢reas de campo, sobre todo pino y alcornoque. ¡°No hemos bajado a verlo, pero parece que el de mi hermano y mi hermana s¨ª se ha quemado¡±, explica Andr¨¦s. Gran parte del terreno, que coincide con manchas verdes sobre la ceniza, se ha salvado gracias al verdor del casta?o, ubicuo en la zona que rodea el pueblo-museo: ¡°Siempre est¨¢ m¨¢s limpio porque se recoge todos los a?os¡±.

El fuego tambi¨¦n se qued¨® a las puertas del pinsapar de Los Reales, pero no respet¨® la vida de Carlos Mart¨ªnez, el bombero de 44 que falleci¨® mientras luchaba en su extinci¨®n el pasado jueves. Una vez contenido el incendio, sus compa?eros hablan m¨¢s abiertamente de su memoria. Uno de los mejores recuerdos, el dibujo de un bombero con forma de ¨¢ngel que abre el grifo de una nube. Una premonici¨®n de la lluvia que ha disipado la angustia en la Sierra Bermeja.