La estrategia del Gobierno: m¨¢s empat¨ªa frente al desgaste
Tras la encuesta de EL PA?S, La Moncloa busca m¨¢s cercan¨ªa del presidente frente a la ofensiva de la derecha. El presidente ir¨¢ a m¨¢s actos con trabajadores a los que ayudaron las medidas
La pol¨ªtica es ajena a la unanimidad, incluso en el an¨¢lisis de los datos. Todo depende del cristal con que se mire. Con la encuesta de EL PA?S de la semana pasada, que caus¨® un fuerte impacto en el Gobierno, sucede eso mismo. Cada uno se queda con lo que m¨¢s le gusta. Pero uno de los miembros del Gobierno resume el sentir general: ¡°es una sensaci¨®n agridulce¡±. Por un lado, el PSOE sigue primero, las reformas gustan, la gesti¨®n es buena, pero por otro el Gobierno no convence. ¡°Hacerlo bien cayendo mal¡±, resumi¨® Bel¨¦n Barreiro, principal responsable del sondeo.
Tras su publicaci¨®n, y la evidencia del desgaste tras dos a?os de pandemia, en La Moncloa han decidido profundizar en una l¨ªnea que ya ven¨ªan trabajando desde la entrada del nuevo equipo con ?scar L¨®pez al frente: buscar m¨¢s empat¨ªa del presidente, m¨¢s cercan¨ªa, con actos diferentes y un tono distinto.
Tanto su equipo como el propio S¨¢nchez son muy conscientes de esa imagen de distancia que ofrece el presidente, seg¨²n los sondeos. Y est¨¢n trabajando para tratar de cambiarla. La idea es que se visualice con m¨¢s claridad el efecto real de la gesti¨®n. Salir de los n¨²meros y los actos oficiales con atril para ir, por ejemplo, a una empresa que salv¨® los empleos gracias a los ERTE, una de las medidas que seg¨²n los sondeos m¨¢s claramente apoyan los ciudadanos y atribuyen al Gobierno.
La nueva pol¨ªtica en casi todo el mundo busca discurso emocionales, directos, comprensibles. Incluso l¨ªderes de la vieja escuela, como Joe Biden, presidente de EEUU, est¨¢n ensayando formas m¨¢s rupturistas, como el conocido ¡°pay them more¡± [¡±pagadles m¨¢s¡±, como mensajes a los empresarios para que suban los sueldos] que se hizo viral. La vicepresidenta Yolanda D¨ªaz apuesta por mensajes de este tipo. S¨¢nchez, con una imagen muy presidencialista que se fragu¨® en la etapa de Iv¨¢n Redondo como jefe de Gabinete, est¨¢ a¨²n lejos de eso, pero quiere buscar un nuevo tono y sobre todo m¨¢s contacto con los ciudadanos: salir m¨¢s de La Moncloa, donde la pandemia lo ha forzado a estar mucho m¨¢s de lo habitual.
En el Ejecutivo se encuentran con un problema que la encuesta pone en evidencia. El ritmo de reformas y las dimensiones del plan de recuperaci¨®n es tan descomunal, que no hay digesti¨®n posible y todo parece distante, una ensalada de n¨²meros y listas de leyes. ¡°En un mes hemos aprobado un Presupuesto, una reforma de pensiones, una laboral y un cambio profundo de los interinos. Antes, con eso hac¨ªas una legislatura. Ahora se devora en un mes¡±, se?ala un ministro.
Adem¨¢s, todos los sondeos detectan que la derecha est¨¢ muy movilizada en la oposici¨®n a S¨¢nchez, y los progresistas mucho m¨¢s desactivados. Esto puede ser un problema para las elecciones de Castilla y Le¨®n, las m¨¢s inmediatas, donde el PP espera arrasar. S¨¢nchez participar¨¢ cuatro veces en la campa?a con sendos m¨ªtines en Valladolid, Le¨®n Soria y Zamora. Esta comunidad, gobernada por el PP desde 1989, es un escenario casi imposible para los socialistas, pero ellos insisten en que el escenario en pol¨ªtica nacional sigue siendo muy favorable al Gobierno. ¡°Si hace dos a?os me dices que estamos as¨ª despu¨¦s de una pandemia, que seguimos primeros en las encuestas y adem¨¢s sacamos la reforma laboral, los Presupuestos, y tenemos los fondos europeos para modernizar el pa¨ªs y con 20 millones de ocupados no me lo creo¡±, resume otro miembro del Ejecutivo.
¡°Una crisis de este calibre es como para que se lleve por delante a cualquier Gobierno. Y sin embargo no es as¨ª. El PP se lo ha jugado todo a una hecatombe que nunca lleg¨®. Ha forzado demasiado la m¨¢quina. Los pr¨®ximos dos a?os van a ser buenos econ¨®micamente y eso cambiar¨¢ por completo el ambiente social e influir¨¢ en la pol¨ªtica¡±, se?ala otro ministro.
La coalici¨®n ha vivido una semana dif¨ªcil por la tensi¨®n a cuenta de las declaraciones de Alberto Garz¨®n sobre la calidad de la carne de macrogranjas y la desautorizaci¨®n de varios ministros y del propio presidente. Sin embargo, a partir del mi¨¦rcoles, La Moncloa orden¨® parar al ver el evidente desgaste interno y todo qued¨® zanjado cuando la vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, dijo que Garz¨®n no ten¨ªa que dimitir, sino ¡°al contrario¡±. En el Gobierno nadie descarta m¨¢s tensiones y m¨¢s en periodo electoral, pero la estabilidad interna del Ejecutivo no es algo que inquiete en La Moncloa m¨¢s all¨¢ de la posibilidad, que tambi¨¦n detectan las encuestas, de que un sector del votante socialista al que nunca le gust¨® la idea no apoye esta in¨¦dita f¨®rmula. Pero el Ejecutivo no teme una fuga de votos por el centro que las encuestas no identifican.
El gran desaf¨ªo para la coalici¨®n es la ola de derecha que detectan todos los sondeos, y de la que Vox parece el principal beneficiado. Con el hundimiento de Ciudadanos, el bloque de derecha pasa de tres a dos competidores, y eso en unas elecciones generales puede ayudar much¨ªsimo a los conservadores. Vox estaba disparado en el sondeo de EL PA?S. Otras encuestas lo dan m¨¢s bajo, y eso hace que pongan al PP por delante del PSOE. Esto es clave en unas generales, porque el primer partido tiene premio en el sistema provincial y se puede llevar muchos esca?os gracias a eso.
S¨¢nchez, en cualquier caso, recuerdan en La Moncloa, sigue estando entre los pol¨ªticos mejor valorados, mientras su rival, Pablo Casado, est¨¢ hundido. Aunque en el Ejecutivo s¨ª admiten que la campa?a de acoso contra S¨¢nchez de la oposici¨®n, para ellos similar a que sufri¨® Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero o antes Felipe Gonz¨¢lez, tiene su efecto. En algunos sectores del PSOE se plantea la duda de que el presidente, por primera vez en la historia de la pol¨ªtica espa?ola, no tiene un escudo, un dirigente que haga de parapeto y sea el que choque con el PP. Antes ese papel lo hac¨ªan Jos¨¦ Luis ?balos o Carmen Calvo. S¨¢nchez opt¨® esta vez por un Gobierno m¨¢s ¡°amable¡±, sin perfiles duros, que apenas entra al choque con la oposici¨®n.
No es un despiste, est¨¢ buscado. Y en su entorno se?alan que es porque los ciudadanos est¨¢n hartos de crispaci¨®n y por eso se busca este perfil m¨¢s de explicaci¨®n, sin entrar al choque. Es S¨¢nchez, sin escudo, el que entra directamente a veces, como hizo ayer en Granada frente a los ataques del PP contra la gesti¨®n de los fondos europeos. El presidente parece c¨®modo con esa situaci¨®n, pero algunos veteranos pol¨ªticos tienen dudas de que sea una buena idea.
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