Condenado a c¨¢rcel el tirador que quer¨ªa matar a Pedro S¨¢nchez: ¡°Ten¨ªa fijaci¨®n y determinaci¨®n¡±

Las excusas de Manuel Murillo, un ultraderechista de 65 a?os, no han convencido a los magistrados de la Audiencia Nacional. El tribunal ha condenado a siete a?os y medio de prisi¨®n a este vigilante de seguridad, nost¨¢lgico del franquismo, que amenaz¨® con matar al presidente Pedro S¨¢nchez y busc¨® ayuda para perpetrar sus planes tras acopiar un importante arsenal de armas, que inclu¨ªa rev¨®lveres y un fusil de asalto. ¡°Contaba con la persistencia, fijaci¨®n y desvelada determinaci¨®n¡± de acabar con la vida del jefe del Ejecutivo, concluyen los jueces en una resoluci¨®n de 50 p¨¢ginas, donde echan as¨ª por tierra las alegaciones de la defensa: el acusado insisti¨® en que estaba bebido cuando envi¨® los mensajes que lo incriminan. Tampoco se ha acreditado, seg¨²n el fallo, que sufriera ninguna alteraci¨®n ps¨ªquica.

Los Mossos detuvieron a Murillo en septiembre de 2018. Hijo del ¨²ltimo alcalde franquista de Rub¨ª (Barcelona), los investigadores lo hab¨ªan puesto bajo sospecha tras recibir la alerta de que hab¨ªa comentado a sus conocidos que quer¨ªa matar a S¨¢nchez y que ya hab¨ªa comenzado a moverse para ejecutar su idea. De hecho, no solo se dedic¨® durante meses a compartir por WhatsApp sus amenazas ¡ª¡°Nos hemos de mojar y actuar. Yo estoy dispuesto. Mi mayor ilusi¨®n es meter al traidor de S¨¢nchez debajo de la l¨¢pida de Franco¡±, escribi¨® en una ocasi¨®n, por ejemplo¡ª, sino que tambi¨¦n lleg¨® a contactar con una coordinadora local de Vox para comentarle sus planes. ¡°Con la creencia de que dispon¨ªan de capacidad para proporcionarle medios y contactos que le auxiliasen en la materializaci¨®n de su prop¨®sito mortal¡±, subraya la Audiencia Nacional en su dictamen, fechado el 11 de abril.

El tribunal, que lo considera culpable de un delito de homicidio en grado de proposici¨®n y otro de dep¨®sito de armas de guerra, explica que Murillo se encontraba movido por ¡°el descontento y rechazo a la situaci¨®n pol¨ªtica¡±. Para ¨¦l, Espa?a navegaba a la ¡°deriva¡±. ¡°Y fue interiorizando que la soluci¨®n pasaba por causar la muerte del presidente del Gobierno, para lo que se empe?¨® en requerir ayuda para llevarlo a cabo¡±, reza la sentencia. En ¡°su mente¡±, prosigue el fallo, no se planteaba el ¡°cambio¡± a trav¨¦s de ¡°mecanismos democr¨¢ticos¡±, sino solo mediante ¡°un alzamiento nacional¡± o, en su caso, por ¡°la v¨ªa m¨¢s madurada de poner fin al que atribu¨ªa los males¡±, Pedro S¨¢nchez (PSOE).

Para el sexagenario, seg¨²n los mensajes incluidos en el sumario, la gota que colm¨® el vaso fue el anuncio del Gobierno de que pretend¨ªa exhumar los restos del dictador Francisco Franco del Valle de los Ca¨ªdos ¡ªuna iniciativa que se llev¨® finalmente a cabo en 2019¡ª. En su opini¨®n, no pod¨ªa dejar que lo hicieran. ¡°No podemos permitir que humillen al GENERAL?SIMO [sic] ni a Jos¨¦ Antonio Primo de Rivera. Es una venganza por haber perdido la guerra. Estos no solo saben ganar la guerra cuando el otro est¨¢ muerto, sino que no tienen cojones ni saben luego c¨®mo llevar un pa¨ªs¡±, escribi¨® el 18 de julio de 2018 en un grupo de WhatsApp llamado Terrasa por Espa?a.

¡°Si tocan a Franco, sugiero que empiece la guerra otra vez. Por nuestro honor, patriotas. No [lo] podemos consentir. Y esta vez no dejaremos ni uno¡±, a?ade Murillo en otro mensaje.

En su sentencia, la Audiencia Nacional admite que los planes del condenado se encontraban en una ¡°fase embrionaria¡±, pero a?ade que ya hab¨ªa ¡°requerido ayuda para su perpetraci¨®n¡±. Adem¨¢s, contaba con el arsenal que hab¨ªa acumulado, dispon¨ªa de tres licencias de armas ¡ªde tipo F (campos y galer¨ªas), D (armas largas de caza mayor) y E (armas de tiro deportivo y escopetas de caza)¡ª y se hab¨ªa entrenado ¡°en los ¨²ltimos tiempos¡±, seg¨²n ¨¦l mismo cont¨® a sus interlocutores. Un c¨®ctel de circunstancias que ¡°allanaban¡± el camino al ultraderechista si llegaba a conocer ¡°cualquier movimiento¡± de S¨¢nchez. Tambi¨¦n, ¡°hab¨ªa comprado armas nuevas y confeccionado otras¡±.

El riesgo exist¨ªa y as¨ª lo explican los magistrados: ¡°La dificultad que debe representar, y as¨ª debe ser, atentar contra la vida del presidente del Gobierno har¨ªa pensar que la ideaci¨®n del acusado estar¨ªa pr¨®xima a lo descabellado y, por ende, ante una propuesta no cre¨ªble ni en consecuencia factible. Efectivamente, no hay un plan definitivamente urdido, tramado y menos a¨²n concluido. Pero acontece una circunstancia indicativa de la alta peligrosidad que supone la determinaci¨®n adoptada por Murillo: el arsenal de armas intervenidas al mismo, no obviando que su afici¨®n desde hac¨ªa muchos a?os atr¨¢s es el tiro, yendo continuamente a un club a practicar¡±.

¡°Es cierto que no se est¨¢ ante un riesgo actual ni inminente. Pero s¨ª, al menos, remoto para la integridad f¨ªsica de [S¨¢nchez]¡±, dice el tribunal, que recuerda que el tirador se hizo con la agenda del presidente del Gobierno publicada por la Secretar¨ªa General del PSOE. Un documento que, seg¨²n se?al¨® el fiscal en el juicio, le hizo llegar la coordinadora local de Vox, aunque esta lo borr¨® despu¨¦s y acudi¨® a los Mossos para dar la voz de alarma. ¡°Ha de ponerse el acento en que su proyecto criminal pod¨ªa terminar tomando forma con los pasos que empezaba a dar, pues en otra de las conversaciones tra¨ªa a colaci¨®n c¨®mo fue asesinado el presidente [estadounidense] John F. Kennedy¡±, argumentan los jueces, que reproducen de seguido uno de los mensajes que le envi¨® el acusado: ¡°Solo necesito periodistas que siempre est¨¢n all¨ª donde la noticia, para ir como ellos al punto, en el lugar y la hora que estar¨¢ S¨¢nchez¡±.

Cuando los Mossos lo arrestaron en septiembre de 2018, el ultraderechista llevaba en su Seat Le¨®n, entre otras cosas, una pistola neum¨¢tica; una carabina calibre 22; un pu?al; ¨²tiles diversos para la pr¨¢ctica del tiro, como tr¨ªpodes y soportes; gafas de tiro; dianas de papel; prism¨¢ticos; perdigones; visores telesc¨®picos; balines; unas esposas; y un cuchillo. En su casa de Terrassa (Barcelona) hallaron m¨¢s material: tres rev¨®lveres; una escopeta; un fusil de asalto; una ballesta; numerosa munici¨®n; ocho recipientes con p¨®lvora; un ¡°petardo¡± de 24 cent¨ªmetros con explosivo y metralla en su interior; y un ¡°supresor de sonido¡± para arma corta.

La Fiscal¨ªa solicitaba inicialmente para Murillo 18 a?os de c¨¢rcel, pero rebaj¨® su petici¨®n a 13 a?os durante la vista oral. Por su parte, la defensa pidi¨® la absoluci¨®n o que se considerase el consumo de alcohol y de alprazolam ¡ªun f¨¢rmaco¡ª como eximente o como atenuante. Entre sus argumentos, el sexagenario aleg¨® en el juicio que no se reconoc¨ªa en esos mensajes. ¡°Yo soy normal. No podr¨ªa hacer estas cosas¡±, dijo: ¡°En esa ¨¦poca empec¨¦ a beber orujo y cada vez beb¨ªa m¨¢s [...] Son animaladas. Si lo dije, es porque estar¨ªa alucinando¡±. Tambi¨¦n, en su ¨²ltimo turno de palabra, a?adi¨®: ¡°Me arrepiento mucho de lo sucedido. Fue fruto de la soledad y de los problemas que ten¨ªa [...] Era el efecto de la bebida y de haber tomado trankimazin por la ma?ana, a ver si dorm¨ªa [...] Me sent¨ª salvador de la patria¡±.