El PP reprocha a los barones socialistas no rebelarse contra S¨¢nchez

Los nueve presidentes socialistas, que dentro de seis meses tendr¨¢n que examinarse en las elecciones auton¨®micas de sus comunidades, junto a alcaldes y concejales de toda Espa?a, puestos a elegir hubieran preferido no tocar ahora la asignatura de la supresi¨®n del delito de sedici¨®n en el C¨®digo Penal. Unos, por evitar soliviantar a los ciudadanos que acogen de mal grado cualquier atisbo de alegr¨ªa para el independentismo catal¨¢n sobre sus aspiraciones; otros, por no facilitar resquicios al PP para desviarse de los asuntos de la comunidad. Pero lo tendr¨¢n que afrontar y ya est¨¢n concienciados. El PP no encontrar¨¢ facilidades por parte de los presidentes socialistas para la rebeli¨®n contra el presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez. La mayor¨ªa se alinea con ¨¦l. Quienes no, el castellano-manchego Emiliano Garc¨ªa-Page y el aragon¨¦s Javier Lamb¨¢n, contrarrestar¨¢n en lo que puedan el objetivo de los populares de colocar la supresi¨®n de los delitos de sedici¨®n en un asunto presente y recurrente por encima de los de la comunidad. Los populares son conscientes desde las ¨²ltimas 72 horas que poco pueden rascar de los gobernantes socialistas. Se dirigir¨¢n directamente a sus electores con la esperanza de resquebrajar la imagen y la gesti¨®n de los nueve presidentes socialistas.

En la sede nacional del PP y en las regionales, no es precisamente tranquilidad, y mucho menos euforia, lo que reina sobre eventuales victorias seguras en las elecciones del pr¨®ximo ¨²ltimo domingo de mayo. En conversaciones fuera de micr¨®fono y con los datos en la mano, se resalta la fortaleza de los presidentes socialistas, tanto en su valoraci¨®n personal como por su gesti¨®n.

Los problemas est¨¢n muy presentes, pero tambi¨¦n se han hecho visibles los esfuerzos por resolverlos. Estas apreciaciones tomaron cuerpo durante y despu¨¦s de la pandemia y son generalizables a todos los gobernantes auton¨®micos. Desde el pasado mes de julio se trat¨® de afianzar la especie de que todas las comunidades gobernadas por el PSOE caer¨ªan por el influjo de la preeminencia del PP en el plano nacional y tras la sustituci¨®n de Pablo Casado por Alberto N¨²?ez Feij¨®o. No es esa la percepci¨®n que ahora tiene el PP. Las derrotas o la ausencia de mayor¨ªas para formar gobierno pueden llevarse al PSOE por delante, pero tambi¨¦n lo contrario: la revalidaci¨®n de sus gobiernos. No hay certezas. Las realidades son muy diferentes, dada la variedad de pactos que deben darse. En algunas comunidades, sin embargo, apuestan por conseguir o rozar las mayor¨ªas absolutas. Guillermo Fern¨¢ndez Vara, presidente de Extremadura, consigui¨® hace cuatro a?os esa mayor¨ªa, y la hegemon¨ªa socialista volvi¨® otra vez a Castilla-La Mancha con Emiliano Garc¨ªa-Page. Con pactos gobierna desde 2019 el aragon¨¦s Javier Lamb¨¢n. Por convicci¨®n y por conocimiento de sus electores, estos dos ¨²ltimos han sido los ¨²nicos presidentes socialistas que han mostrado su enorme preocupaci¨®n por la sustituci¨®n del delito de sedici¨®n por el de des¨®rdenes p¨²blicos agravados con la rebaja a la mitad de las penas, negociada directamente con ERC. No ha sido una alegr¨ªa para Fern¨¢ndez Vara que quienes vulneraron gravemente la Constituci¨®n est¨¦n de enhorabuena, pero lo contrarresta con la comparaci¨®n de la Catalu?a de 2017 con el Gobierno del PP, en la que hubo sedici¨®n y declaraci¨®n de independencia, y la de ahora. En este marco se mueven, con sus matices, el resto de presidentes socialistas. Adri¨¢n Barb¨®n (Asturias), Francina Armengol (Baleares), Ximo Puig (Comunidad Valenciana), Concha Andreu (La Rioja), Mar¨ªa Chivite (Navarra) y ?ngel V¨ªctor Torres (Canarias). Ninguno se librar¨¢ del hostigamiento del PP. Tampoco si est¨¢n en la oposici¨®n. La masiva protesta en Madrid contra la gesti¨®n sanitaria de la presidenta Isabel D¨ªaz Ayuso, m¨¢s all¨¢ de ser tildada de acci¨®n de los comunistas incluso antes de celebrarse, tendr¨¢ como r¨¦plica en la C¨¢mara regional la acusaci¨®n de que lo peor que ocurre en Espa?a es la subordinaci¨®n del Gobierno al independentismo catal¨¢n.

¡°?Hay alguien ah¨ª o el sanchismo se ha comido a todo el PSOE?¡±. Esta proclama en forma de pregunta de la secretaria general del PP, Cuca Gamarra, ser¨¢ el hilo conductor de la ofensiva de los populares contra los gobernantes socialistas en sus territorios. Los socialistas quieren creer que ¡°si lo explican bien¡±, el efecto no ser¨¢ como espera el PP, sino que ocurrir¨¢ como con los indultos a los condenados del proc¨¦s, cuyos efectos, aparentemente, no se hicieron sentir en exceso. El presidente del PP, Alberto N¨²?ez Feij¨®o, ha ido al grano al dirigirse a los dirigentes territoriales socialistas para que decidan si est¨¢n con la ley o con quienes la incumplen. No ser¨¢ agradable, reconocen diferentes barones socialistas. Como r¨¦plica tienen en su alforja la vigencia del art¨ªculo 155 de la Constituci¨®n, que permite, como ya se hizo, intervenir una comunidad aut¨®noma, y la del delito de rebeli¨®n. Todos a?aden a ello su gesti¨®n y la fortaleza de la marca PSOE.