Pacto incierto en Extremadura ¡°hasta que rectifique Vox¡±
Carlos Maz¨®n no pone ning¨²n problema para acordar con el partido ultra en la Comunidad Valenciana
La direcci¨®n nacional del PP y sus barones territoriales han llegado al acuerdo y la convicci¨®n de que ahora lo ¨²nico que toca es remangarse para ganar las elecciones generales del 23-J y echar al Gobierno socialista de Pedro S¨¢nchez de La Moncloa. Todas las preguntas sobre problem¨¢ticos pactos locales, crisis internas o sobre c¨®mo manejar la espinosa relaci¨®n con Vox quedan postergadas hasta despu¨¦s de ese hito. Esa es la intenci¨®n, incluso en Extremadura, donde el escenario es algo m¨¢s complejo por el grado de enfrentamiento p¨²blico y abierto entre la l¨ªder popular extreme?a, Mar¨ªa Guardiola, y los responsables nacionales de Vox, a los que ella responsabiliza del fracaso de las negociaciones para minimizar a los l¨ªderes auton¨®micos de la formaci¨®n ultra.
El PP de Extremadura se niega, en esa estrategia de aplazar la soluci¨®n al problema, a dar por definitivamente rotas las negociaciones y voladas todas las posibilidades de un Gobierno popular sin Vox que releve al socialista Guillermo Fern¨¢ndez Vara, al que dan por amortizado pese a ser el ganador de las ¨²ltimas elecciones, con 28 esca?os, los mismos que los populares. Esperan que Vox acabe por rectificar y asumir la oferta de cargos institucionales que le han planteado y la firma de un acuerdo program¨¢tico sin estar en el Gobierno. Vox contin¨²a sin contemplar esta opci¨®n en Extremadura y pone como ejemplo de conexi¨®n exitosa para construir una alternativa a S¨¢nchez en toda Espa?a lo ocurrido en la Comunidad Valenciana, donde este lunes se constituyen las Cortes, con un presidente de esa instituci¨®n ultra y sin vetos ni complicaciones de ning¨²n tipo.
Carlos Maz¨®n, el candidato popular a presidir la Generalitat Valenciana, no manifiesta ning¨²n complejo por c¨®mo negoci¨® en apenas dos horas el pacto con Vox, y est¨¢ dispuesto a llevarlo adelante hasta donde haga falta para sustituir al Ejecutivo tripartido y progresista del Bot¨¤nic. Sostiene que la mayor¨ªa de la sociedad valenciana entiende esa colaboraci¨®n con Vox y hasta ¡°la aplaude¡± cuando lo saludan por la calle. Interpreta, de los datos de su victoria en las recientes elecciones auton¨®micas, que muchos valencianos estaban hartos de algunos esc¨¢ndalos que socavaron al anterior Gobierno (llega a cifrar en una docena los imputados por diferentes casos, sobre todo el que implic¨® a la Consejer¨ªa de M¨°nica Oltra y su exmarido). Como ejemplo de ese hast¨ªo pone el hecho de que muchos de sus conciudadanos tampoco comparten que se haya financiado con dinero p¨²blico y hasta el ¨²ltimo momento a entidades pancatalanistas.
Maz¨®n no expresa ning¨²n reparo por haber negociado con Vox o por tener que facilitarles algunos cargos y se muestra muy dispuesto a cogobernar sin muchos remilgos. El dirigente popular se precia, adem¨¢s, de que logr¨® en muy poco tiempo que Vox retirase a su aspirante condenado por violencia machista para presidir la Generalitat valenciana, Carlos Flores, aunque luego el partido ultra lo situ¨® como n¨²mero uno por Valencia para el Congreso. Ni Feij¨®o ni nadie en el PP ha cuestionado el pacto expr¨¦s valenciano con la extrema derecha.
El siguiente paso
Tampoco lo ha criticado p¨²blica y directamente Mar¨ªa Guardiola, que lleg¨® a decir que Maz¨®n seguramente hab¨ªa hecho lo mejor para su comunidad. Pero ella hizo justo lo contrario. Guardiola no solo dice ahora que jam¨¢s gobernar¨¢ con Vox, sino que lo anticip¨® hace meses y en la campa?a electoral lo dej¨® de manifiesto en varias entrevistas. El 25 de mayo, a tres d¨ªas de las urnas, la entrevista en el diario Hoy de Extremadura se titul¨® as¨ª: ¡°No voy a gobernar con Vox¡±. Guardiola intent¨® una aproximaci¨®n con los l¨ªderes locales de esa formaci¨®n durante el anterior fin de semana e incluso a primera hora del lunes, antes de que se conformara en M¨¦rida la Mesa de la Asamblea regional. Sin ning¨²n ¨¦xito.
En el PP extreme?o argumentan que fueron generosos, aunque en sentido contrario a los contactos desarrollados en otros territorios, porque a los puestos institucionales en la Asamblea (presidente y uno de los secretarios) a?adieron como novedad el regalo de su senador auton¨®mico. No col¨®. Algunos populares extreme?os conceden que el que se precipit¨® y rompi¨® la agenda fue Maz¨®n en Valencia.
El debate ahora en Extremadura es sobre cu¨¢l ser¨¢ el siguiente paso, pero no solo del PP. Tambi¨¦n de la nueva presidenta socialista de la Asamblea a la hora de acelerar o frenar la ronda con todos los partidos para convocar un pleno de investidura que retrate la compleja situaci¨®n pol¨ªtica de la regi¨®n y revele otra vez el estado de la confrontaci¨®n entre los populares y Vox.
El socialista Fern¨¢ndez Vara ha anticipado su intenci¨®n de presentarse, pero no tiene apoyos suficientes para seguir en el puesto. El calendario, en ese caso, podr¨ªa ponerse en marcha con la obligaci¨®n de presentar alg¨²n aspirante antes del 5 de julio y hasta forzar una votaci¨®n apenas tres d¨ªas antes de las elecciones generales del 23. El PP extreme?o no tiene programada esta semana ninguna reuni¨®n con Vox y ha convocado para ma?ana a su comit¨¦ ejecutivo y a la junta directiva regional, en la que Guardiola explicar¨¢ a sus cargos lo sucedido. No se esperan en la sesi¨®n ni grandes disensiones internas ni fuertes debates. En la agenda de Feij¨®o tampoco est¨¢ cerrado ning¨²n encuentro en los pr¨®ximos d¨ªas con Guardiola, que ha presumido de tener manos libres para negociar desde Extremadura.
Mientras tanto, el l¨ªder del PP se centrar¨¢ esta semana en Catalu?a, uno de sus agujeros negros electorales. Acudir¨¢ dos veces con la idea de recortar distancias con el PSC. Hoy estar¨¢ para hablar de econom¨ªa y para lanzar la pulla al nuevo alcalde, Jaume Collboni, de que no le ha agradecido en persona el voto de los ediles del PP que le permitieron acceder a ese puesto. Collboni s¨ª dio las gracias ayer en una entrevista en EL PA?S.
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