Vecinos de Torrox responden al concejal del PP que teme que los migrantes traigan ¡°tifus¡±: ¡°Hay que dar una oportunidad a las personas¡±

Apoyado sobre un bast¨®n, Manuel, de 75 a?os, mira este viernes serio tras sus gafas en la puerta de su pescader¨ªa. Anda medio enfadado porque no hay clientela. Salmonetes, sardinas, jureles o un pulpo esperan en un mostrador desierto. Entonces pasa un grupo de j¨®venes de origen africano por la acera, que saludan. ¡°Se est¨¢ hablando mucho, pero a m¨ª no me estorban. Lo que ha hecho el ministerio est¨¢ muy bien. Hay que dar una oportunidad a las personas¡±, explica. La pescadera, Dulce, de 58 a?os, asiente y dice que ¡°son muy educados, no crean problemas¡±. Ambos se refieren a las 220 personas migrantes acogidas en un hotel de El Morche, en Torrox (20.000 habitantes, M¨¢laga) desde el pasado martes. Son parte de los traslados que el Gobierno est¨¢ realizando a la Pen¨ªnsula a causa del repunte de la ruta migratoria a Canarias. Los mismos que Salvador Escudero, concejal del PP en la localidad, compar¨® con animales y sugiri¨® que contagiaban ¡°el tifus¡± o podr¨ªan robar coches. El PSOE ha solicitado su dimisi¨®n y sus palabras han sido denunciadas a la Fiscal¨ªa. ?l ha pedido perd¨®n. A¨²n mantiene su cargo.

El Morche es apenas una carretera recta entre las zonas costeras de Torrox y Algarrobo. Hay casitas en la arena frente al mar y peque?os bloques construidos en los 70. El resto del suelo, en el kil¨®metro que separa la pedan¨ªa hasta la autov¨ªa A-7, est¨¢ cubierto por los pl¨¢sticos de los invernaderos, motor econ¨®mico local. Aqu¨ª los hoteles son escasos y el invierno, largo. Con un turismo en su mayor¨ªa nacional y familiar, casi todos los alojamientos cierran desde finales de septiembre hasta abril. El denominado Urban Beach, de cuatro estrellas, s¨ª que ha abierto ahora sus puertas de manera inesperada. Lo hace desde el martes, cuando llegaron 196 migrantes a sus habitaciones, a los que se sumaron otros 24 que llegaron el mi¨¦rcoles. ¡°Viajamos desde Canarias a Madrid en avi¨®n y luego autob¨²s hasta aqu¨ª¡±, se?ala frente a la entrada del alojamiento el senegal¨¦s Barak Drame, de 25 a?os. La realidad que cuenta dista de las acusaciones que pocos minutos antes hab¨ªa hecho este viernes Alberto N¨²?ez Feij¨®o sobre que el Gobierno dejaba a los migrantes ¡°en paradas de autob¨²s¡±. ¡°Nos trajeron aqu¨ª¡±, insiste Makthar Fahl, que espera viajar pronto a Barcelona porque all¨ª tiene familia. Ronda los 20 a?os, como su amigo Mustaf¨¢ Ay¨¢, quien piensa en Almer¨ªa, m¨¢s cerca y donde le han dicho que hay trabajo en el campo. El Gobierno tambi¨¦n ha trasladado all¨ª a 321 migrantes, alojados en otro hotel de El Toyo, a las afueras de la capital.

Algunos migrantes dan un paseo por la playa, abrigados. Son los ¨²nicos sobre la arena mientras las olas baten con fuerza la costa. Varios m¨¢s permanecen, en unos bancos, atentos a sus tel¨¦fonos m¨®viles. Env¨ªan mensajes, hablan con sus familias o amigos. Otros esperan sentados frente al hotel, del que salen y entran empleados. Diferentes veh¨ªculos de Cruz Roja van y vienen. Hay mucho tr¨¢fico, pero sin turistas, pocos caminan por la zona. Por eso destacan grupos como los de los cinco chavales que se dirigen a un peque?o supermercado charlando a rato es franc¨¦s a ratos en wolof, los dos idiomas principales de Senegal, de donde proceden la mayor¨ªa de quienes han sido trasladados a Torrox. Antes de llegar a su destino, saludan con un gesto, de nuevo, a Manuel y Dulce, que contin¨²an de charla en su pescader¨ªa.

Ahora lo hacen junto a ?ngeles, de 73 a?os, que explica que su hijo es agricultor y tiene varios empleados ¡°que vinieron de alg¨²n pa¨ªs de ?frica¡±. Est¨¢n contratados desde hace a?os. ¡°Son los ¨²nicos que quieren meterse en el pl¨¢stico: nosotros ya somos muy mayores y los j¨®venes est¨¢n en oficinas o estudiando¡±, a?ade. ¡°Son educados, alguno te pide tabaco, no dan un ruido¡±, a?ade Mari Carmen desde los cercanos ultramarinos que llevan su nombre, donde Antonio explica que el hotel siempre cierra en temporada baja y que, al menos, ahora hay m¨¢s vida por la zona, aunque cree que la llegada de estos j¨®venes a un hotel puede generar un ¡°efecto llamada¡±. Por su puerta pasa a mediod¨ªa Marisol Coca, de 33 a?os, y que lleg¨® a Espa?a hace cinco desde El Salvador. Cuida personas mayores. ¡°Yo vine a buscarme la vida, como ahora ellos. Ojal¨¢ encuentren una oportunidad pronto¡±, sostiene.

¡°Una marca como a los animales¡±

Las sensaciones son diferentes a las que mostr¨® en la tarde del mi¨¦rcoles Salvador Escudero, concejal de Cultura y Tradiciones Populares de Torrox, gobernado por el Partido Popular. ¡°Es que no sabemos por d¨®nde van a ir. No sabemos si van a tirar por la carretera, si te van a robar un coche, si van a buscarse la vida, porque no tienen nada¡±, dijo en la radio municipal, donde se pregunt¨® si los migrantes ven¨ªan ¡°de vacaciones o a trabajar¡± y sugiri¨® que podr¨ªan contagiar ¡°el tifus¡±. Tambi¨¦n asegur¨® que para controlar los movimientos de los migrantes ¡ªque tienen libertad de movimientos¡ª igual hac¨ªa falta ponerles ¡°una marca como a los animales que les ponen una pulserita¡±.

El PSOE pidi¨® poco despu¨¦s su dimisi¨®n y, horas m¨¢s tarde, el edil pidi¨® ¡°perd¨®n de coraz¨®n¡± por c¨®mo hab¨ªa abordado la inmigraci¨®n. ¡°Soy consciente de la gravedad de unas palabras que en ning¨²n caso representan al municipio de Torrox¡±, a?adi¨®. Las disculpas ¡°son insuficientes¡± para Alejandro Cortina, director de M¨¢laga Acoge, asociaci¨®n que junto a Andaluc¨ªa Acoge ha denunciado ante la Fiscal¨ªa las expresiones utilizadas por Escudero porque creen que pueden incurrir en un delito de odio. Otras entidades como la Asociaci¨®n Pro Derechos Humanos de Andaluc¨ªa (Apdha) tambi¨¦n han criticado al edil, que se mantiene en el cargo. ¡°Quiero desautorizar tajantemente las declaraciones de mi concejal en la radio municipal¡±, ha dicho el alcalde de Torrox, ?scar Medina, que cree que ¡°por encima de todo est¨¢ el respeto a la diversidad, la inclusi¨®n social y la tolerancia¡±, pero que no ha tomado medidas contra su compa?ero de partido.

¡°Apelamos a los responsables pol¨ªticos que tengan una mirada humanitaria, vengan de donde vengan las personas¡±, afirma en tono conciliador Samuel Linares, coordinador provincial de Cruz Roja, quien recuerda que la ubicaci¨®n y caracter¨ªsticas de este alojamiento en Torrox ¡°son extraordinarias porque la situaci¨®n es de emergencia¡±. Seg¨²n cuenta, la respuesta ofrecida ahora es la misma que cuando estall¨® la invasi¨®n de Ucrania, momento en el que quienes llegaron de aquel pa¨ªs fueron alojados en hoteles similares. De hecho, en el propio municipio de Torrox hay desde hace dos a?os un centro de primera acogida para personas refugiadas, donde hay instaladas, entre otras, personas ucranias. ¡°Tambi¨¦n tenemos otros centros en la capital desde 2019, donde nunca jam¨¢s ha habido un problema en sus entornos¡±, insiste Linares.

Un equipo multidisciplinar de Cruz Roja trabaja ya con las 220 personas alojadas en este hotel. Su misi¨®n inicial es detectar posibles vulnerabilidades ¡ªsalud, protecci¨®n internacional, discapacidades, necesidades espec¨ªficas¡ª y, despu¨¦s, poco a poco, dar estabilidad a los acogidos. Por eso facilitan el contacto con sus redes familiares y de amigos, ¡°que les pueden ayudar en ese proceso¡±. Muchos de quienes hoy est¨¢n en el hotel saldr¨¢n poco a poco hacia sus destinos y llegar¨¢n otras personas. De momento, Cruz Roja trabaja con la previsi¨®n de que este centro mantendr¨¢ su actividad hasta el 31 de diciembre. Nadie sabe si su labor acabar¨¢ antes o despu¨¦s: ¡°En situaciones de emergencia es dif¨ªcil establecer una fecha concreta¡±, concluye Linares.