Espa?a despliega m¨¢s tropas que nunca en un panorama internacional cada vez m¨¢s convulso

Espa?a batir¨¢ este a?o el r¨¦cord de militares en misiones internacionales, con m¨¢s de 3.600 destacados permanentemente en el extranjero, a los que se sumar¨¢n otros 450 con car¨¢cter temporal y m¨¢s de 2.500 en navegaciones a bordo de buques.

La convulsa situaci¨®n internacional, con dos guerras a las puertas de Europa, una en Ucrania y otra en Oriente Pr¨®ximo, ha obligado a un despliegue sin precedentes que supera los 3.500 militares alcanzados hace dos d¨¦cadas, cuando el Gobierno de Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar decidi¨® participar en la ocupaci¨®n militar de Irak. A las 17 misiones actualmente en marcha se sumar¨¢n este a?o otras dos, en Eslovaquia y Rumania, seg¨²n el acuerdo adoptado el 27 de diciembre por el Consejo de Ministros.

Espa?a ser¨¢ la naci¨®n marco de la nueva brigada multinacional de la OTAN con base en Lest (Eslovaquia), a unos 300 kil¨®metros de la frontera con Ucrania. En aplicaci¨®n del nuevo modelo de fuerzas de la OTAN, que transforma en brigadas los actuales grupos de combate, en la base eslovaca se instalar¨¢ un grupo t¨¢ctico de 700 militares de la Brigada Ligera Aerotransportable (Brilat), junto a uniformados checos ¡ªque hasta ahora lideraban la unidad¡ª, eslovacos, eslovenos, alemanes y estadounidenses. En caso de crisis, la Brilat deber¨¢ ser capaz de proyectar en breve plazo, desde su base de Figueirido (Pontevedra) hasta Lest, un cuartel general, un batall¨®n de maniobra y unidades de apoyo con 1.200 efectivos en total, de forma que haya una brigada de combate completa sobre el terreno. Para verificar su operatividad, est¨¢ previsto que este a?o se haga un ejercicio de despliegue de toda la unidad.

Adem¨¢s de liderar la fuerza avanzada de la OTAN en Eslovaquia, Espa?a aportar¨¢ un subgrupo t¨¢ctico mecanizado de Infanter¨ªa de Marina, con 250 militares, a la brigada multinacional liderada por Francia en Rumania. Tambi¨¦n se mantendr¨¢ la actual contribuci¨®n de un subgrupo t¨¢ctico con carros de combate Leopardo y 600 soldados a la brigada liderada por Canad¨¢ en Adazi (Letonia).

La participaci¨®n de las Fuerzas Armadas espa?olas en los planes de la OTAN para reforzar su flanco Este frente a la amenaza rusa se completa con un radar de vigilancia a¨¦rea en Schitu (Rumania), operado por 40 militares; y una bater¨ªa antia¨¦rea Nasams en la base de Lielvardes (Letonia), con 100. Durante cuatro meses se mantendr¨¢ otra bater¨ªa similar en Amari (Estonia) y, como en a?os anteriores, est¨¢ previsto que dos destacamentos con hasta ocho aviones de combate y 150 militares cada uno vigilen el espacio a¨¦reo de Lituania y Rumania durante dos periodos de cuatro meses y un avi¨®n cisterna durante dos.

Adem¨¢s, la Armada aportar¨¢ a la OTAN una fragata con 240 militares que estar¨¢ al mando de una de sus flotas permanentes (SNMG1) durante el primer semestre de este a?o; junto a un cazaminas y un buque de aprovisionamiento por cuatro meses. Entre sus funciones, destaca la de vigilar la presencia de la flota rusa en el Mediterr¨¢neo.

No en el extranjero, sino en el Centro de Coordinaci¨®n de Adiestramiento (CTTC) de la UE en Toledo, unos 300 militares espa?oles han instruido ya a m¨¢s de 3.000 militares ucranianos.

Aunque el reforzamiento del flanco Este de la OTAN para disuadir a Putin de aventuras expansionistas explica el fuerte aumento de las tropas espa?olas en el exterior, no es este el conflicto que m¨¢s preocupa en estos momentos. La guerra de Gaza ha provocado un se¨ªsmo geoestrat¨¦gico, reavivando conflictos congelados y relegando otros al olvido sin que por ello hayan dejado de ser peligrosos. Esta es la situaci¨®n de los teatros de operaciones en los que est¨¢n inmersas las Fuerzas Armadas espa?olas en el arranque de este 2024:

L¨ªbano, entre dos fuegos. Los 700 militares espa?oles desplegados en el sur de L¨ªbano se encuentran, literalmente, entre dos fuegos. Desde que el 7 de octubre Ham¨¢s lanz¨® un ataque terrorista contra Israel, la milicia chi¨ª Hezbol¨¢, aliada de Ir¨¢n, y el Ej¨¦rcito israel¨ª se han enzarzado en un intercambio casi diario de proyectiles sobre las cabezas de los 10.360 cascos azules de la Finul (Fuerza Interina de Naciones Unidas para L¨ªbano) que desde el 28 de febrero de 2022 y hasta 2025 manda el teniente general espa?ol Aroldo L¨¢zaro. El 10 de diciembre, un proyectil de artiller¨ªa israel¨ª impact¨® en la posici¨®n 4-28, la misma donde en 2015 muri¨® el cabo Francisco Javier Soria, sin causar da?os personales. Tambi¨¦n varios cohetes lanzados por Hezbol¨¢ o milicias palestinas hacia la blue line, la l¨ªnea que sirve de frontera entre los dos pa¨ªses, han ca¨ªdo en instalaciones de la ONU desde el 7 de octubre. Aunque Israel suele avisar de sus ataques a los cascos azules y estos se protegen en sus refugios, el riesgo de accidente es muy alto. La tensi¨®n se ha elevado a¨²n m¨¢s tras el asesinato en Beirut del n¨²mero dos de Ham¨¢s, Saleh al-Aruri, y la muerte de varios milicianos de Hezbol¨¢ por ataques israel¨ªes. El general L¨¢zaro se ha reunido con las autoridades del pa¨ªs para llamarlas a la contenci¨®n y advertirles de que ¡°un error de c¨¢lculo podr¨ªa tener consecuencias devastadoras¡±. Hasta ahora, Israel ha evitado abrir un segundo frente en el norte, pero fuentes militares temen que, cuando complete la operaci¨®n en Gaza, intente expulsar a Hezbol¨¢ del sur del L¨ªbano. El Gobierno de Netanyahu ya ha advertido de que la situaci¨®n en frontera libanesa debe cambiar para que regresen a sus casas los 80.000 israel¨ªes evacuados de la zona.

Irak, el frente oriental. Irak se ha convertido en el ¨²ltimo frente de la partida que Ir¨¢n y EE UU juegan en el tablero de Oriente Pr¨®ximo. Las milicias chi¨ªes han lanzado ataques contra bases de la coalici¨®n internacional encabezada por EE UU en Irak y la respuesta del Pent¨¢gono ha causado ya la muerte de cuatro milicianos, incluido un alto responsable de un grupo proiran¨ª en Bagdad. El primer ministro, Mohamed Shia al Sudani, con quien el presidente Pedro S¨¢nchez se reuni¨® en la capital iraqu¨ª el pasado d¨ªa 28, ha calificado los ataques norteamericanos de ¡°violaci¨®n de la soberan¨ªa¡± de su pa¨ªs y por primera vez ha hablado de la salida de las tropas extranjeras de Irak. Espa?a tiene 362 militares en la antigua Mesopotamia, de los que 183 est¨¢n integrados en la misi¨®n de la OTAN (NMI), que dirige el general espa?ol Jos¨¦ Antonio Ag¨¹ero Mart¨ªnez, y otros 179 (incluidas fuerzas de operaciones especiales y helic¨®pteros) en la coalici¨®n bajo mando estadounidense. En teor¨ªa, ambas operaciones tienen el objetivo de capacitar al Ej¨¦rcito iraqu¨ª para combatir al Estado Isl¨¢mico, pero la debilidad del grupo yihadista y la creciente tensi¨®n entre Washington y Bagdad ha hecho que la presencia militar occidental, antes bienvenida, empiece a considerarse non grata. El despliegue de las Fuerzas Armadas espa?olas en la regi¨®n se completa con una bater¨ªa de misiles Patriot y 150 militares en la ciudad turca de Adana. En teor¨ªa, sirve para protegerla de eventuales ataques con misiles bal¨ªsticos desde Siria, pero hace a?os que tal amenaza no existe. Ahora es solo un gesto pol¨ªtico de solidaridad de la OTAN con Turqu¨ªa a trav¨¦s de Espa?a.

Los ¨²ltimos del Sahel. Tras la retirada de la misi¨®n de la ONU en Mal¨ª (Minusma) y de la misi¨®n europea de N¨ªger, la EUTM Mal¨ª, que dirige el general espa?ol Santiago Fern¨¢ndez Ruiz-Repiso, es el ¨²ltimo reducto de la presencia militar europea en una regi¨®n, el Sahel, donde mercenarios rusos de Wagner y yihadistas han impuesto su ley. Aunque los instructores europeos han dejado de formar al Ej¨¦rcito maliense, que tom¨® el poder a trav¨¦s de un golpe de Estado ¡ªcomo sus vecinos de Burkina Faso o N¨ªger¡ª, y la junta militar de Bamako impidi¨® que el ¨²ltimo relevo del contingente espa?ol pudiese entrar en el pa¨ªs con sus armas, lo que le oblig¨® a heredar las de sus antecesores, Espa?a se resiste a arriar la bandera europea por temor a que el vac¨ªo sea ocupado por Rusia y China. De los 160 efectivos de la misi¨®n EUTM Mal¨ª, el 85% (135) son espa?oles. Antes de mayo de este a?o la UE debe decidir sobre la continuidad de la misi¨®n: si mantenerla, a la espera de que pueda recuperar su funci¨®n original; o cerrarla definitivamente. En el ?frica subsahariana, Espa?a cuenta adem¨¢s con un destacamento de transporte a¨¦reo en Senegal ¡ªque da apoyo a la misi¨®n de Mal¨ª y al ej¨¦rcito franc¨¦s¡ª, 21 militares en la misi¨®n europea en Somalia y siete en la Rep¨²blica Centroafricana, adem¨¢s de dos en Mozambique.

Vuelven los piratas. La misi¨®n Atalanta pasaba por ser una de las m¨¢s exitosas de la UE. En los ¨²ltimos tres a?os no se hab¨ªa producido ning¨²n secuestro por parte de los piratas somal¨ªes. Sin embargo, en diciembre pasado se registraron dos: un pesquero iran¨ª y un carguero b¨²lgaro. Espa?a lleva el peso de la Operaci¨®n Atalanta, que dirige desde la base naval de Rota (C¨¢diz) el vicealmirante espa?ol Vicente Villanueva S¨¢nchez. Tras la retirada del buque italiano, la fragata espa?ola Victoria era el ¨²nico buque con el que la misi¨®n europea contaba durante las pasadas Navidades y estaba dedicada a monitorizar los movimientos de los secuestradores del MV Ruen. Esa es una de las razones por las que Espa?a se opuso a que la Operaci¨®n Atalanta ampliase su misi¨®n para dedicarse tambi¨¦n a proteger a los buques que cruzan el mar Rojo de los ataques de los hut¨ªes, aliados de Ir¨¢n, que controlan parte de Yemen.

Sin rumbo al mar Rojo. Tras haber vetado que los buques de la Operaci¨®n Atalanta de la UE patrullen el mar Rojo, la ministra de Defensa, Margarita Robles, reiter¨® el jueves la negativa de Espa?a a participar en la misi¨®n naval que encabeza EE UU. ¡°Espa?a nunca ha tenido miedo a participar en ninguna misi¨®n, pero, precisamente porque tiene rigor, lo que quiere es que las misiones se definan y que ning¨²n pa¨ªs, sea el que sea, le diga a Espa?a lo que tiene que hacer¡±, aleg¨®. Y aludi¨® a que el Pent¨¢gono incluy¨® a Espa?a sin previa consulta en la lista de participantes en la operaci¨®n Guardi¨¢n de la Prosperidad. En teor¨ªa, los ataques de los hut¨ªes se dirigen contra los buques de bandera israel¨ª o con destino Israel; en la pr¨¢ctica amenazan a todos los que navegan por el mar Rojo, lo que ha llevado a muchas compa?¨ªas a evitar esta ruta con el encarecimiento de los fletes. El riesgo pol¨ªtico de la operaci¨®n estriba en que Washington se reserva el derecho de atacar Yemen si los hut¨ªes siguen obstaculizando la libertad de navegaci¨®n por el mar Rojo, lo que podr¨ªa arrastrar a los pa¨ªses con buques en la zona a un conflicto internacional. Hasta ahora, el Pent¨¢gono se ha limitado a neutralizar las agresiones de los hut¨ªes sin atacar sus bases en la costa.

Misi¨®n en Colombia. Fuera de ?frica y Oriente Pr¨®ximo, Espa?a participa en la misi¨®n de verificaci¨®n de la ONU de los acuerdos entre el Gobierno de Bogot¨¢ y la guerrilla de las FARC, con cinco observadores. Tras la adhesi¨®n del ELN al acuerdo de paz, Naciones Unidas ha pedido otros seis observadores adicionales a los ya desplegados.