Junts y ERC extienden su disputa a la ley amnist¨ªa pese al inter¨¦s com¨²n por rehabilitar a sus l¨ªderes
Ambas formaciones optan por negociar individualmente y quiebran el ¨²nico reducto de unidad independentista
La hoja de ruta de la legislatura anunciaba mar de fondo, pero el primer bandazo ha llegado casi sin salir del puerto. Las disputas entre Junts per Catalunya y Esquerra Republicana no han respetado ni el supuesto consenso que hab¨ªa en torno a la ley de amnist¨ªa. Unos se juegan el retorno a Espa?a de su l¨ªder, Carles Puigdemont, y los otros depositan en la amnist¨ªa la rehabilitaci¨®n de su secretar¨ªa general, Marta Rovira. El inter¨¦s com¨²n choca con las ganas de marcar perfil propio y sacar r¨¦dito electoral. Ambas formaciones ...
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La hoja de ruta de la legislatura anunciaba mar de fondo, pero el primer bandazo ha llegado casi sin salir del puerto. Las disputas entre Junts per Catalunya y Esquerra Republicana no han respetado ni el supuesto consenso que hab¨ªa en torno a la ley de amnist¨ªa. Unos se juegan el retorno a Espa?a de su l¨ªder, Carles Puigdemont, y los otros depositan en la amnist¨ªa la rehabilitaci¨®n de su secretar¨ªa general, Marta Rovira. El inter¨¦s com¨²n choca con las ganas de marcar perfil propio y sacar r¨¦dito electoral. Ambas formaciones han optado por negociar individualmente, descartando la posibilidad de levantar un frente com¨²n ante el PSOE para pulir la ley. La hostilidad abre otra grieta en la mayor¨ªa parlamentaria que hizo posible la reelecci¨®n de Pedro S¨¢nchez. Las consecuencias que pueda tener para la estabilidad del Gobierno el enfrentamiento entre los independentistas catalanes supone un pron¨®stico incierto, pero al sembrar de desavenencias la ley de amnist¨ªa enreda un asunto que estaba llamado a ser clave para encolar las relaciones de los socios catalanes con el PSOE.
Jordi Turull asegur¨® el 14 de noviembre en una entrevista en TV3 que Junts no presentar¨ªa enmiendas a la ley de amnist¨ªa porque el redactado se daba por bueno. ¡°Ha costado mucho poder pactarlo, casi la mitad del texto es aportaci¨®n nuestra¡±, asegur¨® Turull. Dos meses despu¨¦s, el partido ha presentado una docena de enmiendas para reajustar el texto, y lo ha hecho sin acordarlo con nadie, lo que provoca malestar en el resto del bloque de la investidura. Esquerra, por su parte, tambi¨¦n apuesta por retocar la proposici¨®n de ley que entr¨® en el registro del Congreso el pasado 13 de noviembre. Adem¨¢s de nueve enmiendas de car¨¢cter t¨¦cnico pactadas con el PSOE, Sumar, BNG y EH Bildu, los republicanos presentaron cuatro enmiendas a t¨ªtulo individual. No entraban, ¨¦stas cuatro, en los planes del partido que lidera Oriol Junqueras. ¡°La idea era presentar solo enmiendas consensuadas y que tengan la mayor¨ªa para ser aprobadas, pero los planes est¨¢n para romperlos¡±, manifiestan fuentes de los republicanos.
Cada uno por separado, ERC y Junts coinciden en la necesidad de que se blinden con la amnist¨ªa a los encausados por terrorismo. Es el supuesto que involucra a los investigados por la organizaci¨®n del movimiento ¡®Tsunami Democr¨¤tic¡¯, entre los que se encuentra Marta Rovira, secretaria general de Esquerra, y el expresidente catal¨¢n de Junts Carles Puigdemont. Ambas formaciones presentaron enmiendas individuales en este sentido. Textos de esp¨ªritu id¨¦ntico, pero cada uno por su lado. ¡°Es Junts quien no quiere negociar con nosotros¡±, afirman fuentes de Esquerra. Junts replica que se puede hablar y llegar a acuerdos mientras dura la tramitaci¨®n parlamentaria de las enmiendas.
El desapego no es nuevo, ni puntual. En verano, ambos partidos pusieron condiciones muy parecidas para votar a la socialista Francina Armengol presidenta del Congreso: Luz verde para usar el catal¨¢n en el hemiciclo y un compromiso para activar comisiones de investigaci¨®n del espionaje de ¡®Pegasus¡¯ y de los atentados del 17 de agosto de 2017 en Barcelona y Cambrils. Misma letra, con distinta m¨²sica. Luego, la ley amnist¨ªa fue la l¨ªnea roja com¨²n para votar la reelecci¨®n de Pedro S¨¢nchez. Cada partido la dibuj¨® en una hoja distinta y con su propio l¨¢piz.
En Catalu?a, Junts y ERC est¨¢n inmersos en una pelea electoral perenne. Las elecciones est¨¢n previstas para primeros de 2025, pero la magra mayor¨ªa de ERC en el Parlament, 33 diputados sobre 135, y los agobios que se le vienen encima a Pere Aragon¨¨s por la inminencia de la emergencia por sequ¨ªa no hacen descartable un adelanto electoral. En esa carrera, el PSC de Salvador Illa aparece como el mejor situado, pero las fuerzas independentistas tratan de ara?ar cuota y los logros propios se celebran tanto como los tropiezos rivales. La comunicaci¨®n entre ambas formaciones no fluye. El martes, tras la reuni¨®n semanal del Govern, la portavoz Patr¨ªcia Plaja dijo no tener constancia de que nadie del equipo de Pere Aragon¨¨s hubiera contactado con la direcci¨®n de Junts para conocer los t¨¦rminos exactos del pacto para delegar competencias sobre inmigraci¨®n cerrado la semana pasada entre JxCat y el PSOE. ¡°Han negociado un bu?uelo y nos quieren cargar la culpa a nosotros¡±, manifiesta un cargo cercano a la presidencia de la Generalitat.