Claves | ?Qu¨¦ pasa ahora con el texto de la ley de amnist¨ªa? ?Se pueden introducir nuevos cambios?

El resultado de la votaci¨®n de la ley de amnist¨ªa ha provocado una situaci¨®n ins¨®lita. El dictamen de la norma registrada por el PSOE ¡ªmodificada la semana pasada para blindar tanto a Carles Puigdemont como a los CDR¡ª, ha sido aprobado en el pleno celebrado en el Congreso este martes con el apoyo de Junts. Sin embargo, la formaci¨®n independentista ha votado en contra del texto final y ha impedido as¨ª que la tramitaci¨®n de la iniciativa siga su curso en el Senado. Esta segunda votaci¨®n era necesaria porque se trata de una ley org¨¢nica y este tipo de leyes tienen como requisito una segunda votaci¨®n que ha de superarse por mayor¨ªa absoluta. Este movimiento del partido independentista catal¨¢n implica que el texto tal como estaba redactado hoy volver¨¢ de nuevo a la Comisi¨®n de Justicia de la C¨¢mara baja. Ese ¨®rgano tendr¨¢ como m¨¢ximo 15 d¨ªas para, sobre dicho texto, emitir un nuevo dictamen. Y, durante ese plazo, se podr¨¢n a?adir cambios pactados por los partidos.

Cumplida esa hip¨®tesis, el nuevo dictamen volver¨¢ a debatirse y votarse en pleno. Si prosperara, se votar¨¢ otra vez el texto final que resultase. Esta es la sucesi¨®n de acontecimientos que han provocado este escenario y el proceso que se inicia ahora:

Dictamen. Hace una semana, la Comisi¨®n de Justicia del Congreso aprob¨® el dictamen final del texto de la Proposici¨®n de Ley Org¨¢nica de amnist¨ªa para la normalizaci¨®n institucional, pol¨ªtica y social en Catalu?a. La norma pas¨® el filtro de este ¨®rgano despu¨¦s de que PSOE, Junts y ERC pactasen una enmienda parcial para modificar la proposici¨®n de ley registrada en solitario por los socialistas. El cambio permit¨ªa exculpar a los acusados de terrorismo siempre que en sus actuaciones no hubiera ¡°intenci¨®n directa¡± de provocar ¡°violaciones graves de los derechos humanos¡±. Y dejaba fuera a quienes hubieran ¡°causado violaciones graves de los derechos humanos, en particular las previstas en el art¨ªculo 2 y 3 del Convenio Europeo para la Protecci¨®n de los Derechos Humanos y de las Libertades Fundamentales y en el derecho internacional humanitario¡±.

Acciones judiciales. Tras la aprobaci¨®n del dictamen se han sucedido durante los ¨²ltimos d¨ªas distintas decisiones judiciales, protagonizadas tanto por el magistrado Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n como por Joaqu¨ªn Aguirre. Unas acciones que complicaban la futura amnist¨ªa de Puigdemont incluso con la enmienda pactada por socialistas e independentistas el martes pasado. En esa l¨ªnea, Junts ha exigido al Gobierno hasta hoy que aceptase todas las acusaciones de terrorismo dentro del ¨¢mbito de aplicaci¨®n de la ley. El Ejecutivo se ha negado. La portavoz de Junts, Miriam Nogueras, ha insistido en su posici¨®n durante el pleno. ¡°Una amnist¨ªa selectiva y en diferido no es lo que firmamos¡±, ha dicho al defender en la tribuna una amnist¨ªa ¡°integral, que no deje a nadie atr¨¢s¡±.

Votaci¨®n. Junts ha intentado hasta el ¨²ltimo momento incluir en el ¨¢mbito de aplicaci¨®n de la ley todos los casos de terrorismo. Para ello, ha mantenido vivas una serie de enmiendas (cambios a posteriori) que se han votado tambi¨¦n en el pleno de este martes. El PSOE se ha opuesto y ha votado en contra de todas. As¨ª, los socialistas se han mantenido en el dictamen ya elaborado la semana pasada y que exclu¨ªa los delitos que hubiesen causados ¡°violaciones graves de los derechos humanos¡±. Frente a su oposici¨®n final, la formaci¨®n de Carles Puigdemont ha utilizado otra estrategia: votar a favor del dictamen (que ha sido aprobado por mayor¨ªa simple de 177 s¨ªes frente a 172 noes), pero en contra del texto final de la ley org¨¢nica (por lo que no ha logrado mayor¨ªa absoluta: 171 s¨ªes frente a 179 noes).

Si Junts hubiera votado en contra del dictamen final, la proposici¨®n de ley habr¨ªa deca¨ªdo del todo. Y, en esa hip¨®tesis, el PSOE tendr¨ªa que haber redactado y registrado una nueva proposici¨®n en el Congreso. Es decir, empezar el proceso desde cero. De ah¨ª que Junts haya tomado la decisi¨®n anterior.

Comisi¨®n de Justicia. Las comisiones del Congreso son ¨®rganos donde un grupo de diputados, m¨¢s reducido que el total de los 350 que forman el arco parlamentario, debaten y tramitan las iniciativas parlamentarias, entre otras cuestiones. A la Comisi¨®n de Justicia tiene que volver ahora el texto tal como estaba redactado a d¨ªa de hoy. Por tanto, el ¨®rgano debatir¨¢ sobre la norma en la que ya se incorporaba los delitos de cuyos acusados no hubiera ¡°intenci¨®n directa¡± de provocar ¡°violaciones graves de los derechos humanos¡±. Pero ese texto podr¨¢ modificarse otra vez mediante acuerdos de los partidos. No se podr¨¢n registrar nuevas enmiendas, pero s¨ª incorporar las vivas de Junts contra las que el PSOE ha votado en contra hoy. Tambi¨¦n transaccionar sobre las mismas. En la pr¨¢ctica, eso supone que hay gran margen de maniobra para retocar el texto final. El nuevo dictamen de la Comisi¨®n tiene que estar listo como m¨¢ximo en el plazo de 15 d¨ªas por haber sido calificada de urgencia la norma.

Senado. Entretanto, el Senado no recibir¨¢ finalmente el texto ahora. Est¨¢ por ver si se aprueba un nuevo dictamen o no por la Comisi¨®n de Justicia. En ese escenario, el nuevo dictamen volver¨¢ a debatirse y votarse en el pleno del Congreso en las pr¨®ximas semanas. Si recibiera mayor¨ªa simple de la C¨¢mara baja, despu¨¦s tendr¨ªa que aprobarse por mayor¨ªa absoluta y durante el mismo pleno el texto final. Es decir, se repetir¨ªa el debate con el mismo procedimiento que hoy.

Despu¨¦s, entonces s¨ª, y llegado ese caso, la norma pasar¨ªa ya al Senado. All¨ª, el PP atesora mayor¨ªa absoluta y dilatar¨ªa su tramitaci¨®n lo m¨¢ximo posible: dos meses en lugar 20 d¨ªas tras haber reformado el Reglamento de la C¨¢mara alta. Un cambio recurrido en el Tribunal Constitucional pero que sigue vigente hasta que el tribunal de garant¨ªas no se pronuncie. Durante ese plazo, los populares quieren llevar juristas y expertos para opinar en contra de la norma. En paralelo, este martes, la Mesa del Senado ha sacado adelante la propuesta del PP de celebrar tres plenos al mes en lugar de dos y ha dise?ado el nuevo calendario. La nueva agenda arranca la semana que viene.