El Gobierno pide a Marruecos que no deje embarcar a senegaleses sin visado en vuelos con escala en Espa?a
Exteriores reclama a Rabat que anticipe la exigencia de permiso para entrar en el espacio Schengen para evitar el colapso de las salas de inmigrantes inadmitidos de Barajas
El Gobierno espa?ol ha pedido a Marruecos que impida embarcar en vuelos a terceros pa¨ªses con escala en Espa?a a aquellos ciudadanos senegaleses que no tengan visado de entrada en territorio Schengen ¨D27 pa¨ªses que comparten el espacio europeo sin fronteras¨D, aunque no lo necesiten para acceder a su ¨²ltimo destino, seg¨²n ha revelado la Cadena SER. Con esta medida, el Ministerio del Interior trata de cortar el flujo de inmigrantes que ha colapsado las salas de inadmitidos del aeropuerto Adolfo Su¨¢rez-Madrid Barajas, parte de los cuales son senegaleses.
El Ministerio del Interior ha calificado estas escalas de ¡°fraudulentas¡±, ya que la intenci¨®n de los pasajeros no ser¨ªa llegar a su destino ¨²ltimo, sino quedarse en Espa?a aprovechando la escala de su vuelo. Sin embargo, al impedirles embarcar en Marruecos, se les privar¨ªa de su derecho a solicitar asilo, seg¨²n denuncia la Comisi¨®n Espa?ola de Ayuda al Refugiado (CEAR). Entre el 1 de diciembre y el 15 de enero se tramitaron un total de 847 solicitudes de protecci¨®n internacional en el aeropuerto madrile?o, un n¨²mero inaudito.
La Embajada de Espa?a en Rabat ha remitido una ¡°nota verbal¡± (documento diplom¨¢tico) al Ministerio de Asuntos Exteriores, Cooperaci¨®n Africana y Marroqu¨ªes Residentes en el Exterior de Rabat en el que le pide que ¡°se adopten las medidas necesarias para impedir temporalmente el embarque en vuelos comerciales con destino a terceros pa¨ªses que no forman parte del espacio Schengen y tr¨¢nsito aeroportuario en Espa?a a los titulares de pasaporte ordinario senegal¨¦s en el que no figure visado Schengen estampado en al menos los dos a?os anteriores al viaje¡±. Se excluye as¨ª a los titulares de pasaporte diplom¨¢tico y a quienes tengan visado Schengen en vigor (su vigencia ordinaria es de dos a?os).
La Embajada solicita a las autoridades marroqu¨ªes que mantengan esta medida ¡°hasta la entrada en vigor de la obligatoriedad del visado de tr¨¢nsito aeroportuario para los titulares de dichos pasaportes, prevista para el pr¨®ximo 19 de febrero¡±.
Con esta petici¨®n, Espa?a externaliza a Marruecos el control de los inmigrantes senegaleses y anticipa la aplicaci¨®n de una medida que a¨²n no ha entrado en vigor. ¡°Es una vuelta de tuerca m¨¢s a la externalizaci¨®n de fronteras, dejando en manos de Marruecos el control de las personas que necesitan acceder a Espa?a, posiblemente para pedir protecci¨®n internacional¡±, lamenta Estrella Gal¨¢n, directora general de CEAR. ¡°Si se quiere poner en marcha una verdadera medida, que se aplique el art¨ªculo 38 de la ley de asilo, que contempla la posibilidad de pedir asilo en delegaciones diplom¨¢ticas de terceros pa¨ªses y as¨ª no tendr¨ªan que montarse de esta manera en un avi¨®n y, a¨²n menos, en una patera¡±, a?ade.
Senegal no es el ¨²nico pa¨ªs afectado, desde el 20 de enero tambi¨¦n se exige visado a los ciudadanos en tr¨¢nsito de Kenia. El 19 de enero, durante su visita a Rabat, el ministro Fernando Grande-Marlaska ya anunci¨® que, ¡°si hay que introducir visados de tr¨¢nsito, se introducir¨¢n en su forma debida para evitar estas situaciones¡±, pero no detall¨® a qu¨¦ pa¨ªses se aplicar¨ªan y, de momento, ha dejado fuera al propio Marruecos, de donde son naturales muchos de los inmigrantes recluidos en las cuatro salas que han habilitado en Barajas, de los que al menos una veintena se han fugado, seg¨²n fuentes policiales. Las condiciones de hacinamiento e insalubridad en que se encontraban los inmigrantes, entre los que hay numerosos menores, llevaron a tres jueces a pedir en diciembre pasado al Ministerio del Interior la adopci¨®n de ¡°medidas urgentes¡± y al Defensor del Pueblo a hacer varias sugerencias a los ministerios implicados ante la posibilidad de que se est¨¦ sometiendo a los solicitantes de asilo a un ¡°trato degradante¡±.
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