Sumar se impone por la m¨ªnima a Podemos pero afronta una nueva crisis
Izquierda Unida se queda fuera del Parlamento Europeo y el espacio logra un esca?o menos que en 2019
Sumar ha sufrido este domingo un nuevo rev¨¦s en las urnas. La lista encabezada por Estrella Gal¨¢n ha obtenido tres eurodiputados, tan solo uno m¨¢s que Podemos, y el 4,65% de los votos. En las primeras elecciones de ¨¢mbito nacional para medirse, la candidatura de Irene Montero, cuyo partido ven¨ªa de meses muy complicados, se queda a poco m¨¢s de un punto (3,27%) y resiste con dos asientos en Europa. El resultado supone otro golpe para el conjunto de ese espacio electoral, que retrocede un esca?o respecto a 2019, pero, sobre todo, abre la en¨¦sima crisis en la izquierda con la salida de la Euroc¨¢mara de IU. El partido que ahora coordina Antonio Ma¨ªllo, con presencia hist¨®rica en Bruselas, ha convocado a su direcci¨®n este lunes para evaluar lo sucedido. ¡°Los resultados en Sumar son malos. Sin matices. No se han cumplido las expectativas y la divisi¨®n del espacio nos lleva al fracaso o a una pelea de minor¨ªas. Urge crear condiciones para revertirla. Debemos poner m¨¢xima voluntad¡±, ha declarado. Por su parte, el portavoz de Sumar, Ernest Urtasun, ha anunciado que abre un ¡°proceso de reflexi¨®n sosegado¡± para redefinir la estrategia de la organizaci¨®n. En un mensaje en redes sociales, la vicepresidenta Yolanda D¨ªaz ha asegurado: ¡°No son buenos resultados y debemos reflexionar, pero os aseguro que cada uno de los 811.281 votos van a servir para ensanchar derechos y mejorar la vida de la gente¡±.
¡°No son los resultados que nos hubieran gustado, pero que nadie dude que con esos votos vamos a trabajar por una Europa que va a llevar a cabo pol¨ªticas de avances en derechos¡±, ha valorado Gal¨¢n en rueda de prensa junto a Urtasun. Despu¨¦s de haberse volcado con la cabeza de lista en campa?a, la propia vicepresidenta Yolanda D¨ªaz ha decidido seguir los resultados desde su casa. La coalici¨®n, que cuenta con el apoyo de siete partidos (entre ellos Comprom¨ªs, M¨¢s Madrid e IU), acusa el desgaste del proyecto de los Comuns en Catalu?a, ¨²nica comunidad aut¨®noma en la que Podemos los supera. ¡°Juntas nos hemos puesto en pie, y juntas seguimos caminando. No nos conformamos, este resultado era un paso necesario para que la esperanza venza al miedo¡±, afirm¨® con una alegr¨ªa contenida Montero desde la sede de Podemos, diez a?os despu¨¦s de que su partido debutara con cinco esca?os en otras europeas, y tras haberse quedado fuera de los Parlamentos en Galicia y Euskadi. ¡°La mayor¨ªa del consenso b¨¦lico en Europa pone en riesgo los principios que fundaron la UE: el antifascismo, el bienestar y la paz¡±, ha a?adido sobre el avance de las derechas en la Uni¨®n.
Sumar supera en menos de 11.000 votos al ultra Se acab¨® la fiesta, de Alvise P¨¦rez, que a su vez, aventaja en m¨¢s de 228.000 papeletas a Podemos. La marca pol¨ªtica de Yolanda D¨ªaz se queda por debajo de Ahora Rep¨²blicas, que agrupa a ERC, BNG y EH Billdu.
En los ¨²ltimos d¨ªas, desde la direcci¨®n de Sumar hab¨ªan rebajado ya las expectativas, conscientes de que la candidatura de la exministra de Igualdad, con sus bases muy movilizadas, hab¨ªa ido tomando impulso. Mientras el partido de Ione Belarra ¡ªcon tan solo cuatro diputados en el Grupo Mixto del Congreso¡ª vend¨ªa estos comicios como una especie de ¡°primarias¡± para medirse con los de D¨ªaz tras la ruptura de diciembre pasado, en la coalici¨®n rechazan esta lectura y niegan que el resultado pueda ser trasladado a unas generales, donde la circunscripci¨®n es provincial y en muchas de ellas, Podemos no tiene apenas implantaci¨®n.
Los datos de las europeas ahondan el declive electoral de un espacio que solo muestra su fortaleza cuando la socialdemocracia flaquea y obligan, en todo caso, a una profunda ¡°reflexi¨®n¡± en el partido de D¨ªaz, lastrado por la fuga de votos al PSOE y la divisi¨®n con los de Belarra. La fotograf¨ªa deja a la formaci¨®n de la titular de Trabajo debilitada frente a un Podemos que ha jugado bien sus cartas para poder aguantar, pero con dudas a¨²n sobre su viabilidad futura. A partir de ahora, Izquierda Unida, que pospuso a despu¨¦s de estas elecciones cualquier discusi¨®n sobre su integraci¨®n en Sumar, abrir¨¢ su propio debate interno, aunque hay quien apunta a que deber¨¢ haber cambios para no volver a cometer ¡°los mismos errores¡± en los pr¨®ximos comicios. ¡°Los resultados electorales son malos, sin paliativos¡°, ha reconocido el n¨²mero cuatro, Manu Pineda (IU). ¡°Es hora de humildad y autocr¨ªtica¡±, a?ade en un largo mensaje.
Muy duro ha sido el concejal de M¨¢s Madrid en la capital Eduardo Rubi?o. ¡°Muchos tratamos de advertir en privado mientras callamos en p¨²blico por responsabilidad y respeto a la campa?a electoral. El n¨²cleo dirigente de Sumar debe asumir su responsabilidad en las decisiones que nos han llevado hasta aqu¨ª y replantearse su incapacidad para incorporar y respetar a las organizaciones con arraigo territorial y resultados s¨®lidos en sus territorios. Este resultado es un antes y un despu¨¦s para nuestro espacio pol¨ªtico que no admite m¨¢s pa?os calientes¡±, ha afeado en un mensaje en X.
Sumar hab¨ªa arrancado la campa?a como clara favorita, pero su cabeza de lista, desconocida para el gran p¨²blico, no ha terminado de despegar. Gal¨¢n enarbol¨® un discurso centrado en hacer valer el papel de la formaci¨®n como ¡°motor¡± de los avances sociales en el Gobierno y bajo la premisa de que votarlos a ellos supon¨ªa refrendar las pol¨ªticas de su grupo en el Ejecutivo y darles m¨¢s fuerza para seguir empujando medidas en el Consejo de Ministros, como la reducci¨®n de la jornada laboral, reforma estrella de D¨ªaz. Tratando de marcar perfil propio respecto al PSOE, la formaci¨®n izquierdista prefiri¨®, sin embargo, ignorar a Montero en casi toda su estrategia comunicativa. Podemos hizo lo contrario, con mensajes duros del propio Iglesias, que en la ¨²ltima semana multiplic¨® su presencia para arropar a la exministra, quien hace un a?o qued¨® excluida de las listas del 23-J y este domingo ha vuelto a tener representaci¨®n institucional.
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