S¨¢nchez cierra con L¨®pez la minicrisis por Escriv¨¢ a la espera de otro relevo r¨¢pido para Teresa Ribera

Pedro S¨¢nchez insiste en que hay Gobierno para rato y no tiene encima de la mesa ninguna remodelaci¨®n profunda de su Ejecutivo menos de un a?o despu¨¦s de formarlo. El presidente, seg¨²n su entorno, solo tiene previsto resolver con sendas minicrisis los dos agujeros que se le abren en el Gobierno por dos ascensos de dos de sus miembros a puestos que ansiaban hace tiempo: por un lado el ministro de Transformaci¨®n Digital, Jos¨¦ Luis Escriv¨¢, que siempre so?¨® con ser gobernador del Banco de Espa?a y al que S¨¢nchez ha decidido nombrar en ese puesto pese a las fuertes cr¨ªticas de la oposici¨®n, y la vicepresidenta de transici¨®n ecol¨®gica, Teresa Ribera, que est¨¢ a punto de convertirse en vicepresidenta de la Comisi¨®n Europea. S¨¢nchez ha decidido cerrar la minicrisis de la salida de Escriv¨¢ con el nombramiento de ?scar L¨®pez, su jefe de Gabinete en La Moncloa, un puesto que ahora ocupar¨¢ Diego Rubio, actual responsable de Asuntos Europeos en el equipo del presidente. Y tambi¨¦n tiene previsto cerrar con otra minicrisis puntual la salida de Ribera, manteniendo en principio su vicepresidencia aunque de momento no se conoce qui¨¦n la relevar¨¢.

Con la entrada de L¨®pez en el Gobierno, un veterano del PSOE curtido en muchas batallas a la sombra de varios l¨ªderes del partido ¨Dprimero Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero, donde fue mano derecha de Pepe Blanco; n¨²mero dos del PSOE, despu¨¦s con Alfredo P¨¦rez Rubalcaba y finalmente con S¨¢nchez¨D, el jefe del Ejecutivo refuerza el perfil pol¨ªtico del Gobierno, seg¨²n coinciden varios dirigentes consultados. Escriv¨¢ era un independiente con mucho prestigio pero sin vena pol¨ªtica, y nunca jug¨® ese papel de escudo del presidente y de ariete frente a la oposici¨®n que s¨ª podr¨ªa ejercer L¨®pez, que ya fue en el pasado portavoz parlamentario en el Senado cuando el PSOE estaba en la oposici¨®n. En un momento de debilidad parlamentaria y con la oposici¨®n muy fuerte, porque tiene mucho poder auton¨®mico y local y por primera vez m¨¢s esca?os que el partido del Gobierno, y con una presi¨®n pol¨ªtica m¨¢xima, el perfil de L¨®pez puede ser muy ¨²til para el Gobierno.

Diversas fuentes coinciden en que despu¨¦s de tres a?os muy exigentes al frente del Gabinete, uno de los puestos m¨¢s duros del Gobierno, S¨¢nchez premia a L¨®pez con lo que todos los pol¨ªticos de ese nivel ans¨ªan: ser ministro en teor¨ªa con tres a?os por delante, porque el presidente insiste en que agotar¨¢ la legislatura. L¨®pez lleva toda la vida en pol¨ªtica y ha estado en todo tipo de puestos en el partido y ahora en la jefatura de Gabinete, pero nunca se hab¨ªa sentado en el Consejo de Ministros.

S¨¢nchez apuesta para sustituirle en La Moncloa por un perfil completamente diferente y sin trayectoria pol¨ªtica como Diego Rubio, un independiente que nunca ha estado en ning¨²n partido, pero que en los cuatro a?os que lleva trabajando en la sombra en el equipo del presidente ha desarrollado una visi¨®n pol¨ªtica y estrat¨¦gica y una confianza con el presidente que finalmente le ha valido un ascenso al puesto de m¨¢xima responsabilidad del Gabinete, un minigobierno en el que se toman las decisiones m¨¢s relevantes. L¨®pez y Antonio Hernando, su mano derecha, con Paco Salazar como otra figura clave clave, son tres hombres de partido con v¨ªnculos estrechos en todas las esferas del PSOE y de la administraci¨®n, algo que Rubio no tiene, pero a cambio ofrece un perfil m¨¢s fresco y centrado en visi¨®n estrat¨¦gica y conocimiento de los temas.

En La Moncloa hay mucha expectaci¨®n por ver qu¨¦ cambios introduce Rubio y si salen algunos pesos pesados del Gabinete o hay continuidad. Iv¨¢n Redondo, el antecesor de L¨®pez en La Moncloa, que tampoco ven¨ªa del PSOE, tuvo muchas tensiones con el partido, pero el perfil de Rubio parece muy diferente y nunca ha buscado el protagonismo ni el choque con pesos pesados del partido. Su especialidad es el contenido, el discurso pol¨ªtico y los datos, por lo que participa desde hace mucho tiempo en el n¨²cleo duro que elabora los mensajes del presidente del Gobierno y prepara con ¨¦l sus intervenciones o debates.

Una minicrisis resuelta con r¨¢pidez tras las cr¨ªticas

A diferencia de otros cambios en el Gobierno que han dado lugar a muchas especulaciones y quinielas, S¨¢nchez ha resuelto con rapidez el relevo de Escriv¨¢, dirigiendo de este modo los focos sobre las novedades en el Ejecutivo tras las cr¨ªticas de la oposici¨®n por elegir a un miembro del Consejo de Ministros para el Banco de Espa?a. Despu¨¦s de que EL PA?S adelantara este mi¨¦rcoles al mediod¨ªa la elecci¨®n de ?scar L¨®pez, el Gobierno confirm¨® informalmente el nombramiento incluso antes de que el titular de Econom¨ªa, Carlos Cuerpo, informase en el Congreso de que Escriv¨¢ iba a ser gobernador. Carlos Cuerpo comparecio en la Comisi¨®n de la C¨¢mara Baja a las 15.00 y, poco despu¨¦s, a las 17.30, el presidente del Gobierno hizo una declaraci¨®n institucional en la Moncloa para informar oficialmente de su decisi¨®n.

Con esta minicrisis, y la que vendr¨¢ despu¨¦s con la sustituci¨®n de Ribera, S¨¢nchez da pues por cerrados los cambios y se prepara, como demostr¨® este mi¨¦rcoles en el acto de arranque de curso, para una temporada muy dura en la que se pondr¨¢ a prueba la resistencia del Gobierno y su mayor¨ªa parlamentaria ahora que Junts, despu¨¦s de quedar fuera de la Generalitat por el pacto del PSC con ERC, amenace con tumbar todas las votaciones. De momento S¨¢nchez ha anunciado que la semana que viene llevar¨¢ al Consejo de Ministros el techo de gasto para empezar de nuevo el tr¨¢mite para intentar aprobar unos Presupuestos. Si se lo vuelven a tumbar, como pas¨® en julio, las Cuentas estar¨¢n pr¨¢cticamente muertas este a?o, pero el Gobierno est¨¢ absolutamente dispuesto a seguir aunque tenga que prorrogarlas.

¡°Hay Gobierno para rato¡±, insist¨ªa el presidente, que abr¨ªa adem¨¢s la batalla ideol¨®gica contra las comunidades del PP porque bajan impuestos a los ricos mientras ¨¦l tiene toda la intenci¨®n de sub¨ªrselos con nuevas reformas. Con L¨®pez y a la espera del relevo de Ribera, el Gobierno se rearma as¨ª para una etapa pol¨ªtica en la que la oposici¨®n tratar¨¢ de convencer a los ciudadanos de que el Gobierno agoniza y el presidente y su equipo har¨¢n cada d¨ªa lo contrario. ¡°Son buenos tiempos para los optimistas¡±, resumi¨® S¨¢nchez, que insiste en que Espa?a vive uno de los mejores momentos de su historia y la crispaci¨®n y el ruido es una construcci¨®n pol¨ªtica medi¨¢tica que no se corresponde con la realidad que cualquiera ha podido ver este verano en sus vacaciones.