El caso de acoso sexual de ERC enturbia la precampa?a

La mayor¨ªa de partidos arremetieron ayer contra ERC por la gesti¨®n del caso de acoso sexual en el departamento de Acci¨®n Exterior. El esc¨¢ndalo se sald¨® el pasado lunes con la renuncia del ¡®conseller¡¯ Alfred Bosch por no activar el protocolo antiacoso de la Generalitat y haber protegido a su exjefe de gabinete Carles Garcias. M¨¢s all¨¢ de las cr¨ªticas, algunas incluso compartidas en las filas republicanas, en ERC sienten que sus socios de Govern intentan sacar r¨¦dito electoral del caso. La Generalitat ha detectado diez casos de acoso desde 2015.

El PSC carg¨® con dureza contra Sergi Sabri¨¤, presidente del grupo parlamentario de Esquerra, despu¨¦s de que afirmara que su partido hab¨ªa puesto, con la dimisi¨®n de Bosch, el ¡°list¨®n muy alto¡± en cu¨¢nto a exigencia ¨¦tica. La diputada Alicia Romero consider¨® muy ¡°desafortunada¡± esa valoraci¨®n y subray¨® que ERC no actu¨® con ¡°celeridad¡± para tratarse de un ¡°partido de izquierdas y feminista¡±. Romero tach¨® de ¡°indecente¡± que Bosch intentara ¡°recolocar¡± Garc¨ªas.

El exjefe de gabinete de Bosch fue relevado el pasado 24 de enero despu¨¦s de que se tuviera constancia de que hubiera acosado a ocho trabajadoras del departamento. ERC intent¨® el lunes capear el asunto, que trascendi¨® por una informaci¨®n period¨ªstica pero le super¨® la presi¨®n. ¡°Lo he hecho lo mejor que he sabido¡±, lament¨® Bosch cuando present¨® su dimisi¨®n. Su sustituta temporal ser¨¢ la republicana Teresa Jord¨¤, consejera de Agricultura.

La portavoz de los Catalunya en Com¨², Susanna Segovia, portavoz de los ¡®comunes¡¯, reclam¨® ¡°tolerancia cero¡± y atribuy¨® la marcha de Bosch a ¡°su mala gesti¨®n¡±. ¡°Queremos que se llegue al fondo de la cuesti¨®n y no quede impune ning¨²n responsable ni conocedor de la cuesti¨®n que ha hecho dimitir a Bosch¡±, pidi¨® el diputado de Ciudadanos David Mej¨ªas.

ERC se insiste en el mensaje de ejemplaridad pero hay un sector que acepta que no se actu¨® del todo bien. Sin embargo, miran con cierta estupefacci¨®n la reacci¨®n de Junts per Catalunya que consideran que va m¨¢s all¨¢ de la leg¨ªtima cr¨ªtica. Les sorprende, por ejemplo, la manera como se han coordinado los mensajes en las redes sociales y que el lunes, despu¨¦s de que el diario ¡®Ara¡¯ destapara el caso, varios jefes de prensa de varios departamentos enviaran mensajes criticando la versi¨®n de Esquerra.

La Generalitat dispone de un protocolo contra el acoso sexual y por orientaci¨®n sexual desde hace cinco a?os. En este lustro, ha tramitado 25 denuncias, de las que 10 han resultado en efectivos ¡°indicios¡± de acoso, aunque no se especifica de qu¨¦ tipo ni c¨®mo se saldaron, por una cuesti¨®n de confidencialidad. En otras 12 ocasiones se han archivado los casos; en otros dos la persona denunciante retir¨® la denuncia y otro se est¨¢ estudiando, seg¨²n detalla Pilar Sorribas, directora general de Funci¨®n P¨²blica. Un caso de acoso sexual est¨¢ tipificado como falta muy grave. Del caso de Exteriores no ten¨ªan conocimiento.

La portavoz de la Generalitat, Meritxell Bud¨®, admiti¨® ayer que quiz¨¢ no han difundido suficientemente el protocolo entre las trabajadoras de la Generalitat ¡ªalgo que comparten los sindicatos¡ª pero descart¨® revisar su contenido. ¡°No es el protocolo lo que ha fallado. Hemos actuado cuando hemos sido conocedores de los hechos¡±, dijo. Ninguna de las ocho afectadas o las personas que conocieron los hechos siguieron el protocolo sino que Bosch comenz¨® una investigaci¨®n por su cuenta y ERC hizo lo propio. La tesis de Bud¨® contrasta con la de Sorribas que alega que divulgado profusamente el instrumento. Los trabajadores de Acci¨®n Exterior emitieron una nota pidiendo modificar el protocolo y facilitar el proceso de denuncia.