Ocho semanas negras angustian al barrio de Bonavista

El barrio de Bonavista, en Tarragona, vive su arranque de a?o m¨¢s oscuro. Sus vecinos se vieron golpeados de manera directa por la explosi¨®n de la planta qu¨ªmica Iqoxe y sufren ahora los efectos de la suspensi¨®n del popular mercado semanal por culpa del coronavirus. El impacto econ¨®mico es may¨²sculo. ¡°Si lo sufrimos cuando llueve, no te digo si nos lo suspenden¡±, lamenta Loli Guti¨¦rrez, la presidenta de la asociaci¨®n de vecinos.

El mercadillo de los domingos en Bonavista abarca unos 800 puestos de ropa, calzado, complementos, bisuter¨ªa, perfumer¨ªa, objetos para el hogar, plantas, fruta y verdura. Hay de todo y en el barrio se repite como ciencia cierta que se trata de uno de los principales mercados al aire libre de Europa. "Cada semana lo visitan m¨¢s de 10.000 personas", afirma Loli Guti¨¦rrez, a la vez que defiende que la cita semanal supone una inyecci¨®n de dinero para todos los otros comercios del barrio, desde bares y restaurantes a gasolineras y panader¨ªas.

Bonavista se qued¨® sin mercado este domingo y se desconoce cu¨¢ndo va a poder volverse a celebrar. La suspensi¨®n fue repentina, concede Juan Ben¨ªtez, presidente de los marchantes. "A las 5 de la tarde del viernes el Ayuntamiento lo daba por autorizado, pero a las 11 de la noche se nos comunic¨® la cancelaci¨®n, alegando que no se pod¨ªa controlar el aforo", manifiesta Ben¨ªtez. En el comunicado del Consistorio consta que no se ve¨ªa posible garantizar "las medidas sobre limitaci¨®n de aforo e higiene que determina la Generalitat", en pleno brote de coronavirus.

"En m¨¢s de 40 a?os, es la primera vez que se suspend¨ªa", detalla Loli Guti¨¦rrez. "Recibimos un escrito de la Generalitat donde se manifestaba que los puestos ambulantes de fruta y verdura s¨ª pod¨ªan salir a vender, y ahora resulta que el g¨¦nero se ha quedado en los camiones y en los almacenes, pudri¨¦ndose", critica Juan Ben¨ªtez. En Tarragona los mercados ambulantes est¨¢n cancelados desde el jueves de la semana pasada. "Llevamos m¨¢s tiempo parados que ning¨²n bar o que cualquier negocio, esto no hay quien lo entienda", se?ala el representante de los marchantes.

La asociaci¨®n ha mandado un escrito al Ayuntamiento pidiendo ayudas y compensaciones. ¡°El sector ya iba muy justo, al l¨ªmite, y esto es un palo duro, una ruina". Reclaman que el Consistorio condone la cuota trimestral que da derecho a los marchantes a montar un puesto en cualquier de los mercados ambulantes de la ciudad, ya sea el dominical de Bonavista, el del s¨¢bado en Torreforta o el de los martes y jueves en el centro. Un puesto de unos 12 metros de largo abona algo m¨¢s de 1.400 euros por trimestre. "Se habla mucho de potenciar los mercados, pero si no hay ayudas para el vendedor, no hay nada que hacer", avisa Ben¨ªtez. En Bonavista la suspensi¨®n por tiempo indeterminado del mercado causa contrariedad. Este lunes, veh¨ªculos de la Guardia Urbana y de Protecci¨®n Civil recorr¨ªan las calles con la megafon¨ªa alertando de la necesidad de confinamiento.

Motivos distintos, pero estampa similar a la de hace dos meses, cuando el barrio se estremeci¨® por un estallido en la cercana planta qu¨ªmica de la empresa Iqoxe. Aquel suceso que provoc¨® tres muertos, entre ellos un vecino del barrio, que qued¨® sepultado en su casa por efecto de la onda expansiva. Las ayudas por los da?os que caus¨® la explosi¨®n se han encallado en la tramitaci¨®n. Iqoxe prometi¨® hacerse cargo de los desperfectos de aquellos vecinos que no ten¨ªan ning¨²n seguro contratado, pero ¡°lo ¨²nico que han hecho han sido mandar a los peritos¡±, critica Loli Guti¨¦rrez, quejosa por la tardanza en la reparaci¨®n de los destrozos. ¡°Estamos muy enfadados y creemos que nos sobran razones. En dos meses no nos han arreglado nada, ni en los locales afectados ni en las casas donde se rompieron cristales y persianas¡±.