Las diferencias de programa tensionan el futuro espacio neoconvergente

Una de las claves pendientes en el tablero pol¨ªtico catal¨¢n es la reorganizaci¨®n del espacio donde conviven el PDeCAT, Junts per Catalunya y La Crida, una suma de alto espectro ideol¨®gico. La discusi¨®n sobre el futuro partido se ha centrado m¨¢s en su organizaci¨®n interna y ha dejado a un lado cu¨¢l ser¨¢n su ideolog¨ªa y programa. Todas las partes aceptan que, m¨¢s all¨¢ de mantener el esp¨ªritu del 1-O, no se ha entrado en detalle.

El PDeCAT aire¨®, hace dos semanas, una diferencia program¨¢tica. Su presidente, David Bonveh¨ª, carg¨® contra el impuesto de sucesiones pactado (y votado) por Junts, ERC y los comunes. ¡°Siempre nos hemos mostrado contrarios, es claramente confiscador, injusto y desfasado¡±, escribi¨® en La Vanguardia, asegurando que afectar¨¢ a ¡°las clases medias y a las m¨¢s desfavorecidas¡±. El Govern espera recaudar 190 millones anuales.

El desmarque con sus socios y con el Ejecutivo no es gratuito, y menos en tiempos casi preelectorales. Tambi¨¦n ejemplifica la tensi¨®n ideol¨®gica que existir¨ªa en el nuevo espacio en gestaci¨®n. Pero la discusi¨®n a¨²n no est¨¢ ah¨ª. ¡°Las pol¨ªticas reales y efectivas sobre el eje izquierda derecha tendr¨¢n sentido con las herramientas que da un Estado. De momento, gestionamos migajas¡±, explica Gerard Ses¨¦, miembro de la direcci¨®n pol¨ªtica de La Crida. ¡°Nuestra oferta es poner en el centro c¨®mo pueden vivir mejor los catalanes y la respuesta sigue estando en el eje Espa?a Catalu?a¡±, defiende el portavoz de Junts en el Parlament, Eduard Pujol.

Lo cierto es que la marca JxCat, desde el 21-D (en una situaci¨®n claramente excepcional), ha concurrido a todas las citas electorales, con sus respectivos programas. Estos textos, junto con la demoscopia, permite ubicar d¨®nde est¨¢ ahora el mundo neoconvergente y, sobre todo, su votante.

El Regional Manifest Project es una iniciativa, adscrita a la Universidad de Deusto, que analiza el contenido de los programas de los partidos a nivel auton¨®mico. De esa sistematizaci¨®n, explica Llu¨ªs Orriols, doctor en ciencia pol¨ªtica y profesor en la Universidad Carlos III, se desprende que el espacio convergente se ha ido desplazando progresivamente desde la derecha, en los a?os 80, al centro (2008-2010) y de ah¨ª m¨¢s hacia la izquierda en las ¨²ltimas elecciones catalanas.

¡°Desde el inicio el proc¨¦s, la opini¨®n p¨²blica catalana ha virado a posiciones m¨¢s ubicadas en la izquierda. Han cambiado el eje ideol¨®gicos y el nacional¡±, a?ade Mario R¨ªos, profesor en la Universitat de Girona y analista pol¨ªtico. Esto se ve reflejado, a?ade, en la manera en que se autoubican los electores. En 2008, seg¨²n el CEO, los votantes convergentes se ubicaban mayoritariamente en el centro (38,6%), en el centroizquierda (18,9%) y en el centroderecha (12,6%). Solo un 10,9% se ubicaba en la izquierda. ¡°En 2016, la autoubicaci¨®n en la izquierda se multiplic¨® por tres¡±, explica R¨ªos.

El ¨²ltimo CEO posiciona a los votantes de Junts per Catalunya en un 4 en la escala de 1 (izquierda) a 10 (derecha). ¡°Que los votantes se vean m¨¢s a la izquierda no es garant¨ªa de que defiendan postulados ideol¨®gicos de la izquierda¡±, agrega R¨ªos. ¡°Es dif¨ªcil posicionarse en categor¨ªas m¨¢s hacia la derecha cuando esas posiciones se asocian al espa?olismo, es decir, a la opci¨®n contraria en el eje nacional¡±, a?ade. De ah¨ª la dificultad para que una propuesta catalana se abra a abrazar esa etiqueta aunque su praxis pol¨ªtica s¨ª se pueda categorizar as¨ª.

El expresident Carles Puigdemont defendi¨® el jueves, en un coloquio en el digital Vilaweb, la presencia del PDeCAT. ¡°Aqu¨ª no sobra nadie¡±, dijo. ¡°CiU no existe, ni Uni¨®, ni Converg¨¨ncia y sus pol¨ªticas no las representa JxCat en Madrid¡±, agreg¨® para aceptar despu¨¦s que es un reto tener que gestionar un movimiento tan heterodoxo. El programa, eso s¨ª, no aparece por ninguna parte. ?Cu¨¢l es el l¨ªmite el¨¢stico? Orriols cree que Junts hasta ahora ha hecho programas cortoplacistas pero si quiere prolongarse en el tiempo tendr¨¢ que ir m¨¢s all¨¢. ¡°Es un espacio que depende m¨¢s de los v¨ªnculos que genera Puigdemont que de los v¨ªnculos program¨¢ticos. Eso es algo que tarde o temprano tendr¨¢n que afrontar¡±, explica.