Empat¨ªa y profesionalismo sanitario

Dec¨ªa Arist¨®teles que percibir era sufrir. Tener la capacidad de percibir y entender lo que pasa a nuestro alrededor puede provocar sufrimiento en quien lo detecta. Podr¨ªa ser una primera definici¨®n de empat¨ªa. La empat¨ªa es la capacidad de entender los sentimientos ajenos, ponernos en sus zapatos, y comunicarlo. Aunque de la empat¨ªa todo el mundo habla, su estudio cient¨ªfico es reciente. Y no s¨®lo en el ¨¢mbito de la salud, sino cada vez se subraya su importancia en los l¨ªderes y pol¨ªticos.

Y es que la empat¨ªa de los profesionales sanitarios es una cualidad que debemos desarrollar y que ha mostrado beneficios cl¨ªnicos. Pero adem¨¢s hay algo muy importante. Los profesionales m¨¢s emp¨¢ticos padecen menos burnout. El burnout o desgaste profesional provoca deshumanizaci¨®n, agotamiento emocional y poca realizaci¨®n profesional. Y esto es nefasto para el profesional y sus pacientes. Tras la pandemia nos encontramos en un momento de cambio, y es fundamental buscar estrategias que frenen y reduzcan el grado de burnout de nuestros profesionales. Hasta ahora, los profesionales de la sanidad de todos los grupos profesionales han trabajado estoicamente. Hemos mostrado vocaci¨®n y voluntad de servicio. Sin embargo, el agotamiento emocional es una v¨ªa fundamental para consolidar el burnout. Y los profesionales estamos agotados f¨ªsica y emocionalmente. Y mucho.

Nuestro grupo de investigaci¨®n detect¨® que eran los profesionales con una empat¨ªa media eran los que obten¨ªan mejores resultados en los ¨ªndices de calidad asistencial. Por que lo podr¨ªamos concluir que la virtud est¨¢ en el t¨¦rmino medio. Profesionales con buenos niveles de empat¨ªa, pero con una base cient¨ªfica s¨®lida. Ni profesionales muy emp¨¢ticos, pero poco competentes, ni grandes cl¨ªnicos que no miren a sus pacientes a la cara.

Ha llegado el momento en que el profesional tambi¨¦n est¨¦ en el centro del sistema. En los ¨²ltimos a?os el sistema ha aguantado gracias a la dedicaci¨®n y esfuerzo de los profesionales, y es justo que en un nuevo modelo estemos en el centro. Con una premisa clara, unos profesionales satisfechos y realizados tendr¨¢n menor burnout. Esto se traducir¨¢ en profesionales con mayor predisposici¨®n hacia la empat¨ªa. Y en esta ecuaci¨®n conseguiremos beneficios cl¨ªnicos y profesionales m¨¢s satisfechos. ?No es un buen resultado?

Es el momento de escoger qu¨¦ modelo de profesional queremos. Hablando claro y poniendo de relieve las cualidades que siempre hemos tenido. Evidentemente que habr¨¢ que hablar de sueldos, pero va m¨¢s all¨¢. Los profesionales sanitarios queremos trabajar mejor, sentir que no hacemos tareas absurdas o que se limita nuestra actividad. Hemos asumido retos en los que hemos demostrado ser efectivos y que muestran que los liderazgos cl¨ªnicos dan buenos resultados. ?Podemos pensar en un sistema con liderazgos cl¨ªnicos consolidados, profesionales realizados y con la capacidad de entender los problemas de los pacientes? S¨ª, podemos. Y debemos hacerlo. Escuchando e implicando a todo el territorio.

Tenemos la oportunidad de sentar las bases para conseguirlo y cuidar a los que cuidan. Para preparar profesionales que den lo mejor de s¨ª mismos y evitar que se vayan del pa¨ªs. Para volver a tener el mejor sistema de salud. Porque hemos de saber que el sistema no son las infraestructuras, son sus profesionales. Es el momento de invertir en nosotros. Hemos demostrado que somos un bien para nuestro pa¨ªs.

Oriol Yuguero es m¨¦dico del Hospital Universitari Arnau de Vilanova de Lleida