Junts lleva al l¨ªmite la relaci¨®n con Esquerra al abortar la investidura
Aragon¨¨s ir¨¢ a la segunda votaci¨®n el martes, desoyendo la petici¨®n de desistir de sus socios
Pere Aragon¨¨s se someti¨® este viernes a la primera votaci¨®n de investidura y, como estaba previsto, no logr¨® votos suficientes para ser elegido presidente de la Generalitat catalana. Tampoco est¨¢ claro si lo lograr¨¢ la semana pr¨®xima. Sus eventuales socios de Junts, que se abstuvieron, le recomendaron desistir de la segunda ronda de voto del martes, darse m¨¢s tiempo para negociar y centrarse en cerrar con ellos un acuerdo de legislatura. Aragon¨¨s desoy¨® esa petici¨®n y seguir¨¢ con su plan, pero el enfrentamiento abre una herida de dif¨ªcil cura si llegan a compartir Ejecutivo. El desacuerdo se centra en qu¨¦ papel dar a la figura de Carles Puigdemont.
El debate acab¨® con Aragon¨¨s recibiendo el apoyo de 42 diputados (los 33 de su partido y los nueve de los anticapitalistas de la CUP), la abstenci¨®n de los 32 de Junts y el voto en contra de los 61 restantes. Si finalmente hay un pacto entre independentistas, el cacareado ¡°Govern fuerte¡± tendr¨¢ el lastre de un president deliberadamente debilitado, con la autoridad cuestionada desde antes de ser elegido: el l¨ªder de ERC ofreci¨® a la CUP una moci¨®n de confianza a medio mandato. Fuentes de los republicanos quitan hierro: el poder de la jefatura del Govern, dicen, reescribir¨¢ todo.
La decisi¨®n de la presidenta de la C¨¢mara, Laura Borr¨¤s, de fijar la pr¨®xima votaci¨®n el martes y no el domingo da tres d¨ªas a las partes para negociar. Pero las posiciones est¨¢n encalladas y los orgullos muy pisoteados. Los de Puigdemont descartan unas nuevas elecciones, pero anoche se accion¨® la cuenta atr¨¢s de dos meses para que se disuelva la C¨¢mara si no se elige a un president.
Desde hace d¨ªas, varias voces de Junts alertan de que son necesarias ¡°d¨ªas o semanas¡± para cerrar un pacto ¡°estable¡±. Los republicanos insist¨ªan en que las diferencias no eran insalvables. Adem¨¢s, tras el acuerdo con la CUP, cre¨ªan que Junts estar¨ªa obligada a explicar por qu¨¦ romp¨ªa la mayor¨ªa independentista obtenida el 14-F. Y entidades como la patronal Foment del Treball o los sindicatos abogaban por cerrar r¨¢pidamente un Ejecutivo que atienda la crisis de la pandemia.
Los de Puigdemont ya informaron el viernes de que se abstendr¨ªan, pero estaban pendientes de escuchar a Aragon¨¨s. Los gui?os que esperaban no llegaron. No sent¨® bien que se les mencionara como a un grupo m¨¢s ¡ªen la misma frase en la que se ped¨ªa apoyo a En Com¨² Podem¡ª y que no se incluyeran sus peticiones de blindar, por ejemplo, el Consell de la Republica, la entidad que el expresident pr¨®fugo pilota desde B¨¦lgica.
Aragon¨¨s, que agradeci¨® y se comprometi¨® a cumplir los acuerdos alcanzados con la CUP, hizo un debate centrado en la pol¨ªtica social, con anuncios concretos. Huyendo de la ret¨®rica m¨¢s esencialista de su antecesor Quim Torra, el republicano dijo que en los 100 primeros d¨ªas de su Govern movilizar¨¢ 700 millones de euros para atender el desempleo juvenil y reforzar la atenci¨®n social. Su Ejecutivo, agreg¨®, dedicar¨¢ 1.000 millones en cuatro a?os a medidas de vivienda y tendr¨¢ una ¨®ptica feminista.
El lado reformista de Aragon¨¨s tambi¨¦n qued¨® plasmado en su discurso de intervenci¨®n a los oligopolios para proteger a emprendedores y peque?os empresarios. ¡°Por eso defiendo la intervenci¨®n p¨²blica, para corregir la tendencia natural a crear posiciones de dominio que adulteran la libertad econ¨®mica¡±, explic¨®.
Una de las cr¨ªticas de Junts durante las negociaciones ha sido la falta de concreci¨®n de ERC en la hoja de ruta independentista: qu¨¦ pasos seguir si fracasa la mesa de di¨¢logo con el Gobierno o c¨®mo evitar que se eternice. Aragon¨¨s defendi¨® su apuesta por forzar la celebraci¨®n de un refer¨¦ndum acordado y la aprobaci¨®n de una amnist¨ªa, pero no entr¨® en el detalle de cu¨¢l ser¨ªa el margen de la unilateralidad. ¡°Seguiremos construyendo las alternativas para construir la rep¨²blica¡±, dijo.
La intervenci¨®n de Salvador Illa, posterior a la de Aragon¨¨s y tras la pausa de la comida, sirvi¨® para que Junts y ERC reajustaran posiciones. El socialista desahuci¨® a un Govern que nazca as¨ª de enfrentado. El candidato a la investidura volvi¨® al atril sabiendo que el jefe de filas de Junts, Albert Batet, le pedir¨ªa casi el haraquiri pol¨ªtico. ¡°Le proponemos formalmente que renuncie a la segunda votaci¨®n hasta que no haya un acuerdo entre los 74 diputados¡±, le dijo Batet. Aragon¨¨s, de momento, mantiene el pulso.
El papel de Puigdemont
La r¨¦plica a Junts, sin embargo, dej¨® claro que el papel de Puigdemont en el futuro institucional de Catalu?a es uno de los puntos sensibles de la negociaci¨®n y en el que hay poco margen para hacer cesiones. Batet cree que ERC busca deslegitimar ¡°el mandato¡± del refer¨¦ndum del 1-O y defendi¨® que todas las victorias logradas por el independentismo en los ¨²ltimos a?os tienen el sello ¡°del exilio¡±, en referencia a las negativas de B¨¦lgica a entregar al exconsejero Llu¨ªs Puig, por ejemplo. El Consell, ahond¨®, tiene que ser ¡°el ¨®rgano deliberativo y decisorio¡± de la hoja de ruta independentista. ¡°Mi concreci¨®n es la que ustedes llevaban en el programa. M¨¢s facilidades no podemos ofrecer¡±, respondi¨® Aragon¨¨s y record¨® que la coordinaci¨®n del secesionismo tiene que ser ¡°plural¡±.
La idea de ¡°rehacer la confianza¡± fue una de las m¨¢s repetidas tanto en Junts como en ERC, durante la campa?a. En la negociaci¨®n, aparte de los manuales de rigor, tambi¨¦n parece que se ech¨® mano del c¨®digo de Hammurabi y su m¨¢xima de ojo por ojo. Batet no escatim¨® tiempo el viernes en recordar c¨®mo el expresidente del Parlament Roger Torrent (ERC) acat¨® a la Justicia y evit¨® la investidura telem¨¢tica de Puigdemont. Y que tampoco evit¨® que se le retirara el acta a Quim Torra cuando lo determin¨® la Junta Electoral por desobediencia. ¡°No tenemos dudas que usted ser¨¢ el 132? presidente de la Generalitat¡±, remach¨®, no obstante, Batet.
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