Junts exige a ERC unidad de voto en temas soberanistas en el Congreso para investir a Aragon¨¨s
Los republicanos reclaman su margen de maniobra en la estrategia independentista
Junts per Catalunya quiere que el acuerdo de Govern con ERC incluya tambi¨¦n la coordinaci¨®n del independentismo en el Congreso de los Diputados ante temas soberanistas. Se trata de un peaje que los republicanos no est¨¢n dispuestos a pagar y que se suma a otros tantos disensos que han hecho imposible cerrar el Ejecutivo de la Generalitat. La portavoz de Junts, Elsa Artadi, reconoce ¡°avances¡±, pero los 32 diputados se abstendr¨¢n este martes en la segunda votaci¨®n del debate de investidura de Pere Aragon¨¨s. Junts espera ¡°un giro¡± en el discurso del candidato. ERC ve ¡°una oportunidad perdida¡±.
Junts garantiza que Aragon¨¨s ser¨¢ presidente, pero a?ade que a¨²n no es tiempo para apoyar la investidura. El republicano pasar¨ªa as¨ª a la historia como el primer jefe del Govern cuyos socios le han llevado a someterse a dos debates frustrados antes de llegar al Palau de la plaza de Sant Jaume. El pleno del pasado viernes se celebr¨® porque ese d¨ªa se cumpl¨ªa el plazo legal para hacer la primera votaci¨®n. Al no lograr la mayor¨ªa absoluta (que solo era posible si ERC, Junts y CUP un¨ªan sus votos, 74), se abr¨ªa la opci¨®n de una segunda votaci¨®n, dos d¨ªas despu¨¦s. En la sesi¨®n de hoy basta pues la mayor¨ªa simple, pero, seg¨²n Artadi, tampoco se conseguir¨¢. ERC y CUP solo suman 42 esca?os de un total de 135.
Uno de los ¡°giros¡± que desde Junts defienden que podr¨ªa acelerar las cosas es la concreci¨®n respecto a la unidad de acci¨®n en el Congreso de los Diputados. La llamada hoja de ruta independentista tiene diversos niveles, por ejemplo, los l¨ªmites al di¨¢logo con el Gobierno, c¨®mo cristalizar¨ªa un nuevo envite unilateral si la mesa de negociaci¨®n fracasa o la vertiente de internacionalizaci¨®n del secesionismo.
La sincronizaci¨®n de 17 diputados independentistas en el Congreso (ERC tiene 13 esca?os, Junts, cuatro y la CUP, dos, pero no entra en el acuerdo) puede convertirse en la nueva patata caliente de las negociaciones. Este asunto toma el relevo del papel del futuro del Consell de la Rep¨²blica, que pilota Carles Puigdemont desde B¨¦lgica. El organismo anunci¨® ayer, mediante una nota, que se abre a reformular su estructura y funcionamiento. Junts quiere que se le reconozca su legitimidad ¡ªen ¨²ltimas, la del expresidente catal¨¢n huido de la justicia¡ª de ser el ¨®rgano que lidere la lucha independentista desde el exterior. Republicanos y anticapitalistas creen que se trata de una entidad privada que recae en el personalismo de Puigdemont y piden que haya una mesa m¨¢s amplia.
La reformulaci¨®n abre la puerta al encaje de ambas posiciones. Pero m¨¢s dif¨ªcil es llegar a un entendimiento en la estrategia en Madrid. Junts critica que ERC ha dado ¡°gratis¡± sus votos al Gobierno de Pedro S¨¢nchez y rechazan el apoyo a los Presupuestos. Si bien la propuesta de Junts pasa por dejar al margen los temas sectoriales en la unidad de acci¨®n, hay zonas grises como los Presupuestos.
Para ERC, el Congreso es una vitrina para su giro estrat¨¦gico de aparcar la unilateralidad de 2017. Su plan para forzar el refer¨¦ndum o lograr la amnist¨ªa pasa por condicionar la pol¨ªtica espa?ola. Y, por el camino, ir arrastrando las competencias y recursos de m¨¢s que la aritm¨¦tica le permita. Lo mismo sucede para Junts o la CUP. Los anticapitalistas creen que se pueden ¡°hackear¡± las instituciones y los de Puigdemont tienen el hemiciclo como el espacio privilegiado para desplegar su discurso de confrontaci¨®n.
Su din¨¢mica de voto ha sido diversa y en muchas ocasiones enfrentada. M¨¢s all¨¢ de la propia investidura y de los Presupuestos, por ejemplo, est¨¢n los apoyos al estado de alarma. Tras votar abstenerse en la primera pr¨®rroga, la CUP se instal¨® en el no. Junts se abstuvo al principio, pero despu¨¦s secund¨® a los anticapitalistas. ERC tambi¨¦n vot¨® no despu¨¦s de abstenerse en las tres primeras pr¨®rrogas.
Un bloque de 19 diputados independentistas en Madrid abre nuevas posibilidades de presi¨®n e implicar¨ªa que Pedro S¨¢nchez pierda a uno de los miembros de la mayor¨ªa que facilit¨® su investidura. Si bien ERC nunca ha sido un socio fijo y siempre hay dudas sobre cu¨¢l ser¨¢ su posici¨®n, la posibilidad num¨¦rica siempre estaba ah¨ª. Si los republicanos renuncian a su autonom¨ªa es probable que las negociaciones para unas nuevas cuentas sean mucho m¨¢s dif¨ªciles, por no decir casi imposibles si se tienen en cuenta los planteamientos maximalistas de Junts.
Los anticapitalistas ya se hab¨ªan desmarcado de ese gran bloque (para ellos solo cuenta el acuerdo que tienen con ERC) y los republicanos buscan c¨®mo modularlo. Su portavoz, Marta Vilalta, pidi¨® ayer a Junts que este martes vote a favor de Aragon¨¨s por una cuesti¨®n de mera ¡°confianza¡±. ¡°Si ya encarrilamos la reformulaci¨®n del Consell y la construcci¨®n del espacio estrat¨¦gico, lo que toca es un gesto de responsabilidad en el debate de investidura¡±, a?adi¨® la tambi¨¦n diputada y miembro de la comisi¨®n negociadora.
Generar confianza
En ERC entienden que las probabilidades de ¨¦xito del pleno de hoy son escasas. ¡°Puede ser una oportunidad perdida¡±, acept¨® la propia Vilalta. En las filas republicanas defienden que retirarse del debate (como le pidi¨® el pasado viernes a Aragon¨¨s el l¨ªder de Junts en la C¨¢mara, Albert Batet, ante la falta de un pacto) era dar la imagen de genuflexi¨®n ante Puigdemont como l¨ªder del independentismo. ¡°Si alguien se quiere descolgar de la mayor¨ªa del 14-F, que lo explique¡±, insiste una fuente de la direcci¨®n de ERC.
En Junts se lo siguen tomando con calma y con la seguridad de que, en una negociaci¨®n, quien tiene los votos necesarios tiene la sart¨¦n por el mango. ¡°No s¨¦ si ser¨ªa m¨¢s ¨²til que, en vez de encerrarnos 12 horas en el Parlament, nos reuni¨¦ramos y avanz¨¢ramos en el pacto¡±, dijo ayer Artadi. La portavoz explic¨® que a¨²n no se ha entrado en el plan de Gobierno y, menos, en el reparto de sillas.
La ejecutiva de Junts vot¨® ayer por abstenerse en el debate de hoy pero hay voces que abogaron por darle un no a Aragon¨¨s. Y tambi¨¦n hay sensibilidades que lamentan que tras 43 d¨ªas de las elecciones se haya dejado el grueso de las negociaciones para la ¨²ltima semana y se roce con dar la imagen de intransigencia. De unos d¨ªas para ac¨¢, desde Junts intentan tambi¨¦n marcar perfil social para evitar que se les se?ale de solo estar interesados en el soberanismo. Y ambos partidos coinciden en la necesidad de trabajar la confianza mutua. Artadi justific¨® la tardanza en las negociaciones precisamente para evitar choques: ¡°Queremos un acuerdo muy concreto que despu¨¦s no nos genere problemas¡±, defendi¨®. Desde el pasado viernes corre el reloj de dos meses para convocar nuevos comicios.
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