Hacer un Valls

Al final ha tenido que intervenir un tribunal para decir algo tan obvio como que la Generalitat de Catalu?a tiene la obligaci¨®n de vacunar, en un plazo espec¨ªfico, a los miembros de la Polic¨ªa Nacional y la Guardia Civil que operan en la comunidad aut¨®noma para equipararlos a la cifra de vacunados de los Mossos de Esquadra y las polic¨ªas locales. Mira que es f¨¢cil de entender¡­ Pero lo m¨¢s interesante fueron las dos primeras explicaciones de dos altos responsables del Govern. La primera, en boca de la consejera del asunto, es que aqu¨ª se vacuna por franjas de edad, y la segunda explicaci¨®n, que si segu¨ªan esa orden, quedar¨ªan personas de 70 a?os sin inmunizar. Podr¨ªamos a?adir al argumentario al genio de Waterloo, un gigante de la Historia, que sac¨® como explicaci¨®n el hecho de que agentes de esos cuerpos de seguridad ¡°golpearon salvajemente a los catalanes el 1-O¡±.

La dos primeras explicaciones obligaron a m¨¢s de uno y de dos a echar mano de la calculadora. Si a tal fecha est¨¢n vacunados el 80% de los agentes de Mossos d¡¯Esquadra y el 70% de los polic¨ªas locales, mientras que solo lo estaban (cuando interviene el tribunal mencionado) el 9% y el 7% de polic¨ªas nacionales y guardia civiles, la conclusi¨®n es espectacular. Y cient¨ªfica: el 80% de los agentes de la polic¨ªa catalana tienen 70 a?os o m¨¢s, mientras que polic¨ªas nacionales y guardia civiles est¨¢n todav¨ªa en la flor de la vida.

Deber¨ªa costar poco que Aragon¨¨s se dirija al hemiciclo para plantear la necesidad de acabar con esta par¨¢lisis

Deber¨ªa costar poco que Aragon¨¨s se dirija al hemiciclo para plantear la necesidad de acabar con esta par¨¢lisis

Ante tal desprop¨®sito, uno no puede dejar de ver con curiosidad que el lugar de la emocionante negociaci¨®n para ver si un a?o u otro Catalu?a tendr¨¢ Govern, es una c¨¢rcel, de la que entran y salen seg¨²n sea San Jordi u otra campa?a electoral, pol¨ªticos presos, diputados electos, l¨ªderes de partidos independentistas¡­ ah! Y el se?or Aragon¨¨s, flanqueado por las se?oras Borr¨¤s y Artadi.

Parece evidente a estas alturas que Junts tiene todo el inter¨¦s en prolongar el asunto, hasta que no quede m¨¢s remedio que convocar nuevas elecciones auton¨®micas, con la esperanza de sacar esta vez uno o dos diputados m¨¢s que Esquerra, con la CUP mareando la perdiz sabiendo que lo podr¨¢ seguir haciendo ganen unos u otros. Como bien ha escrito el periodista M¨¤rius Carol, en su magn¨ªfico libro sobre sus a?os como director de La Vanguardia, estos de la CUP siempre ganan sin mancharse la camisa, sin despeinarse y sin tener a nadie en la c¨¢rcel.

Deber¨ªa costar poco que el se?or Aragon¨¨s (no ERC en abstracto, no el se?or Junqueras, ¨¦l) decida ejercer su liderazgo, afirmar que este juego de la oca tiene que acabar, dirigirse a todo el hemiciclo, y plantear la necesidad de: a) acabar con esta par¨¢lisis de Gobierno; b) someterse a la votaci¨®n de investidura y pedir formalmente las abstenciones (o votos favorables) que considere necesarias; y c) plantear con el lenguaje que haga falta, que Salvador Illa, l¨ªder del PSC literalmente ¡°haga un Valls¡±, en alusi¨®n a que si Ada Colau es hoy alcaldesa de Barcelona, lo es gracias que ¡°Valls hizo un Valls¡±, le dio sus votos en el Consistorio por una necesidad objetiva. A veces en pol¨ªtica no s¨®lo hay que optar por el llamado ¡°mal menor¡±, muchas veces hay que tomar decisiones que nunca son ¡°ideales¡± , pero si quieres dejar una estela de liderazgo, hay que actuar en funci¨®n de una racionalidad superior. En este caso ser¨ªa doble: acabar con el fraude moral de Waterloo, y restituir su dignidad a las instituciones salidas de la legitimidad ¨²nica que dan las urnas.

Junts tiene el inter¨¦s en prolongar el asunto, hasta que no quede m¨¢s remedio que convocar nuevas elecciones

Junts tiene el inter¨¦s en prolongar el asunto, hasta que no quede m¨¢s remedio que convocar nuevas elecciones

Para volver al libro de Marius Carol, no se pierdan las p¨¢ginas donde se narra la heroica fuga de la banda de Waterloo, con cambios de coches, abandono de m¨®viles y otras triqui?uelas. No hay spoiler, unos huyen, otros se quedan y van a la c¨¢rcel. Los que huyen, tienen la arrogante pretensi¨®n de seguir detentando el poder y la legitimidad del proc¨¦s. Al menos en Waterloo, en 1814, Napoleon se enter¨® de inmediato que el ganador hab¨ªa sido Wellington, y en la Isla de Santa Elena no hab¨ªa la red social Twitter.

Mientras, la meridiana sigue padeciendo regularmente ¡ªdesde hace m¨¢s de un a?o y medio¡ª la estafa de una manifestaci¨®n que causa perjuicios a terceros sin que ninguna autoridad policial puede acabar con ella, y sin que ninguna de esta pandilla de dirigentes independentistas tenga la bondad de ofrecer las esquinas donde viven para que de forma rotatoria esta manifestaci¨®n vaya cambiando de lugar, de calle y de ciudad.

Hoy, 5 de mayo, se cumplen doscientos da?os de la muerte de Napole¨®n.