17.500 ancianos esperan plaza de residencia en Catalu?a pese a haber 15.200 vacantes

Las residencias sufren el vac¨ªo dejado por la pandemia. El descenso de los nuevos ingresos por miedo al virus y la alta mortalidad en estos centros a causa de la covid 19, que ya ha causado el deceso de 8.803 ancianos desde que estall¨® la crisis, seg¨²n datos de Salud, han dejado muchas plazas sin ocupar pese a haber 17.500 personas en lista de espera. Los centros alertan del impacto econ¨®mico que supone y del riesgo de que muchos dejen de ser viables. Una de las patronales del sector, ACRA, reclam¨® ayer al Govern ¡°m¨¢s agilidad¡± para asignar las 15.200 plazas vac¨ªas que hay en total y que podr¨ªan cubrir el 85% de la lista de espera.

La situaci¨®n epidemiol¨®gica en las residencias de personas mayores est¨¢ ya muy lejos del drama que vivi¨® el sector en los primeros meses de la pandemia. Con la poblaci¨®n residente ya vacunada, la incidencia del virus en estos centros ha bajado en picado. Actualmente, en las residencias catalanas hay solo 66 personas con covid 19 y la incidencia acumulada en los ¨²ltimos 14 d¨ªas es de 150 casos por cada 100.000 habitantes (entre la poblaci¨®n catalana en general es de 269). Esta semana, solo ha habido un fallecido por coronavirus en los geri¨¢tricos, y 21 ingresados. Estas cifras contrastan con los m¨¢s de 1.300 muertos por semana que se registraban hace un a?o, o con los m¨¢s de 150 fallecidos a la semana que hab¨ªa en enero, justo cuando empez¨® la campa?a de vacunaci¨®n precisamente en estos centros.

El descenso de los contagios ha propiciado un relajamiento en las fuertes medidas con las que los geri¨¢tricos han tratado de frenar la entrada del virus en un entorno especialmente vulnerable. En marzo, el Departamento de Salud aprob¨® un protocolo con el que se flexibilizaron las visitas de familiares y las salidas fuera de los centros, devolviendo una cierta normalidad a una comunidad, la de los residentes, que ha sufrido el confinamiento m¨¢s duro durante muchos meses. En este contexto, ya no es necesario tener tantas plazas vac¨ªas en los centros como reserva para aislar y sectorizar en el caso de que entre el virus, algo que hab¨ªa dejado a las residencias sin capacidad para sacar rendimiento de todas las plazas que ten¨ªan en oferta.

Hace unos d¨ªas, el Govern liber¨® 1.750 plazas de las 3.000 que estaban reservadas, y que ahora se destinar¨¢n a nuevos ingresos. El Departamento de Asuntos Sociales destaca que ha financiado en todo momento el parque de plazas que se han mantenido vac¨ªas con esta finalidad, y recuerda a la patronal que no puede financiar la totalidad de plazas que han quedado vac¨ªas por la pandemia.

Con el protocolo, tampoco los nuevos ingresos son un problema: hasta que se aprob¨® la nueva normativa, las personas que entraban en una residencia por primera vez ten¨ªan que presentar una prueba PCR negativa y guardar un aislamiento de 14 d¨ªas. Esta obligaci¨®n desincentivaba a las familias a llevar a sus abuelos a los centros, por temor a que un confinamiento de dos semanas acelerase el deterioro f¨ªsico y mental de los usuarios. Este requisito ya no es necesario, y los nuevos usuarios pueden entrar directamente en el centro.

Pese a la mejora general de la situaci¨®n, las residencias siguen sufriendo las consecuencias de tener plazas vac¨ªas. La patronal m¨¢s grande del sector, ACRA, alert¨® ayer del impacto que conlleva tener una parte importante de las plazas sin ocupar. En Catalu?a hay 64.000 plazas en residencias (la mitad de las cuales reciben financiaci¨®n p¨²blica) y 18.858 en centros de d¨ªa. ACRA destaca que 11.373 plazas en residencias est¨¢n vac¨ªas, y 3.827 lo est¨¢n en los centros de d¨ªa. En total, 15.200 plazas sin ocupar, entre privadas y concertadas. De estas, solo 1.753 son camas reservadas para covid y el resto son plazas que no est¨¢n ocupadas y que, tras la campa?a de vacunaci¨®n y el fin de las restricciones en los nuevos ingresos, podr¨ªan estarlo.

¡±Hace falta m¨¢s agilidad, ser m¨¢s flexibles¡±, destaca Cinta Pascual, presidenta de la patronal. La raz¨®n es doble: primero, la de dar respuesta a las familias que necesitan este recurso, ya que hay 17.500 personas en lista de espera, y la media de tiempo para acceder a una plaza es de 436 d¨ªas. Los centros acusan al Govern de hacer una gesti¨®n lenta, y el departamento remarca que desde junio de 2020 se han hecho 13.040 ingresos (4.884 desde enero) y que si las plazas siguen vac¨ªas tambi¨¦n es por la reticencia de las familias: del total de personas en lista de espera, un 40% ha renunciado una o m¨¢s veces a diferentes propuestas de plazas.

La segunda raz¨®n por la que piden asignar nuevos usuarios es la econ¨®mica: seg¨²n los c¨¢lculos de la patronal, por cada plaza vac¨ªa se dejan de ingresar,como m¨ªnimo, 1.944 euros al mes. Solo con las plazas vacantes en centros de d¨ªa (que tienen un precio de 697 euros) se dejan de ingresar 2,6 millones al mes. ¡°La desocupaci¨®n en las residencias es del 20%, una situaci¨®n que dificulta la sostenibilidad de unas empresas y entidades consideradas, sobre el papel, como esenciales¡±, destaca la patronal a trav¨¦s de un comunicado.