El pueblo ahogado en deudas respira 10 a?os despu¨¦s

Un aparcamiento subterr¨¢neo que nunca lleg¨® a abrir y un bloque de pisos sociales que qued¨® en una quimera son la punta del iceberg de la ruina econ¨®mica que durante la ¨²ltima d¨¦cada ha acechado al Ayuntamiento de Moi¨¤, y por extensi¨®n a sus 6.383 habitantes. Este municipio barcelon¨¦s, que tras la crisis de 2008, se situ¨® en el grupo de los m¨¢s endeudados de Espa?a, vuelve a respirar.

Bajo el mandato del anterior alcalde no solo se hicieron obras ruinosas y de escasa utilidad, sino que se pagaban sin control facturas de m¨®viles, caf¨¦s y cenas en una espiral de gasto que elev¨® la deuda hasta el 395% del PIB municipal. Actualmente, el nivel de endeudamiento es del 15%. Este peque?o milagro econ¨®mico no ha estado exento de pol¨¦micas y ha dejado cicatrices: se ha despedido al 40% de la plantilla municipal, se cerr¨® la escuela de m¨²sica y, en general, se ha dado la vuelta a todo lo que supon¨ªa un gasto para una tesorer¨ªa que lleg¨® a pagar hasta 3.000 euros anuales en caf¨¦s.

El pleno del Ayuntamiento aprob¨® el mi¨¦rcoles liquidar el cr¨¦dito de ocho millones que ten¨ªa Moi¨¤ con Hacienda y con este paso se convierte en uno de los pueblos menos endeudados. Dion¨ªs Guiteras es el art¨ªfice de la haza?a. Gan¨®, con una candidatura de ERC, las elecciones en 2011 sustituyendo al hist¨®rico convergente Josep Montr¨¤s, que hab¨ªa gobernado desde 1983. El nuevo edil se encontr¨® con una Administraci¨®n en bancarrota. ¡°No s¨¦ si ¨¦ramos el municipio m¨¢s endeudado del Estado, pero seguro que est¨¢bamos en la zona Champions...¡±, ironizaba el jueves el edil. El presupuesto anual del municipio rondaba los siete millones de euros y la deuda superaba los 25,5 millones (3.995 euros por habitante).

¡°En la caja solo hab¨ªa telara?as. La gesti¨®n anterior a la nuestra se bas¨® claramente en el despilfarro¡±, lamenta Guiteras. El equipo de gobierno de Montr¨¤s compr¨® el antiguo cuartel de la Guardia Civil. La intenci¨®n era hacer pisos sociales. No se hizo ninguno. En la plaza del ambulatorio se construy¨® un aparcamiento que hoy sigue cerrado. ¡°Cuando llegu¨¦, abrir el Ayuntamiento costaba 3.000 euros diarios¡±, lamenta el alcalde. Ganar las elecciones fue un caramelo envenenado. ¡°Tuvimos que cambiar todo el Consistorio. Racionalizar las l¨ªneas de tel¨¦fono, los coches, el modelo de biblioteca. Cuando llegu¨¦, en cada mesa hab¨ªa una impresora en lugar de una por planta¡±, recuerda el edil. Aunque esos cambios no fueron los m¨¢s duros. ¡°Tuve que echar a 40 empleados municipales. He despedido a amigos y vecinos, lamentablemente a aquellos que ten¨ªan la relaci¨®n contractual m¨¢s d¨¦bil¡±, confiesa. Cuando gan¨® las elecciones en el municipio hab¨ªa 15 polic¨ªas locales. Hoy solo quedan cinco.

Los excesos de Montr¨¤s no eran un secreto. Aquel 2011 se cre¨® la Asociaci¨®n Vecinal de Afectados por la Deuda de Moi¨¤. Uno de sus activistas, D¨ªdac Rimoldi, resume c¨®mo era el proceder de aquellos a?os: ¡°Montr¨¤s era un alcalde permisivo con una mala gesti¨®n integral. Pod¨ªas verle en la fiesta con puro y copa y con decenas de personas cenando a cargo del Ayuntamiento. En el pueblo no se hac¨ªa nada. No tenemos equipamientos, no hay una piscina cubierta... pero, a la vez, los vecinos hac¨ªan obras sin permiso municipal¡±.

Actualmente, la deuda es de 700.000 euros (110 euros por vecino). Guiteras lamenta haberse convertido en un mero ¡°gestor¡±, y ser¨¢ a partir de ahora cuando se convierta en un ¡°alcalde¡± con proyecto pol¨ªtico. ¡°No s¨¦ si es el momento de bajar el IBI¡±, sostiene.