¡®Proc¨¦s¡¯: la pieza que falta
Lo que tienen que explicar a sus bases y a toda la ciudadan¨ªa es exactamente esto: por qu¨¦ afirmaban cosas que sab¨ªan que no eran ciertas, y por tanto, eran falsas
En realidad, ser¨ªa tema de una investigaci¨®n sociol¨®gica buscar la pieza que falta en la reconstrucci¨®n de lo que ha sido el proc¨¦s. Y por supuesto alguna de sus derivadas m¨¢s expansivas. Visto desde fuera, lo que ha pasado desde 2012 da para mucho, pero falta m¨¦todo, sobre todo dentro de las filas del independentismo.
Desde fuera, hay que volver a subrayar el valor de los primeros trabajos de an¨¢lisis, por ejemplo los libros can¨®nicos de Lola Garc¨ªa y Jordi Amat, a quienes muchos de nosotros pedimos que escriban (en formato libro) la secuela del asunto. Aqu¨ª queda la solicitud.
Pero lo que falta de verdad, la pieza maestra pendiente, es el an¨¢lisis desde dentro del movimiento. No el en¨¦simo art¨ªculo de autojustificaci¨®n, o la mil¨¦sima declaraci¨®n exculpatoria, o la persistencia en el relato de ¡°no ha salido como quer¨ªamos, pero lo hemos hecho todo bien¡±, o su variante ¡°no hemos hecho nada mal, y no hemos hecho nada malo¡±. Sociol¨®gicamente, lo que se aprecia en las filas del independentismo es una creciente ¡°fatiga de combate¡± o su denominaci¨®n t¨¦cnica m¨¢s actual, ¡°Estr¨¦s postraum¨¢tico¡±. Es cierto, en privado algunos de los implicados admiten cosas como ¡°es que no ten¨ªamos nada de nada¡±, pero no lo hacen en voz alta y sobre todo no lo explican a su gente.
Lo que ha pasado desde 2012 da para mucho, pero falta m¨¦todo, sobre todo dentro de las filas del independentismo
Con lo cual se quedan en un territorio deliberadamente falso que viene a decir ¡°mirad que monstruoso y artero es nuestro enemigo, que no hemos podido con ¨¦l a pesar de tener raz¨®n¡±, o bien, ¡°no pod¨ªamos prever que el Estado ser¨ªa capaz de hacer lo que ha hecho¡±.
Y la verdad es lo que tienen que explicar: de ¡°el mundo nos mira¡± a ¡°nadie ha venido en nuestro auxilio¡±. Nadie. Lo que tienen que explicar a sus bases y a toda la ciudadan¨ªa es exactamente esto: por qu¨¦ afirmaban cosas que sab¨ªan que no eran ciertas, y por tanto, eran falsas. Recuerdo a un juez que se ve¨ªa ministro de justicia de la Catalu?a independiente afirmar en un mitin que ocho pa¨ªses de la Uni¨®n Europea hab¨ªan garantizado el reconocimiento de la independencia, que la OTAN encargar¨ªa a Catalu?a la fabricaci¨®n de un helic¨®ptero de combate (sic), que Israel garantizaba un ¡°cr¨¦dito puente¡± de muchos millones para los primeros gastos. ?Por qu¨¦ dec¨ªan estas cosas? Hab¨ªa uno que estaba muy arriba en el movimiento, que uno de los d¨ªas m¨¢s dram¨¢ticos anunciaba a Calles Puigdemont que ten¨ªa un enviado del Kremlin a las puertas de Palau.
Falta una reflexi¨®n desde dentro, de modo l¨²cido. Es una deuda con la cantidad de gente que les ha seguido
Y lo m¨¢s bestia, perdonen la expresi¨®n, es que eminentes juristas de prestigio afirmaban que con las ¡°leyes de desconexi¨®n¡± (las del 6 y el 7 de septiembre del a?o 2017) se pasar¨ªa de la llei a la llei, es decir que una vez proclamadas (por el Parlament de Catalunya) entraban en vigor y el resto de la legislaci¨®n (del Estatut hasta la Constituci¨®n) dejaba de tener vigencia. ?En serio? Alguno de los te¨®ricos de este invento han desaparecido de la escena y, sorpresa, no est¨¢n ni imputados ni procesados ni exiliados. En cambio, conviene recordar aqu¨ª la integridad de juristas como Bayona, o el propio secretario del Parlament, que contra viento y marea fueron advirtiendo d¨ªa a d¨ªa c¨®mo acabar¨ªa el asunto.
A falta de un an¨¢lisis autocr¨ªtico, los l¨ªderes del proc¨¦s siguen faltando a la verdad, y para ello se dedican a ir ¡°modificando el santoral¡±, es decir, el eslogan-marco. De ¡°La partida a Itaca¡± de las elecciones de 2012 hasta la ¡°amnist¨ªa para los 3.000 represaliados¡±, todo ha valido. El periodista Cristian Segura, desde estas mismas p¨¢ginas, demostr¨® hace pocos d¨ªas el mito de cifras como estas. Ya en su d¨ªa, Sandrine Morel, entonces corresponsal Le Monde, public¨® El hurac¨¢n catal¨¢n, un libro en el que demostr¨® que el 1 de octubre famoso no hubo mil heridos. Hubo, ese d¨ªa, una acci¨®n brutal de polic¨ªa y guardia civil, con bastantes contusionados, pero en urgencias solo ingresaron a unos pocos. Y los mil, ?d¨®nde estaban? Esta excelente periodista (su trabajo sobre el tema es muy notable) se dedic¨® a investigar y esa cifra es la de todas las personas que ese d¨ªa pasaron por urgencias en todos los hospitales de Catalu?a por el motivo que fuese.
En suma, la pieza que falta es la reflexi¨®n desde dentro, de modo l¨²cido, pues es una deuda con la inmensa cantidad de gente que les ha seguido durante los ¨²ltimos a?os.
En lugar de esto, tendremos un debate sobre la absurda candidatura de Juegos de Invierno Barcelona- Pirineos.
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