La Barcelona ¡®drag queen¡¯ remonta el vuelo
Encasillada en el ocio nocturno, la escena transformista intenta sortear las restricciones y volver a la vanguardia
La ¨¦poca dorada del transformismo barcelon¨¦s del Paralelo hace bastante tiempo que acab¨®. Las artistas locales se toparon de repente con un mundo nuevo, m¨¢s complejo, que las entend¨ªa menos y donde los espect¨¢culos en directo parec¨ªan tener menos cabida en la noche. El cierre de salas encontr¨® un peque?o halo de luz con el ¨¦xito de RuPaul¡¯s Drag Race, el reality show estadounidense que desde hace 12 a?os arrasa entre la comunidad LGTBIQ+ joven y que acaba de finalizar su primera edici¨®n espa?ola. Esta atm¨®sfera daba esperanzas de que una nueva generaci¨®n cogiera las riendas de la ciudad. Pero, como para todo el mundo, el coronavirus lleg¨® por sorpresa. La escena drag de la capital catalana, encasillada en el sector del ocio nocturno, intenta sortear las restricciones y volver a la vanguardia con un futuro menos precario y rompiendo los l¨ªmites del g¨¦nero.
La primera manifestaci¨®n por los derechos del colectivo LGTBIQ+ de Espa?a ocurri¨® en Barcelona. Era finales de junio de 1977 y un grupo encabezado por mujeres trans y travestis de la ciudad enfil¨® Las Ramblas y acab¨® a palos con la polic¨ªa franquista en Canaletes hasta la dispersi¨®n. Ese hecho ha sido la cara visible de otra realidad que se viv¨ªa en decenas de locales nocturnos de la ciudad, donde se hac¨ªa pol¨ªtica de otra forma con el cabaret, la revista y el transformismo m¨¢s vanguardista de Espa?a. En la Barcelona canalla era frecuente ver desnudos integrales y cuerpos desafiando normas de todo tipo. Lo que queda hoy de todo eso es poco en n¨²mero, pero algo m¨¢s en esp¨ªritu, seg¨²n la mayor¨ªa de protagonistas consultadas para este reportaje.
As¨ª lo cree por ejemplo Jono Kitchens, drag londinense afincada en la ciudad antes de actuar en el bar La Federica, en Poble-Sec, con peluca rubia, barba morena y entre poca y casi ninguna ropa. ¡°La capacidad de imaginaci¨®n y la variedad tienen que volver a ser se?a de identidad de Barcelona¡±, explica junto a su pareja art¨ªstica y sentimental Joan Castillo, disc jockey, con quien conforman el conjunto Pluma. La pareja lleva cinco a?os intentando hacer un drag que muestre cuerpos diversos ¡ªincluyendo drag king, hecho por mujeres¡ª con su espect¨¢culo que salta de local en local y se adapta al entorno. Reivindican el ingenio para sortear las m¨²ltiples crisis del sector, muy tocado por las restricciones en Catalu?a.
Ese modelo itinerante del que habla Pluma se ha experimentado cuatro veces en Barcelona en el ¨²ltimo a?o bajo el nombre de Ravalada. La din¨¢mica consiste en que varios grupos peque?os de p¨²blico ¡ªmodificable seg¨²n las normas del momento¡ª van cambiando de bar (en este caso, del Raval y del Gaixample), viendo un espect¨¢culo en cada uno, sin cruzarse. El p¨²blico puede votar por su actuaci¨®n favorita y la organizaci¨®n desvela por redes, una vez pasada la jornada, qui¨¦n ha sido la drag queen m¨¢s votada. La ¨²ltima edici¨®n, celebrada a mediados de julio, la gan¨® precisamente Jono Kitchens.
Eran frecuentes los desnudos integrales y el desaf¨ªo de todo tipo de normas
La iniciativa de la Ravalada, que prepara nuevas fechas en septiembre en Barcelona y que se exporta a otras ciudades, surgi¨® del concepto support your local drags (apoya a tus drags locales, en ingl¨¦s). ¡°La idea es que la gente descubra a artistas que no ha visto antes. Que no vengan por una en concreto, sino por el factor sorpresa¡±, explican Olivier Grau y Jakob Traxler, promotores habituales de la noche gay y de la Ravalada, que aseguran que la recaudaci¨®n de la entrada va a las artistas y los bares ganan con las consumiciones.
El drag tiene entre sus pilares las ideas de house (casa, en ingl¨¦s) y mother (madre), es decir, que las veteranas acogen a las nuevas con un sentimiento de hermandad. Pero si no hay locales para actuar, no hay espacios de encuentro. Y este relevo es lo que est¨¢ en peligro con el cierre de salas de los ¨²ltimos a?os, cuenta Rub¨¦n Cardozo, m¨ªtico transformista de El Cangrejo del Raval. El argentino, que se niega a revelar cu¨¢ntos a?os lleva actuando en Barcelona, es claro: ¡°Me da mucha pena porque veo que las j¨®venes tienen mucha teor¨ªa, pero faltan sitios, y las tablas te las da la pr¨¢ctica, no vale con el tutorial de maquillaje¡±.
El tipo de espect¨¢culo del Cangrejo es de los pocos que conserva la esencia cabaretera del Paralelo, a base de mon¨®logos mordaces y playbacks de ¨¦xitos de ayer y de hoy, con el recuerdo de Carmen de Mairena como una de sus artistas ic¨®nicas. Eugenio Berg¨¨s, propietario del bar, garantiza la continuidad ¡°cuando todo pase¡± (ahora est¨¢ cerrado), porque el local es suyo y asegura que en cuanto pueda, volver¨¢ a haber espect¨¢culos. Mientras tanto, las trabajadoras sobreviven en ERTE, con mucha suerte, o sortean el presente con otros empleos.
El relevo generacional est¨¢ en peligro con el cierre de salas
Ni siquiera el auge de los ¨²ltimos a?os ha mejorado la situaci¨®n de las personas que se dedican al drag, explica Norma Mor (o Muerte a la norma), artista no binaria llegada desde Chile hace un par de a?os y que juega con la performance y la reivindicaci¨®n del anticolonialismo en su estilo. Defiende que el drag queen debe dejar de limitarse exclusivamente a los bares y conquistar otras esferas de la investigaci¨®n sobre el g¨¦nero y las artes esc¨¦nicas. A pesar de ser ¡®nueva¡¯, se siente muy heredera de la escena underground y genuina que tiene que ver con la calle y personajes como Oca?a y M¨®nica del Raval.
Dos 'mundos' en uno
El panorama actual se mueve en la pulsi¨®n entre la puesta en valor de ese pasado transformista (m¨¢s de teatro y m¨¢s pol¨ªtico) y el nuevo 'drag' de estilo americano como el que representa Sagittaria, que con solo 22 a?os se ha quedado a las puertas de ganar la primera edici¨®n de Rupaul¡¯s Drag Race Espa?a, el programa emitido por la plataforma Atresplayer hace apenas un mes. La artista empez¨® porque era fan del formato. Aprendi¨® a maquillarse y gan¨® seguidores, hasta que comenzaron a llamarla de discotecas gays de la ciudad y consigui¨® pasar el casting y quedar finalista en el concurso. ¡°Mi estilo es muy de pasarela, muy pulido, pero tambi¨¦n me gustar¨ªa explorar un poco otras cosas¡±, explica. Est¨¢ claro que el tir¨®n de RuPaul empuja a un inter¨¦s mayor por este tipo de arte, como explica el hecho de que, por primera vez, el Primavera Sound dedique un escenario a 'drags queens' el pr¨®ximo 27 de agosto en el F¨°rum. Lo que pide Rub¨¦n Ant¨®n, investigador de la herencia cultural de la ciudad y autor de la exposici¨®n ¡®Neotravestismo¡¯ que se puede ver en la galer¨ªa L¡¯Art i Caf¨¦ de Sitges, es que no se olvide el pasado ¡®canalla¡¯, sobre todo en el actual contexto de aumento de agresiones contra el colectivo LGTBI en las calles: ¡°Vender un drag queen amable y muy lavado no puede ser con las barbaridades que estamos viendo. Las artistas actuales no pueden quedarse solo con el brilli brilli¡±.
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