Catalu?a no renovar¨¢ los conciertos educativos a las escuelas que segregan por sexo

Catalu?a ha puesto fecha a una de las medidas educativas que ronda al Govern `desde que ERC volvi¨® a asumir la cartera de Educaci¨®n en 2016: terminar con los conciertos educativos a las escuelas que segregan por sexo. El Ejecutivo catal¨¢n ha anunciado este martes que el pr¨®ximo curso no renovar¨¢ el concierto de la educaci¨®n secundaria obligatoria (ESO) y bachillerato a 11 centros educativos. La medida afectar¨¢ a 3.850 alumnos de secundaria (139 grupos) y 251 de bachillerato (cuatro clases), que dejar¨¢n de tener financiada la llamada educaci¨®n diferenciada. El Govern no podr¨¢ tocar, por ahora, el concierto de educaci¨®n primaria con estos centros, ya que el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a oblig¨® a mantenerles la financiaci¨®n p¨²blica. Por lo que respecta al nivel infantil, no hay actualmente ning¨²n grupo en estos colegios que segregue por sexo. El impacto econ¨®mico de la extinci¨®n de los conciertos en secundaria y bachillerato asciende a 15 millones de euros.

El Departamento de Educaci¨®n ya intent¨® hace un a?o aplicar una medida similar a los colegios de primaria que aplicaban esa segregaci¨®n, pero el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a dict¨® unas medidas cautelares y les oblig¨® a renovar el concierto hasta 2026. El consejero de Educaci¨®n, Josep Gonz¨¢lez-Cambray, ha sostenido este martes que ese tipo de subvenciones son una ¡°anomal¨ªa¡± y se ha mostrado convencido de que en esta ocasi¨®n est¨¢n m¨¢s ¡°armados¡± jur¨ªdicamente que hace un a?o. De hecho, la nueva ley educativa estatal aprobada el pasado diciembre, la Lomloe, proh¨ªbe expresamente los conciertos a colegios segregados. La norma dice que, para favorecer la igualdad de derechos y oportunidades entre hombres y mujeres, los centros sostenidos parcial o totalmente con fondos p¨²blicos ¡°desarrollar¨¢n¡± el principio de coeducaci¨®n y no separar¨¢n al alumnado por su g¨¦nero.

As¨ª, si bien la antigua ley educativa del PP (Lomce) inclu¨ªa una cl¨¢usula para blindar los conciertos ¡ªno consideraba discriminaci¨®n esta segregaci¨®n por sexos¡ª, la derogaci¨®n de esta norma y la entrada en vigor de la Lomloe allanan ahora el camino al Govern. Gonz¨¢lez-Cambray ha se?alado, adem¨¢s, que la medida tambi¨¦n cuenta con un fuerte respaldo social y ha recordado que hace una semana el Parlament aprob¨® una moci¨®n del PSC-Units per Avan?ar con el apoyo de la mayor¨ªa de grupos de la c¨¢mara ¡ªindependentistas, socialistas y comunes¡ª, salvo Vox, Ciudadanos y PP. Adem¨¢s, ha incidido el titular de Educaci¨®n, un informe del Centro de Estudios de Opini¨®n, el CIS catal¨¢n, arroj¨® en 2018 que el 85% de los catalanes rechazaba los conciertos que segregan por sexo.

Los conciertos que terminan vigencia el pr¨®ximo a?o son los que afectan a educaci¨®n secundaria y bachillerato. No hay ning¨²n centro infantil con educaci¨®n segregada y los de primaria est¨¢n bajo la medida cautelar. Los centros afectados por la decisi¨®n del Govern son Canig¨® (Barcelona), Pinela y Xaloc (L`Hospitalet), Bell-lloc del Pla y Les Alzines (Girona), Instituci¨® Lleida, la Escola Campjoliu (L¡¯Arbo?), Instituci¨® Tarragona (Constant¨ª), La Vall (Sabadell) y La Farga y Viar¨® (Sant Cugat). Un portavoz de Educaci¨®n se?ala que, en el caso de educaci¨®n infantil, s¨ª se renovar¨¢ el concierto con estos colegios porque ya todos tienen clases mixtas en este nivel escolar.

A diferencia de Navarra, que lleg¨® a una soluci¨®n salom¨®nica y permitir¨¢ que los estudiantes que ya hab¨ªan empezado la etapa educativa con la llamada educaci¨®n diferenciada puedan mantenerla hasta que acaben la etapa, Catalu?a rescindir¨¢ completamente cualquier tipo de financiaci¨®n en estos centros en la etapa de secundaria y bachillerato. Los centros afectados han preferido no hacer declaraciones hasta estudiar el tema con sus servicios jur¨ªdicos.

El fin de los conciertos a las escuelas que segregan por sexo fue una de las medidas estrella que anunci¨® hace dos legislaturas el entonces consejero de Educaci¨®n, Josep Bargall¨®. Despu¨¦s de varios a?os en manos de CiU, la cartera educativa volv¨ªa a manos de ERC y los republicanos imprimieron su sello, m¨¢s progresista, en las pol¨ªticas educativas. En Catalu?a hab¨ªa unas 11 escuelas que segregaban por sexo, todas vinculadas al Opus Dei, y el Departamento de Educaci¨®n justificaba su decisi¨®n de romper con estos centros apelando a la Ley de Educaci¨®n de Catalu?a (LEC), que recoge el principio de ¡°coeducaci¨®n mediante escolarizaci¨®n mixta¡±.

Sin embargo, con el proc¨¦s de por medio y la aplicaci¨®n del art¨ªculo 155 de la Constituci¨®n, la medida se fue postergando. Incluso el propio Bargall¨® tuvo que validar la renovaci¨®n que seGovern firm¨® durante la etapa del 155 para los conciertos de educaci¨®n secundaria e infantil por otros cuatro a?os en 2017. Los conciertos que afectaban a la educaci¨®n primaria segu¨ªan vigentes hasta 2020.

El curso pasado, sin embargo, Educaci¨®n volvi¨® a retomar el tema y anunci¨® que suspend¨ªa los conciertos para primaria, que expiraban entonces. Pero el Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a decidi¨®, como medida cautelar y atendiendo a la petici¨®n de los colegios afectados, que el ten¨ªa que renovar la financiaci¨®n durante seis a?os para preservar el inter¨¦s de las familias y la viabilidad econ¨®mica de los centros. Ahora, el Ejecutivo catal¨¢n vuelve a poner el foco en aquellos conciertos que se firmaron durante el 155 en 2017 y Bargall¨® tuvo que validar en 2018, y que aseguraban que la educaci¨®n diferenciada continuar¨ªa hasta, al menos, 2022.

¡°Escuelas de ¨¦lite¡±

La lucha contra la segregaci¨®n escolar es el gran caballo de batalla de la escuela catalana. De hecho, Catalu?a fue la primera autonom¨ªa que aprob¨®, en 2019, un pacto institucional contra la segregaci¨®n, pero hasta este curso, no hab¨ªa desplegado medidas para combatir la separaci¨®n del alumnado en diferentes centros educativos seg¨²n su perfil socioecon¨®mico. Para Francina Mart¨ª, presidenta de la Asociaci¨®n de Maestros Rosa Sensat, las escuelas que segregan por sexo en Catalu?a son, precisamente, ¡°centros de ¨¦lite, que seleccionan al alumnado y est¨¢n infringiendo la ley¡±: ¡°Ya era hora [de acabar con los conciertos] porque es una incongruencia. Estamos educando para hacer una sociedad lo m¨¢s integradora posible. No tendr¨ªamos ni que estar discutiendo esto. Lo m¨¢s alarmente es la segregaci¨®n por clase social¡±, lamenta.

Tambi¨¦n Ismael Palac¨ªn, director de la Fundaci¨®n Bofill, un centro de investigaci¨®n sobre educaci¨®n, defiende la necesidad de poner fin a la segregaci¨®n por sexo: ¡°La evidencia cient¨ªfica desmiente cualquiera de los argumentos habituales de los centros que separan por sexos, como que por separado rinden mejor, o que las ni?as con ni?as se empoderan. Te pueden mostrar estudios sueltos que dicen lo que sea, pero la revisi¨®n cient¨ªfica concluye que el modelo no aporta ninguna ventaja acad¨¦mica ni educativa a chicos o chicas¡±, zanja. El experto defiende que la separaci¨®n priva a los chavales de ¡°la oportunidad de coeducarse en un marco igualitario y prepararse para unas relaciones sociales, de amistad, de pareja o profesionales mixtas¡±.

En el campo pol¨ªtico, la diputada Eul¨¤lia Reguant, de la CUP, ha calificado en la red la medida de ¡°buena noticia¡±, pero ha recordado que en 2018 Bargall¨® anunci¨® la decisi¨®n en alusi¨®n a que no surti¨® efecto. La decisi¨®n del Govern ha sido censurada, en cambio, por Xavier G¨¹ell, secretario general de Units, la formaci¨®n democristiana que conforma una coalici¨®n con el PSC desde hace dos mandatos. ¡°Es un ataque directo del Govern al derecho de las familias a escoger el centro educativo y a su leg¨ªtima concertaci¨®n. Hoy y siempre defenderemos este derecho fundamental¡±, ha se?alado. Josep Manuel Prats, portavoz de la patronal de la red concertada FAPEL (Federaci¨®n de Asociaci¨®n de Padres y Madres de Escuelas Libres), ha retuiteado el mensaje. Ramon Espadaler, secretario general de Units y diputado del grupo PSC-Units, afirm¨® la semana pasada que hab¨ªa votado de forma diferente a sus compa?eros al entender que deben ser las familias y no la Administraci¨®n quienes deben decidir la educaci¨®n que quieren para sus hijos.