Jordi Puigner¨®, el vicepresidente ausente
Los proyectos del n¨²mero 2 del Govern, que ejerci¨® la semana pasada de ¡®president¡¯ en funciones, quedan desbaratadas por la pugna entre Esquerra y Junts
Jordi Puigner¨® ha ejercido esta semana pasada funciones de president de la Generalitat, un cargo que asumi¨® en calidad de suplente, al estar Pere Aragon¨¨s de vacaciones en el extranjero. Perjudicado por las ...
Jordi Puigner¨® ha ejercido esta semana pasada funciones de president de la Generalitat, un cargo que asumi¨® en calidad de suplente, al estar Pere Aragon¨¨s de vacaciones en el extranjero. Perjudicado por las tensiones que mantienen Esquerra y Junts per Catalunya en materia de infraestructuras y penalizado por su rol secundario en su propio partido, Puigner¨® no se despega de una etiqueta que lo encasilla como un vicepresidente con escasa presencia. Iniciativas que ven¨ªan avaladas con su nombre y apellido han merecido desmentidos del propio Govern, y han dejado en entredicho su jerarqu¨ªa en el Ejecutivo.
La ampliaci¨®n del aeropuerto de Barcelona-El Prat o las obras del Cuarto Cintur¨®n eran grandes apuestas que llevaban su impulso, hasta que Aragon¨¨s y Esquerra activaron el freno de mano. Tampoco ha convertido en realidad los recurrentes anuncios acerca de una supuesta estrategia para arrebatarle a la ministra de Transportes, Raquel S¨¢nchez, los mandos de los trenes de Rodalies, y se ha visto salpicado por el desbarajuste cr¨®nico en la autopista AP-7, desde que se levantaron los peajes. Su cartera engloba las competencias de Territorio y Pol¨ªticas Digitales, pero al no poder atribuirse m¨¦ritos en infraestructuras ni inaugurar grandes obras de hormig¨®n, se refugia en los asuntos tecnol¨®gicos para reivindicarse. ¡°Catalu?a es un referente tecnol¨®gico mundial¡±, repite. Este s¨¢bado visit¨® las obras del despliegue de fibra ¨®ptica en la Vall de Card¨®s (Lleida) donde donde afirm¨® que esa inversi¨®n sirve para que las empresas hagan actividades tecnol¨®gicas m¨¢s all¨¢ del ¡°rafting y la nieve¡± adem¨¢s de acusar a los ministros del PSC (Raquel S¨¢nchez y Miquel Iceta) de tener abandonado al Pirineo.
Aragon¨¨s le reconoce su implicaci¨®n en AINA, un proyecto digital basado en la tecnolog¨ªa de datos y la Inteligencia Artificial para que las m¨¢quinas y los ordenadores puedan operar en catal¨¢n. ¡°Es un proyecto trascendental y transformador¡±, valor¨® el president en su ¨²ltimo discurso antes del descanso veraniego. Menos felicitaciones le ha reportado ¨²ltimamente a Puigner¨® su plan para lanzar nanosat¨¦lites catalanes al espacio. La puesta en ¨®rbita de una segunda unidad de estas piezas espaciales estaba programada para este a?o, pero el despegue estaba contratado en Kazajist¨¢n y la invasi¨®n rusa de Ucrania oblig¨® a alterar la agenda.
Pese a su dominio de las nuevas tecnolog¨ªas, es ingeniero inform¨¢tico, Puigner¨® no ejerce de influencer dentro del Ejecutivo. Anta?o, figuras como Oriol Junqueras, Josep-Llu¨ªs Carod-Rovira, Joana Ortega o el propio Aragon¨¨s se reivindicaron como actores con peso en la hoja de ruta del Govern, mientras que Neus Munt¨¦ pudo reforzar su papel combinando la vicepresidencia con las tareas de portavoz. La huella de Puigner¨® en la Generalitat, en cambio, se ha ido difuminando, al tiempo que tambi¨¦n le tiembla la silla dentro de su partido, Junts per Catalunya, pese a ser un allegado del fundador, Carles Puigdemont. El liderazgo de Laura Borr¨¤s en la formaci¨®n apenas admite el contrapeso de Jordi Turull.
Puigner¨®, que en su d¨ªa descart¨® competir en unas primarias con Borr¨¤s, vio como a la hora de confeccionar el orden de la lista para las elecciones del 14-F las bases lo colocaban por detr¨¢s de Joan Canadell, Elsa Artadi y Jaume Alonso-Cuevillas. En el partido, resuenan los siseos que critican el poco r¨¦dito que saca el vicepresidente de su puesto. Era la te¨®rica pieza fuerte de Junts en el Ejecutivo, pero su evanescencia se compara con la relevancia que han ara?ado Jaume Gir¨® o Josep Maria Argimon, consejeros de Econom¨ªa y Salud, respectivamente.
El mes pasado, al abrirse juicio oral contra Laura Borr¨¤s por fraccionar contratos, se organiz¨® un acto en el Ateneu Barcelon¨¨s para apoyar a la que entonces era presidenta del Parlament. Puigner¨® no acudi¨® al homenaje y colg¨® en las redes sociales un mensaje para Borr¨¤s. Disculp¨® su ausencia alegando que estaba de ¡°excursi¨®n¡± y acompa?¨® el texto con una foto suya en el monte.
El president Pere Aragon¨¨s cerr¨® el curso pol¨ªtico con una comparecencia donde agradeci¨® la labor de todos sus consejeros y alab¨® la ¡°cohesi¨®n¡± del Ejecutivo. Sus palabras chocan con las tensiones constantes que han escenificado Junts y Esquerra. Proyectos de Puigner¨® han embarrancado azuzados por esas disputas. El caso m¨¢s llamativo es el de la ampliaci¨®n del aeropuerto de Barcelona-El Prat, que llevaba aparejada una inversi¨®n de 1.700 millones de euros por parte de Aena y que Esquerra bloque¨® en el ¨²ltimo momento alegando un coste medioambiental inaceptable. Caso parecido sucede con el tramo del Vall¨¨s del Cuarto Cintur¨®n. La conexi¨®n entre Sabadell, Terrassa y Castellar por la B-40 pone de acuerdo a consejer¨ªa de Territorio y al Ministerio de Transportes, pero disgusta a ERC. El partido se?ala que la obra es un ejemplo de ¡°modelos de movilidad caducos¡± y habla de patrones de gesti¨®n de la obra p¨²blica propios de la sociovergencia.
Desde el entorno del vicepresident se pone de relieve que sus esfuerzos en materia de movilidad est¨¢n puestos en Rodalies. Sin embargo, pese a los desaf¨ªos lanzados al Gobierno, Puigner¨® tampoco puede apuntarse logros de calado que hayan repercutido en ganar competencias para mejorar la achacosa red de trenes de cercan¨ªas. El papel institucional del vicepresidente se ha visto erosionado por el repudio de Junts a la Mesa de Di¨¢logo. Las conversaciones con el Gobierno las ha capitaneado Laura Vilagr¨¤. ¡°Hay quien la llama vicepresidenta¡±, revela un alto cargo de Esquerra en el Govern.
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