El Gobierno exhibe m¨²sculo inversor en Catalu?a tras las cr¨ªticas por la baja ejecuci¨®n presupuestaria

El Cuarto Cintur¨®n, la carretera de alta capacidad que debe sortear Barcelona pasando por Sabadell y Terrassa, es la infraestructura de la pol¨¦mica. Y este viernes lo volvi¨® a ser a cuenta de la decisi¨®n de la Generalitat de no asistir a un acto en que se anunciaba el acuerdo sobre un nuevo tramo de esta obra eterna y en la que tambi¨¦n participaba la ministra de Transportes y Movilidad, Raquel S¨¢nchez. El Govern argumenta que lo que deb¨ªa ser una reuni¨®n de trabajo ¡°se iba a convertir en un acto de reafirmaci¨®n del ministerio¡±. Los alcaldes de ambas ciudades y la ministra afearon a la Generalitat el plante, en que el ministerio aprovech¨® para anunciar actuaciones puntuales en la AP-7 para mejorar el problema del colapso permanente que vive esta v¨ªa desde que se levantaron los peajes. Pese a la s¨²bita incomparecencia de los responsables del Departamento de Territorio, en manos de Junts, Esquerra emiti¨® un duro comunicado contra sus socios de gobierno. Se?al¨® que proyectos como el Cuarto Cintur¨®n son ¡°modelos de movilidad caducos¡± y propios de un orden de prioridades ¡°sociovergentes¡±.

La visita de este viernes al Vall¨¨s no era una cita c¨®moda para el ministerio, despu¨¦s de que las cifras de Hacienda revelaran que el a?o pasado el Gobierno solo invirti¨® en Catalu?a el 36% de lo presupuestado. Ni tampoco despu¨¦s de meses con problemas de retenciones en la AP-7 que reflejan el colapso de la autopista, especialmente desde la supresi¨®n de los peajes. En este contexto, el ministerio aprovech¨® un acto en que se presentaba un acuerdo sobre la prolongaci¨®n del Cuarto Cintur¨®n, en el tramo Sabadell-Terrassa, para anunciar un paquete de actuaciones valoradas en 78 millones que deben ayudar a descongestionar la autopista a su paso por el Vall¨¨s.

Concretamente se trata de seis intervenciones puntuales: modificaci¨®n del trazado y de los accesos en la B-30 a la altura de Cerdanyola del Vall¨¨s (22 millones); creaci¨®n de un acceso directo desde la C-58 a la AP-7 en direcci¨®n Tarragona (ocho millones); mejora de la conexi¨®n entre la AP-7, la C-58 y la N-150 (cinco millones) y de la AP-7 con la C60 (nueve millones); modificaci¨®n del acceso al pol¨ªgono de Santiga en la AP-7 (cuatro millones) y la construcci¨®n de un tercer carril en el tramo Montmel¨®-Mollet direcci¨®n sur, y mejora de la conexi¨®n con la C-17 (30 millones). El ministerio planea licitar los proyectos constructivos de todas estas actuaciones durante este 2022. ¡°Se trata de mejoras y actuaciones de microcirug¨ªa, de r¨¢pida aplicaci¨®n y con un tr¨¢mite administrativo m¨¢s simple¡±, ha defendido Xavier Flores, secretario general de Infraestructuras.

Horas antes, Flores tambi¨¦n anunciaba en Tarragona la construcci¨®n de un tercer carril entre L¡¯Hospitalet de l¡¯Infant y Amposta, un trecho de algo m¨¢s de 50 kil¨®metros que actualmente solo tiene dos carriles por sentido. Pese a que el volumen de tr¨¢fico en esa zona no registra los niveles de congesti¨®n que sufre la conurbaci¨®n de Barcelona, el tercer carril se erige como una obra necesaria por el incremento de usuarios, atendiendo a que la AP-7 en las Terres de l¡¯Ebre es corredor de paso hacia el sur de la Pen¨ªnsula. Adem¨¢s, en esa zona, la ¨²nica alternativa a la AP-7 es la N-340, una achacosa ruta con las cunetas llenas de ramos de flores debido al largo historial de accidentes que acumula. Entre Tarragona y la central nuclear de Vandell¨°s, la autov¨ªa A-7 discurre en paralelo a la AP-7. El ministerio tambi¨¦n prev¨¦ mejorar los enlaces entre la autopista y la autov¨ªa, con el objetivo de beneficiar la movilidad.

Hace dos meses, el ministerio tambi¨¦n anunci¨® la construcci¨®n de un cuarto carril entre El Vendrell y El Papiol, un tramo de unos 50 kil¨®metros que registra una intensidad media diaria de 100.000 veh¨ªculos. Las obras tendr¨¢n un coste de 200 millones de euros y se espera que se puedan licitar este a?o para que est¨¦n terminadas en 2025.

La ministra admiti¨® el d¨¦ficit de inversiones y que es necesario ¡°poner el acelerador¡± para recuperar las cifras, pero tambi¨¦n ha querido poner estas inversiones en la AP-7 como ejemplo de que se est¨¢ intentando revertir la situaci¨®n.

Plant¨®n de la Generalitat

La pol¨¦mica del d¨ªa la protagoniz¨® la Generalitat, que ten¨ªa previsto asistir al acto, junto a la ministra, celebrado en el Consejo Comarcal del Vall¨¨s Occidental para presentar un acuerdo sobre la prolongaci¨®n del Cuarto Cintur¨®n. La fotograf¨ªa tampoco le era c¨®moda al Govern, tras el conflicto por las inversiones y por el hecho de que ERC siempre se ha mostrado en contra de esta infraestructura. El president Pere Aragon¨¨s se refer¨ªa a ello a primera hora de la ma?ana: ¡°El incumplimiento reiterado de los ¨²ltimos a?os, con cifras absolutamente inexplicables, es injustificable¡±. La Consejer¨ªa de Territorio defiende que el principio de acuerdo con el ministerio por un nuevo trecho del Cuarto Cintur¨®n es bueno, porque deja en manos de la administraci¨®n catalana definir el trazado, mientras que es el Gobierno quien paga la obra. Sin embargo, Ricard Font, secretario general de Vicepresidencia y Territorio, opt¨® por no asistir al acto con la ministra. ¡°No participaremos en esta puesta en escena¡±, justificaron desde Vicepresidencia. Tanto la ministra como los alcaldes de Sabadell y Terrassa criticaron el gesto, que tildaron de ¡°falta de respeto¡± y ¡°desprecio¡±.

El aspaviento de Junts con la ministra no temper¨® la tensi¨®n que hay dentro del Govern a costa del Cuarto Cintur¨®n. ¡°No podemos pretender resolver problemas urbanos e intercomarcales con v¨ªas de alta velocidad¡±, manifest¨® Esquerra en un comunicado. El texto recupera las referencias a la sociovergencia, un dardo directo al orgullo identitario de Junts. Para criticar el Cuarto Cintur¨®n esbozado entre PSOE y Junts, ERC hurg¨® en una herida que sigue sangrando pese al paso de los meses: la ampliaci¨®n del aeropuerto de Barcelona-El Prat. Se apunta que ambas infraestructuras son ¡°planteamientos err¨®neos, sin consenso territorial¡± y que tratan de ser impuestas ¡°de manera encubierta¡±.

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