Los empresarios se revuelven contra la propuesta de Junts de multar a las compa?¨ªas que dejaron Catalu?a por el ¡®proc¨¦s¡¯

La abismal distancia de los ¨²ltimos a?os entre la pol¨ªtica catalana y el mundo empresarial ha vuelto a hacerse evidente este martes con la publicitada pretensi¨®n de Junts per Catalunya de sancionar a las empresas que se fueron a otras comunidades durante el momento ¨¢lgido del proceso independentista y que no han regresado. El partido de Carles Puigdemont pretend¨ªa que los decretos que hoy se votar¨¢n en el Congreso incluyeran medidas de fomento para el regreso de estas compa?¨ªas y tambi¨¦n eventuales sanciones para las que no quieran hacerlo. El entusiasmo con el que el partido independentista explic¨® sus propuestas contrast¨® con la decisi¨®n de las grandes empresas de ignorar la propuesta y de la patronal catalana, Foment del Treball, de rechazarla frontalmente en un comunicado. El Govern catal¨¢n, monocolor y en manos de ERC, tambi¨¦n se desmarc¨® de una idea que combinaba tanto la idea de dar incentivos fiscales a las compa?¨ªas que regresen o a las que se mantuvieron, como llegar a plantear hasta multas a quienes no lo hicieran.

¡°Lo que proponemos es incentivar el retorno de estas empresas, que puedan volver con unos beneficios fiscales, y las que no lo hagan pero tengan una mayor actividad en Catalu?a, sean sancionadas¡±, explic¨® este martes por la ma?ana, en una entrevista a SER Catalunya, el portavoz y vicepresidente de Junts, Josep Rius. El partido fundado por el expresident Carles Puigdemont hasta ahora hablaba de incluir ¡°ayudas a las empresas¡± en la renegociaci¨®n del contenido de los tres textos que se votar¨¢n. Miembros de la ejecutiva de Junts, algunos sorprendidos con lo anunciado por el portavoz de la formaci¨®n, aseguran que en la reuni¨®n del pasado lunes no se plante¨® la idea de las multas a las empresas y recuerdan que la ¨²nica referencia al tema est¨¢ en los acuerdos con el PSOE para la investidura, donde se habla de abordar ¡°los elementos esenciales de un plan para facilitar y promover el regreso¡± de las compa?¨ªas.

De ah¨ª la sorpresa cuando el portavoz, Josep Rius, bajara a detallar que podr¨ªa haber multas para las empresas que mediante otro decreto aprobado en 2017 por el Gobierno de Mariano Rajoy, agilizaron los tr¨¢mites para su cambio de sede social ante la incertidumbre generada por el momento ¨¢lgido del proc¨¦s. La confusi¨®n la aliment¨® que, adem¨¢s, se hablara tambi¨¦n de bonificaciones para las que optaron por quedarse o, incluso, para las que decidieran volver.

Se calcula que m¨¢s de 5.000 empresas cambiaron su sede social, una operaci¨®n que no implica directamente cambiar la ubicaci¨®n de los centros productivos y de deslocalizaci¨®n de producci¨®n a gran escala. Los casos m¨¢s trascendentes fueron la inmensa mayor¨ªa de las compa?¨ªas cotizadas. Hasta octubre de 2017, unas 1.000 empresas m¨¢s tambi¨¦n hab¨ªan hecho el cambio de sede fiscal, que s¨ª tiene efectos en los impuestos que se recaudan y tienen un impacto en las arcas auton¨®micas por diferentes figuras impositivas.

La vuelta a Catalu?a, m¨¢s all¨¢ de un asunto reputacional para muchas compa?¨ªas emblem¨¢ticas, no es una de las principales prioridades de las compa?¨ªas. Sobre todo en el sector bancario, por ejemplo, ante la constante pregunta sobre un eventual regreso se sigue esgrimiendo la idea de que a¨²n ¡°no se dan las condiciones¡± para poder pensar en dar ese paso. Precisamente, la patronal catalana, Foment del Treball, puso ah¨ª el acento en su cr¨ªtica directa a la propuesta explicitada por Rius.

¡°La normalidad institucional y la creaci¨®n de un clima econ¨®mico favorable son el contexto necesario para favorecer el retorno de aquellas empresas que se marcharon si es que lo consideran necesario. En un comunicado donde hace referencia directa a la propuesta de la formaci¨®n independentista, Foment se muestra contraria a que ¡°las empresas que vuelvan o aquellas que mantuvieron su sede en Catalu?a se puedan beneficiar de ¡®incentivos fiscales¡¯¡± y rechaza que se aliente que las ¡°sanciones¡± fomenten un eventual regreso.

¡°Ya era complicado encontrar c¨®mo seducirnos, si ahora la propuesta es que se sancionar¨¢ si no hay un traslado, eso no tiene ni pies ni cabeza¡±, asegura el portavoz de una de las empresas que se march¨®, de peso en su sector y que prefiere mantener el anonimato. ¡°No somos un partido, somos una empresa¡±, remacha la misma voz, asegurando que se enteraron del plan por la prensa.

Dif¨ªcil recorrido legal

Varias empresas consultadas por este diario, de sectores diversos y que cambiaron su sede social en 2017, coinciden en ese ¨²ltimo punto. No consta un acercamiento serio con Junts de cara a compartir sus planes y varios recuerdan con iron¨ªa como el propio Carles Puigdemont, en 2017, quit¨® hierro al efecto que pudiera tener en la econom¨ªa catalana la huida de determinadas empresas. ¡°?La propuesta [de retorno] es recurrir al dumping [competencia desleal] fiscal por el que se critica a Madrid?¡±, se pregunta una voz autorizada de otra compa?¨ªa. ¡°Le veo un dif¨ªcil recorrido legal a una medida que va en contra de la libre circulaci¨®n de bienes y servicios en el territorio europeo¡±, tercia el portavoz de otra empresa cotizada, en referencia a las sanciones. Otra cosa, a?ade esta ¨²ltima fuente, es que se busque aclarar qu¨¦ empresas no cumplen con los requerimientos derivados de cambiar la sede social, como la obligaci¨®n de celebrar sus juntas de accionistas.

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