Isabel Franc: ¡°Las lesbianas no estamos de moda ni lo estaremos nunca¡±
La escritora presenta ¡®Darrere les Persianes¡¯ (Detr¨¢s de las persianas) un recorrido sobre el activismo l¨¦sbico en Barcelona, ilustrado por Rosa Navarro y editado por el Ayuntamiento de Barcelona
¡°?Cu¨¢ntas lesbianas conoc¨¦is desde Safo a la tenista Martina Navr¨¢tilov¨¢?¡±, es la pregunta con la que Isabel Franc (Barcelona, 68 a?os) empieza sus lecciones de literatura l¨¦sbica en el m¨¢ster de G¨¦nero y Comunicaci¨®n en la Universidad de Barcelona. A esta clase tambi¨¦n asisten las protagonistas del c¨®mic Darrere les persianes (Detr¨¢s de las persianas): ¡°Cuando me propusieron el libro empec¨¦ a escribir desde una perspectiva autobiogr¨¢fica, pero no quer¨ªa que fuera una narraci¨®n nost¨¢lgica¡±, explica Franc. La escritora, junto a la ilustradora Rosa Navarro, opt¨® por dar voz a las nuevas generaciones y dejar que fueran dos estudiantes las que trazaran un recorrido por la historia de las lesbianas de Barcelona para Trabajo de Fin de Master.
Franc lleva toda la vida escribiendo sobre lesbianismo, y a¨²n no sabr¨ªa decir si se trata de un g¨¦nero literario en s¨ª mismo: ¡°Mis alumnas no quieren ponerse etiquetas y me parece estupendo. Pero ellas pueden hacer esto porque otras trabajamos duro para acabar con nuestra invisibilidad, reivindicando la etiqueta de lesbianas, como una cultura y espacio propios¡±, subraya. Darrere les persianes es el relato de las lesbianas con etiqueta y su primera parada es el archivo de Ca la Dona, donde Merc¨¨ Otero les descubre a las grandes figuras femeninas de la Segunda Rep¨²blica como la deportista ol¨ªmpica Ana Mar¨ªa Mart¨ªnez Sagi, la primera directiva del Bar?a.
Las estudiantes avanzan en la investigaci¨®n, igual que lo hizo la historia. ¡°Elena fue detenida el 17/07/74 en un bar de copas por actitud sospechosa, usando vestimenta masculina con la pretensi¨®n de enga?ar a las mujeres, por las que siente una irresistible inclinaci¨®n¡±, reza una ficha policial replicada en el libro. Con la llegada del franquismo desaparecen los colores y el gris inunda las p¨¢ginas: ¡°Acostumbro a utilizar siempre la misma paleta de colores suaves, como el rosa pastel. Pero, cuando se produce este retroceso, me inclin¨¦ por la oscuridad para dejar constancia de la pesadez del ambiente durante el r¨¦gimen¡±, afirma Rosa Navarro (Vilanova i la Geltr¨², Barcelona, 47 a?os), la ilustradora del libro.
Con sus dibujos, Navarro refleja los c¨®digos que utilizaban las lesbianas durante el franquismo para no ser descubiertas, como llamarse ¡°libreras¡± entre ellas. Tambi¨¦n dibuja los centros del Patronato de protecci¨®n a la Mujer ¨Dc¨¢rceles encubiertas donde iban a parar las que eran consideradas como se?oritas de vida alegre¨D y caricaturiza las excursiones al campo y otros puntos de encuentro del colectivo. ¡°Una de las grandes paradojas del franquismo es la segregaci¨®n de sexos en lugares como las playas, donde, sin quererlo, termin¨® creando playas de ambiente. Uy, si las casetas hablaran¡±, bromea Franc.
Muere Franco, comienza la transici¨®n y vuelve el color a las p¨¢ginas que revisitan las Jornades Catalanes de la Dona, las marchas del Frente de Liberaci¨®n Homosexual de Castilla, el primer Orgullo LGTBI de Barcelona en 1977 y el activismo de Empar Pineda. ¡°Empar fue la primera lesbiana que sali¨® en TVE hablando de su sexualidad. Ella contaba que, al d¨ªa siguiente de la emisi¨®n, en su barrio, una vecina dijo ¡®Ayer Amparito sali¨® en la tele¡¯ y las otras respondieron ¡®s¨ª, la vimos, y ?al final se cas¨®?¡¯, ignorando totalmente el tema del que hablaba en televisi¨®n¡±, critica Franc. ¡°Las lesbianas hemos sufrido menos castigo p¨²blico que los gays. Si dos mujeres se daban la mano por la calle no pasaba nada y, si viv¨ªan juntas, eran solteronas amigas. El beneficio es que tuvimos ¡®m¨¢s libertad¡¯, pero, a la larga, el castigo ha sido m¨¢s cruel: no existes, te quitan el derecho a ser¡±, admite Franc.
La ¡°arqueolog¨ªa l¨¦sbica¡± sigue por el Distrito 3, barrio 9, en la calle del Cardenal Casa?as, lugar frecuentado por otras activistas como la lesbiana separatista Gretel Amman y su pareja Lola Majoral¨Dfundadora de Ca la Dona¨D, y remata la ruta con una mapa de locales clave para el lesbianismo de los 90 como el bar N¨²ria, el Daniels, el restaurante Fortuny, o el Casal Lambada.
Llegan los 90, el primer reportaje sobre lesbianas por Rosa Montero en El Pa¨ªs, y los activistas que trataban de quitar el halo de drama al lesbianismo: grupos de m¨²sica como Xoxo Sisters¨D vestidas estilo drag queen¨D, o las fiestas Fes-Lu (Hazlo). En el 97, Franc publica Con pedigree (Egales) bajo el pesud¨®nimo Lola Van Guardia: ¡°Fue un libro para que las lesbianas se rieran de sus ¡°bollodramas¡±. Ten¨ªa una portada muy expl¨ªcita y el subtitulo era ¡®culebr¨®n l¨¦sbico por entregas¡¯, pero esto solo aparece en la primera edici¨®n, las librer¨ªas no lo quer¨ªan. No s¨¦ si lo que no les terminaba era culebr¨®n o por entregas¡±, recuerda con iron¨ªa.
Darrere les persianes llega hasta 2004, cuando se aprueba la Ley del matrimonio homosexual. ¡°En ese momento aparece el transfeminismo, otra etapa del feminismo, del lesbianismo y de la colectividad LGTB, un paradigma que yo no he vivido en primera persona. Mi infancia, adolescencia, juventud y madurez son esto¨Ddice se?alando el libro¨D, la historia no se ha acabado, pero son las nuevas generaciones las que tienen que terminar de escribirla¡±. Pese al ¨¦xito de ventas del libro en plena celebraci¨®n del Orgullo LGTBI, Franc advierte: ¡°Las lesbianas no estamos de moda ni lo estaremos nunca. La diversidad se lleva mucho, pero es una tendencia hip¨®crita. A la gente le encanta un reportaje sobre artistas LGTBIQ+ pero, cuando la lesbiana es tu vecina de abajo, ya no hace tanta gracia¡±.
Se acerca el final: las estudiantes atraviesan el Paraninfo de la UB hasta llegar a la sala de audiencias, donde exponen su TFM, bajo la atenta mirada de la activista Mar¨ªa Giralt, Merc¨¨ Otero y la propia Franc. Tras el ¨¦xito de la exposici¨®n, con Safo y Navr¨¢tilov¨¢ en mente, todas prometen no volver a esconderse detr¨¢s de las persianas.
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