Miquel Roca, abogado: ¡°Me indigna que se hable de R¨¦gimen del 78¡±
El expol¨ªtico alerta del papel desestabilizador de las redes, pide recuperar la pol¨ªtica de ¡°pactos¡± y cuestiona que la situaci¨®n de los pol¨ªticos fugados sea comparable al exilio derivado del franquismo: ¡°Es otra cosa¡±
Miquel Roca (Burdeos, 84 a?os) es un equilibrista de palabras. Encuentra en cada frase el t¨¦rmino m¨¢s adecuado para moderar su mensaje y calibra constantemente el tono de sus palabras. Se muestra firme en sus convicciones, se apoya a veces en la ambig¨¹edad y huye de la confrontaci¨®n. A pocos d¨ªas de irse de vacaciones, acepta revisar su legado aunque rechaza repasar con detalle la actualidad pol¨ªtica. Durante casi una hora de conversaci¨®n, cambia su tono pausado en un ¨²nico momento.
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Miquel Roca (Burdeos, 84 a?os) es un equilibrista de palabras. Encuentra en cada frase el t¨¦rmino m¨¢s adecuado para moderar su mensaje y calibra constantemente el tono de sus palabras. Se muestra firme en sus convicciones, se apoya a veces en la ambig¨¹edad y huye de la confrontaci¨®n. A pocos d¨ªas de irse de vacaciones, acepta revisar su legado aunque rechaza repasar con detalle la actualidad pol¨ªtica. Durante casi una hora de conversaci¨®n, cambia su tono pausado en un ¨²nico momento.
- ?Le molesta que hablen de R¨¦gimen del 78?
- ?Me indigna!
Como ponente de la Constituci¨®n, Roca sigue defendiendo 46 a?os despu¨¦s de su aprobaci¨®n el esp¨ªritu de la Transici¨®n que permiti¨® facilitar un encuentro entre posiciones hist¨®ricamente enfrentadas y antag¨®nicas. Considera que la pol¨ªtica actual ha perdido la capacidad de buscar complicidades y alerta de los riesgos de la polarizaci¨®n. ¡°Solo la ignorancia y la incompetencia puede justificar que se hable de R¨¦gimen del 78 de forma peyorativa¡±, reivindica. ¡°Cost¨® mucho lograr todo aquello, la Constituci¨®n, la libertad¡ yo digo ?viva el R¨¦gimen del 78! Ojal¨¢ que algunos de los que lo critican reconocieran que pueden decir lo que dicen gracias a este R¨¦gimen del 78¡å, se?ala.
Hace a?os que Roca est¨¢ estrictamente centrado en su bufete de abogados. Le siguen parando por la calle y recordando su pasado pol¨ªtico, pero desde hace ¡°15 o 20 a?os¡±, explica, que nadie le ha planteado formar parte de alg¨²n proyecto formal. ¡°Ahora tengo esa edad en que me llaman para participar en coloquios y conferencias como la guinda del pastel¡±, ironiza. Su discurso, sin embargo, sigue proclamando las virtudes del di¨¢logo. ¡°Es un error creer que los valores del consenso se adaptaban solo a la Transici¨®n. Tendr¨ªan que durar siempre. Una democracia madura es una democracia plural, y el pluralismo lleva al pacto. La democracia es pactar. Esta es la carencia actual¡±, analiza.
?Cu¨¢ndo empez¨® la actual polarizaci¨®n pol¨ªtica? ¡°A partir del a?o 2000 empieza una tendencia a encontrarse c¨®modo en este escenario¡±, responde Roca. ¡°Con la polarizaci¨®n lo importante no es ganar, sino hacer perder al rival. Se dice ¡®si me votas a m¨ª, este no sale¡¯, lo que aleja la acci¨®n pol¨ªtica de los problemas reales¡±, indica, a la vez que se?ala que las redes sociales han jugado un papel ¡°clar¨ªsimamente negativo¡± en este proceso por la ¡°transformaci¨®n¡± del ecosistema medi¨¢tico. ¡°Las redes ofrecen un acceso a la informaci¨®n; pero tambi¨¦n facilita la interesada o sesgada que se presenta con el mismo valor que la verdad objetiva¡±, se?ala. Cuestionado sobre si todo este ecosistema debe regularse, no lo descarta: ¡°Todo ello merece, como m¨ªnimo, un debate¡±.
La situaci¨®n actual, sin embargo, no se explica solo por el mal uso de la tecnolog¨ªa. A las democracias europeas, entiende Roca, les ha faltado ¡°pedagog¨ªa¡± para combatir el auge de la extrema derecha. ¡°Quiz¨¢s no se ha explicado suficientemente lo que represent¨® la creaci¨®n del Estado del Bienestar; y no se ha valorado¡±, considera. Y en pleno crecimiento de la islamofobia, el abogado corta por lo sano. ¡°Si quieren venir es porque a¨²n somos una referencia de calidad de vida y de respeto, a ver si lo entendemos. O nuestra sociedad es solidaria o desaparecer¨¢. Todos nos hemos beneficiado de la solidaridad de los dem¨¢s en alg¨²n momento¡±.
Sabe de lo que habla. Su familia fue una de las miles de las que huyeron de Catalu?a tras la Guerra Civil y la victoria del franquismo. ¡°Mis padres se beneficiaron de la solidaridad de los franceses durante el franquismo. Yo nac¨ª en el exilio¡±, recuerda.
?Los pol¨ªticos catalanes que huyeron al extranjero durante el proc¨¦s son exiliados? ¡°Son cosas diferentes¡±, responde. ¡°El exilio que represent¨® huir de la Guerra Civil no es lo mismo que lo que ha ocurrido ahora. Aquello era buscar la vida¡±, plantea, a la vez que desea que la etapa actual de conflicto pol¨ªtico y judicial ¡°acabe¡±. ¡°No es comparable aquel momento hist¨®rico con el actual. Son otras cosas¡±.
El abogado no esconde que lo ha pasado ¡°mal¡± durante los a?os del proc¨¦s, tras la confrontaci¨®n de los dos elementos que han conformado parte de su vida pol¨ªtica: el catalanismo y la estabilidad pol¨ªtica del Estado. Entiende que la sentencia del Tribunal Constitucional del 2010 contra el Estatut fue ¡°un punto de inflexi¨®n¡± en la crisis territorial porque la revisi¨®n del alto tribunal lleg¨® despu¨¦s del refer¨¦ndum popular, lo que gener¨® un sentimiento de incomprensi¨®n popular. ¡°Cuando el pueblo habla, el resto calla. La voz del ciudadano debe ser la ¨²ltima¡±, defiende. El uso de los tribunales por parte del estamento pol¨ªtico ha llevado a una ¡°judicializaci¨®n de la pol¨ªtica¡± de la que pide salir.
Ahora considera que se abre una nueva etapa. ¡°Creo que el proc¨¦s como tal ha acabado. Otra cosa es la reivindicaci¨®n que Catalu?a pueda ejercer para reclamar el reconocimiento de su identidad, cultura, modelo de vida o su ambici¨®n de autogobierno¡±, plantea. ¡°Hay una ambici¨®n leg¨ªtima de autogobierno y tiene sentido que evolucione con el tiempo¡±.
Hu¨¦rfano sin Converg¨¨ncia
Fundador de Converg¨¨ncia Democr¨¤tica de Catalunya (CDC), el partido que gobern¨® Catalu?a durante 23 a?os con Jordi Pujol y que desapareci¨® en 2016, Roca trasmite ahora una cierta sensaci¨®n de orfandad pol¨ªtica. ¡°Soy un convergente que en la medida que han extinguido a mi partido, no tiene otro¡±, expresa. Y a?ade: ¡°Me sentir¨¦ m¨¢s pr¨®ximo con lo que m¨¢s se acerque con lo que intentamos en aquel momento¡±. ?Se refiere a Junts? ¡°No lo entienda as¨ª porque tengo la sensaci¨®n de que Junts no quiere saber nada de CDC¡±, responde.
- ?Es usted independentista?
- Prefiero no responder esta pregunta.
A pocos d¨ªas de irse a Port de la Selva (Girona) a descansar, como acostumbra a hacer cada a?o, Roca analiza por ¨²ltimo el papel de dos nombres ilustres: el propio Pujol y el rey em¨¦rito Juan Carlos I. Del primero se?ala su relevancia para la historia de Catalu?a, y del monarca su papel ¡°important¨ªsimo en el momento de la Transici¨®n¡±. ?Su legado queda marcado por sus esc¨¢ndalos? ¡°No es que no tengan importancia, pero hay actitudes o comportamientos que dominan sobre otros¡±, plantea, ¡°y hay personajes que han protagonizado un momento hist¨®rico del pa¨ªs. Esto es lo que les marca¡±, cierra.
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