Investigado un exdirector de la Agencia de Residuos de Catalu?a por el traslado irregular de vertidos en Osona

Un juzgado de Vic investiga a Josep Maria Tost, que estuvo una d¨¦cada al frente de la Agencia de Residuos de Catalu?a, por el traslado presuntamente irregular de residuos desde el vertedero de Pin¨®s al de Fit¨®, ambos en el t¨¦rmino municipal de Seva (Osona), seg¨²n han confirmado a EL PA?S fuentes judiciales. La actividad en esas dos instalaciones, que antes eran canteras, ha sido una fuente de malestar para los vecinos de las urbanizaciones cercanas desde hace m¨¢s de dos d¨¦cadas. Aunque deb¨ªan ser solo dep¨®sitos de runa procedente de la construcci¨®n, acabaron recibiendo tambi¨¦n otros materiales que suponen un riesgo para el medio ambiente, seg¨²n la causa judicial en la que tambi¨¦n est¨¢n investigados los dos m¨¢ximos responsables de la empresa que explota los vertederos.

El pasado jueves 24 de octubre, seg¨²n han confirmado las mismas fuentes, agentes del Seprona de la Guardia Civil registraron por orden judicial dos oficinas de la empresa: una ubicada en el vertedero de Fit¨® (el ¨²nico que ahora permanece activo) y otra junto al Ayuntamiento, que posee el 20% de la sociedad. La empresa mixta fue constituida en ¨¦poca del hist¨®rico alcalde convergente Josep Palmarola ¡ªque gobern¨® durante 32 a?os, hasta 2011¡ª y figura tambi¨¦n en la causa como persona jur¨ªdica. El juez, que durante los ¨²ltimos meses ha ordenado intervenciones telef¨®nicas en una causa que ha permanecido hasta ahora secreta, atribuye a los investigados delitos contra el medio ambiente y grupo organizado. Fuentes judiciales apuntan a que esas escuchas han permitido abrir nuevas l¨ªneas de investigaci¨®n.

Juanma Carrasco es vecino de Can Garriga, una urbanizaci¨®n al sur de Seva de unas 250 personas que vive asomada a la explanada de residuos abierta en la monta?a. Ha sufrido el ruido, el polvo, el trasiego de camiones. Con el tiempo ha sido testigo, tambi¨¦n, de la aparici¨®n de extra?os gases y de malos olores procedentes, primero, del vertedero de Pin¨®s. ¡°Esto no deb¨ªa ser propiamente un vertedero, sino solo un dep¨®sito de runa para tapar el agujero dejado por la antigua cantera. Pero si sal¨ªan gases es que se estaba arrojando all¨ª materia org¨¢nica, materiales para los que no ten¨ªan permisos¡±, dice. Carrasco fue parte activa de la plataforma Stop Pedreres Osona Sud, que denunci¨® esas anomal¨ªas para poner fin a una actividad que consideran ilegal. Los vecinos denunciaban, ya entonces (as¨ª lo ha constatado la investigaci¨®n) que en Pin¨®s se estaban arrojando ¡°materiales impropios¡± que supon¨ªan una amenaza para el medio ambiente.

Para los vecinos de Can Garriga y de la urbanizaci¨®n de Pin¨®s, el giro de guion lleg¨® en 2018. La monta?a donde se ubican los vertederos se estaba moviendo a raz¨®n de dos cent¨ªmetros al mes, seg¨²n constataron los t¨¦cnicos. Una barbaridad geol¨®gica que, supuestamente, hab¨ªa provocado la aparici¨®n de abolladuras en la carretera C-17, que lleva de Barcelona a Vic y que discurre pegada a la explotaci¨®n. Aunque la causa de las abolladuras en el asfalto es a¨²n objeto de controversia, la Generalitat paraliz¨® la explotaci¨®n del vertedero por los riesgos para la seguridad. Y orden¨®, tambi¨¦n con premura, obras para vaciar de forma parcial (unos 300.000 metros c¨²bicos) el vertedero de Pin¨®s.

Los trabajos, que costaron m¨¢s de 10 millones de euros, supusieron trasladar el material al vertedero cercano de Fit¨®. Los dos est¨¢n en Seva, pero al sur del t¨¦rmino municipal y lejos del casco antiguo; m¨¢s cerca quedan, en cambio, los n¨²cleos urbanos de las poblaciones de Centelles y Aiguafreda. Los vecinos se opusieron al traslado y presentaron una denuncia ante los Mossos d¡¯Esquadra. ¡°Nunca entendimos por qu¨¦ hab¨ªa que pasar la mierda de un sitio al otro, y por qu¨¦ ese traslado ten¨ªa que pagarse con dinero de los ciudadanos de Catalu?a¡±, lamenta Carrasco.

Las presuntas irregularidades en la gesti¨®n de esa operaci¨®n apuntan ahora a la Agencia de Residuos de Catalu?a. Su director de entonces, Josep Maria Tost, autoriz¨® presuntamente el traslado de materiales impropios entre dos vertederos que, a priori, solo pod¨ªan contener runa. Tost fue otro hist¨®rico alcalde de CiU, en este caso de Riudecanyes (Baix Camp). En 2011 fue nombrado m¨¢ximo responsable del organismo p¨²blico de la Generalitat con competencias en la materia, cargo que ya no abandonar¨ªa hasta una d¨¦cada m¨¢s tarde. En la actualidad, Tost sigue vinculado a la planificaci¨®n y gesti¨®n de residuos, pero en el sector privado: es consultor en diversas compa?¨ªas y en su perfil de Linkedin se define como ¡°emprendedor¡± y ¡°facilitador¡±. Aunque tiene la condici¨®n de investigado, todav¨ªa no ha prestado declaraci¨®n ante el juez.

A la investigaci¨®n inicial de Mossos se sum¨® m¨¢s tarde la Guardia Civil por un incidente fortuito. El temporal Gloria, que en enero de 2020 azot¨® Catalu?a, desbord¨® una riera, hizo subir el nivel del agua y provoc¨® que los materiales acumulados en Fit¨® se infiltraran. Unos trabajadores que estuvieron sacando agua con camiones pidieron que se usara para regar una zona y se marearon. As¨ª empez¨® sus pesquisas el instituto armado, que bajo tutela del juzgado dio un primer zarpazo en abril de ese a?o. Durante una inspecci¨®n, el Seprona detect¨® que el vertedero volcaba residuos contaminados a una riera de agua corriente: los vertidos ilegales se mezclaban con aguas limpias y, a trav¨¦s de una canalizaci¨®n parcialmente soterrada, llegaban a la riera. La Guardia Civil explic¨® entonces que, como resultado de la descomposici¨®n de residuos urbanos (que el vertedero no ten¨ªa permisos para almacenar) afloraron l¨ªquidos en un peque?o estanque al fondo de la antigua cantera.