El PP de Rita Barber¨¢ gast¨® en campa?as electorales m¨¢s de lo permitido y por procedimientos clandestinos

El PP de la ciudad de Valencia ingres¨® y dedic¨® a varias campa?as electorales (entre 2006 y 2015) una cantidad de dinero y recursos muy superior a la permitida legalmente, sobre todo en los comicios de 2007 ¡ª¡±superando con seguridad y ampliamente el mill¨®n de euros¡±¡ª. As¨ª lo establece el auto de procesamiento por blanqueo de capitales dictado el martes por el Juzgado de Instrucci¨®n 18 de Valencia contra m¨¢s de medio centenar de personas del equipo municipal y contra el propio PP local. Tambi¨¦n se acusa al exvicealcalde Alfonso Grau por malversaci¨®n.

¡°Fue una sobrefinanciaci¨®n articulada exclusivamente en el ¨¢mbito local del partido que se confund¨ªa con la del Grupo Municipal del PP¡±, sostiene el auto. Y se llev¨® a cabo de forma aparentemente opaca a la estructura nacional del partido por un reducido n¨²mero de personas, de la estrecha confianza de Barber¨¢, fallecida en 2016. Grau (hoy en prisi¨®n preventiva por otro caso de corrupci¨®n) actuaba supuestamente como recaudador y Carmen Garc¨ªa Fuster, secretaria del grupo municipal, como administradora de una caja b del grupo municipal. La formaci¨®n recurri¨® a ¡°procedimientos clandestinos de financiaci¨®n¡± que vulneraban los l¨ªmites de la Ley Electoral y de Financiaci¨®n de Partidos, seg¨²n el auto. El instructor ha descartado el delito por financiaci¨®n irregular de partidos porque no exist¨ªa en el C¨®digo Penal cuando se produjeron los hechos.

El auto desgrana la investigaci¨®n desplegada sobre las campa?as electorales del PP local en 2007, 2011 y 2015. Por esta ¨²ltima campa?a encausa por blanqueo a 49 exconcejales y exasesores del PP de Valencia. Cada uno de ellos transfiri¨® supuestamente 1.000 euros a la cuenta bancaria del partido mientras recib¨ªan a cambio en mano dos billetes de 500 euros de procedencia desconocida. El partido ingres¨® por el conocido como m¨¦todo del pitufeo cerca de 50.000 euros.

Antes de 2015, los populares de Valencia recurrieron a otros m¨¦todos de recaudaci¨®n poco convencionales, seg¨²n la instrucci¨®n. En la campa?a de 2007, tras la cual el PP consigui¨® mayor¨ªa absoluta, la operativa se canaliz¨® a trav¨¦s de la sociedad Laterne, dirigida por un viejo amigo del vicealcalde Grau. Esta mercantil recib¨ªa fondos de empresas contratistas de servicios del Ayuntamiento y tambi¨¦n pagos de fundaciones municipales. Esos fondos, que deb¨ªan ir a fines sociales y de inter¨¦s p¨²blico, se destinaban despu¨¦s al partido, recoge el instructor.

Para los comicios de 2011, y dado que el entramado de empresas alrededor de Laterne hab¨ªa desaparecido tras la muerte de su propietario, Grau contact¨® para la campa?a electoral con otra empresa, Trasgos, con un precio pactado de 170.000 euros, de los que se pagaron 167.678. Sin embargo, a partir de julio de 2010 y en una libreta bancaria manuscrita de Garc¨ªa Fuster, empiezan a aparecer unas anotaciones bajo la denominaci¨®n de ¡°aportaciones CyA¡±, ingresos en efectivo realizados en la cuenta por ella misma. En total, unos 116.000 euros. En su declaraci¨®n, Garc¨ªa Fuster asegur¨® que ese dinero proced¨ªa de simpatizantes del PP, que entregaban a un recaudador cuyo nombre se neg¨® a desvelar.

Adem¨¢s, durante el periodo investigado se constat¨® que el Grupo Municipal del PP de Valencia dispon¨ªa de dos cuentas bancarias diferentes; en la primera se depositaban las dotaciones econ¨®micas establecidas por la ley de bases de r¨¦gimen local, con ingresos y gastos derivados de los cometidos propios del grupo pol¨ªtico; y la segunda, que se manten¨ªa ¡°deduciblemente¡±, se?ala el auto, al margen de la contabilidad del PP. Los saldos bajaban sustancialmente despu¨¦s de los periodos electorales.