Las nutrias crecen en los r¨ªos valencianos gracias a una especie invasora, el cangrejo americano, que ha mejorado su dieta
Un estudio de los excrementos de los must¨¦lidos constata el cambio de alimentaci¨®n que ha permitido su expansi¨®n junto con la mejora de la calidad de las aguas
La nutria era un especie en v¨ªas de extinci¨®n en la Comunidad Valenciana, a principios de la d¨¦cada de los ochenta. Su destino parec¨ªa irreversible. Sin embargo, ahora la poblaci¨®n de este must¨¦lido acu¨¢tico se ha multiplicado y su presencia se ha detectado en lugares insospechados incluso hace un siglo. Hoy es un animal vulnerable, pero no en extinci¨®n. La mejora de la calidad de los r¨ªos por los procesos de depuraci¨®n de las aguas residuales a partir de los noventa y la asunci¨®n de pol¨ªticas proteccionistas son dos razones que suelen explicar este incremento. Ahora se ha a?adido otra que podr¨ªa ser clave: la expansi¨®n de una especie invasora, el cangrejo americano o cangrejo rojo, que se ha convertido en la dieta principal de las nutrias, seg¨²n una investigaci¨®n sobre sus h¨¢bitos alimenticios.
El an¨¢lisis de m¨¢s de un centenar de deposiciones de las nutrias, realizado desde 2018, constata que el 75% de su alimentaci¨®n proviene de ese cangrejo invasor, seg¨²n explica Sales Tom¨¢s, gerente de la Fundaci¨®n Limne, que ha elaborado el estudio en colaboraci¨®n con la Fundaci¨®n Aguas de Valencia. ¡°El creciente papel del invasor cangrejo de r¨ªo americano en la dieta del mam¨ªfero amenazado sugiere que los cambios en su nutrici¨®n podr¨ªan haber influido destacadamente en la recuperaci¨®n de la especie experimentada en los ¨²ltimos a?os¡±, apunta Tom¨¢s.
Este cangrejo invasor, que fue introducido en los a?os setenta, diezm¨® notablemente la poblaci¨®n de cangrejo aut¨®ctono, que se ha recuperado un poco con los a?os, debido a que transmite una enfermedad que al crust¨¢ceo americano no le afecta. Pero, por otro lado, el ecosistema ha ido asumiendo su presencia y los depredadores lo han incorporado a su dieta, dando vida. ¡°El ecosistema va aprendiendo; tampoco debemos ser apocal¨ªpticos con las llamadas especies invasoras o ex¨®ticas , seg¨²n explica Juan Jim¨¦nez, estudioso de la nutria desde los ochenta y bi¨®logo de la Consejer¨ªa de Agricultura, Desarrollo Rural, Emergencia Clim¨¢tica y Transici¨®n Ecol¨®gica, que tambi¨¦n ha participado en la investigaci¨®n.
El caso descrito ser¨ªa un buen ejemplo de c¨®mo la introducci¨®n de una especie invasora provoca importantes desequilibrios y puede llegar a modificar los ecosistemas preexistentes, casi siempre negativamente, aunque para la nutria y en este caso concreto se describe un impacto positivo, apuntan Adri¨¢n Lacomba y David Campos-Such, autores del estudio presentado el pasado viernes en la sed de Agencias de Valencia.
De modo que una especie invasora ha contribuido de manera decisiva a salvar de la extinci¨®n al menos en la Comunidad Valenciana. Tambi¨¦n en Castilla-La Mancha se ha detectado en los excrementos el cambio de dieta, agrega Jim¨¦nez. Esta investigaci¨®n, en cualquier caso, pretende abrir las puerta a nuevos estudios que podr¨¢n confirmar o relativizar esta hip¨®tesis de trabajo. Sus autores sostienen que ¡°la amplia distribuci¨®n del cangrejo americano, Procambarus clarkii, parece ser uno de los factores que ha propiciado el aumento de efectivos de nutria, junto a la mejora en los r¨ªos¡±.
Adem¨¢s, al no tener demasiados requerimientos medioambientales, el cangrejo rojo se encuentra tambi¨¦n en r¨ªos degradados y ecosistemas inestables, lo que ampl¨ªa ¡°notablemente¡± las zonas por las que la nutria puede extender su territorio y acceder a nuevas cuencas¡±, un factor m¨¢s que propicia su expansi¨®n
Despu¨¦s del cangrejo, las nutrias se alimentan de peces aut¨®ctonas, de barbos y de manera anecd¨®tica de reptiles, se?ala Sales Tom¨¢s, que exhibi¨® en la presentaci¨®n un sobre de pl¨¢stico con una muestra de excrementos que desped¨ªa una fuerte ¡°olor a marisco¡±.
Este cangrejo americano resisten muy bien la naturaleza discontinua, seca y torrencial, que caracteriza a los r¨ªos valencianos de la cornisa mediterr¨¢nea. ¡°Se cierran en s¨ª mismos, se ocultan en la arena y aguantan bastante¡±, apunta Jim¨¦nez. Gracias a esa resistencia, las nutrias encuentran alimento y su poblaci¨®n aumenta, si bien no hay una estimaci¨®n de su n¨²mero por la dificultad de este tipo de c¨¢lculos al ser una animal muy esquivo, dicen los expertos. Si hay constataci¨®n de su indudable presencia en muchos lugares donde antes no hab¨ªa evidencia por la aparici¨®n y an¨¢lisis de sus excrementos.
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