Elx, referente del destrozo
La pol¨ªtica del alcalde, Pablo Ruz habla de ciudadanos de primera y de segunda. Lanza un mensaje a quienes nos salimos del molde cl¨¢sico: no quiere espacio para nosotros
El carril bici es m¨¢s que una infraestructura de movilidad. Es el s¨ªmbolo de un modelo de ciudad. S¨®lo as¨ª se explica la virulencia que los gobiernos de PP y Vox han desplegado contra este elemento avalado por los expertos para mejorar las condiciones de vida en los municipios. Lo peor es que no hay debate objetivo, porque las derechas han abandonado la raz¨®n en este asunto.
Elx, desgraciadamente, se ha convertido en referente del destrozo. Hemos pasado de ser una ciudad que asentaba una malla ciclista potente a ser noticia por la supresi¨®n de estas infraestructuras. Eso implica que las personas que circulamos en bicicleta ahora lo haremos en condiciones de peligro. Tambi¨¦n supone que los vecinos y vecinas que disfrutaban de calles humanizadas tendr¨¢n que volver a soportar el nocivo c¨®ctel de humo, velocidad y ruidos.
Pero esta decisi¨®n del alcalde, Pablo Ruz, tiene una trascendencia mayor. Es una pol¨ªtica que habla de ciudadanos de primera y de segunda. Ruz lanza un mensaje a quienes nos salimos del molde cl¨¢sico: no quiere espacio para nosotros. Est¨¢ en contra de democratizar el espacio p¨²blico. Nuestra libertad de movernos con seguridad en el medio de transporte que decidamos no es importante.
Por eso, el desmantelamiento de los carriles bici no es la an¨¦cdota oscura de un alcalde sonriente. Marca un peligroso camino en lo que de verdad importa, en el modelo de ciudad que construimos, en nuestro derecho a la ciudad como vecinas y vecinos.
Es una decisi¨®n que hace de Elx una ciudad m¨¢s sucia, antigua y excluyente. As¨ª de claro y simple. No lo olviden, Pablo Ruz era quien pronosticaba el desastre por la peatonalizaci¨®n de la Corrredora.
Estos son d¨ªas en los que escuchamos mensajes insultantes por parte del nuevo alcalde y su equipo. Dicen que s¨ª quieren carriles bici, pero no estos. Se aferran a informes policiales que ignoran la seguridad de los ciclistas. Incluso intentan convencernos de las bondades de compartir carriles con los coches.
No entienden por qu¨¦ no nos conformamos con las migajas. Son los que llevan a?os ridiculiz¨¢ndome por usar la bicicleta. Y ese el fondo del asunto, creen que Elx s¨®lo les pertenece a unos pocos, en una mezcla de mediocridad, elitismo y fanatismo. Tanto que incluso est¨¢n dispuestos a perder los fondos europeos, dinero de todas y todos, por hacer cumplir su amenaza.
Pero, pese a Ruz, seguiremos pedaleando, seguiremos reivindicando la bici y un nuevo horizonte para Elx, en el que podamos seguir caminando hacia el municipio inclusivo, abierto, verde y saludable que merecemos. Nos avala la ciencia y el sentido com¨²n. Nos impulsa el m¨¢s l¨ªcito de los deseos, que todas y todos podamos vivir en mejores condiciones. Igual la bici s¨ª es un elemento subversivo, el que consigue democratizar el municipio frente a quienes quieren perpetuar los privilegios de unos pocos.
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