Absuelta una m¨¦dica de Castell¨®n acusada de revelaci¨®n de secretos por entrar al historial cl¨ªnico de las hijas de su expareja

La Secci¨®n Segunda de la Audiencia Provincial de Castell¨®n ha absuelto a la m¨¦dica de un centro de salud de la localidad castellonense de Onda acusada de dos delitos de descubrimiento y revelaci¨®n de secretos por acceder al historial cl¨ªnico de las hijas de su expareja sentimental. Aunque considera probada la consulta a ambos historiales, se?ala que no puede acreditarse que tuviera acceso a datos sensibles, que son los que afectan a la ¡°esfera m¨¢s ¨ªntima el ser humano¡±.

La Sala considera probado que la m¨¦dica accedi¨® en junio y septiembre de 2015 a los historiales de las dos hijas de su entonces marido, querellantes en este procedimiento, y que no lo hizo a petici¨®n o con el consentimiento de ellas, como mantuvo la propia sanitaria durante el juicio. La defensa de la m¨¦dica asegur¨® que ¨¦sta ¡°solo accedi¨® para hacerles un favor a las hijas de su exmarido y padre de su hija en com¨²n¡±, con quien conviv¨ªa entonces, y que fue ¨¦ste quien le solicit¨® realizar este tr¨¢mite a trav¨¦s de sus hijas ¡°para mirar unos datos sin importancia¡± como ¡°comprobar vacunas para un viaje, algo natural y sin problema¡±. El letrado de la acusada indic¨® que era ¡°falso que accediera a m¨¢s informaci¨®n ya que no ten¨ªan nada en el expediente y adem¨¢s no era de su inter¨¦s otro dato¡±.

El Tribunal ha concluido que esos hechos no tienen trascendencia penal porque el mero acceso no autorizado no integra el delito y es necesario que se produzca un perjuicio para que exista delito.

Por estos hechos las acusaciones p¨²blica y particular solicitaban un total de siete a?os de prisi¨®n, otros tantos de inhabilitaci¨®n absoluta y 6.000 euros de indemnizaci¨®n. La fiscal¨ªa relat¨® en su escrito de conclusiones que la doctora se aprovech¨® de que en el ordenador de su puesto laboral en el citado centro de salud ten¨ªa acceso a historias cl¨ªnicas electr¨®nicas de pacientes ¡°s¨®lo para fines de trabajo¡±, siendo ¡°consciente de que, en caso contrario, no pod¨ªa hacerlo por vulnerar el compromiso de confidencialidad¡±. Algo que, a juicio de la fiscal¨ªa, la procesada hizo introduciendo su tarjeta profesional identificativa y vali¨¦ndose de sus credenciales [¡­]¡± para acceder a sendos historiales ¡°sin que mediara consentimiento¡± por parte de las querellantes.

Pese a que la Sala entiende que en una historia cl¨ªnica s¨ª hay datos tanto reservados como sensibles, en el caso juzgado, la doctora solo accedi¨® a la parte de los datos de filiaci¨®n de una de las querellantes, como el domicilio, y no se acredit¨® durante la vista oral los prejuicios que dicho acceso pudo generar en la paciente, que en aquel momento ten¨ªa una buena relaci¨®n con la acusada por ser la esposa de su padre.

En cuanto a la otra hermana que reclamaba, la sentencia detalla que no consta qu¨¦ contenidos hab¨ªa en su historia cl¨ªnica en el momento del acceso, por lo que, seg¨²n la sentencia 479/23 de 19 de junio del Tribunal Supremo, ¡°sin se?alarse los datos concretos que fueron conocidos es inviable presumir el perjuicio inherente al car¨¢cter especialmente sensible de algunos datos¡±.

La sentencia, que no descarta la relevancia de la tramitaci¨®n de los hechos como constitutivos de una posible infracci¨®n administrativa, no es firme y puede recurrirse ante la Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.