La abstenci¨®n a un Gobierno del PP para que no entre Vox divide a los alcaldes socialistas de Castilla y Le¨®n
Los regidores de Valladolid y Le¨®n apoyan este cord¨®n sanitario; los de Burgos, Segovia y Soria piden que Ma?ueco asuma su responsabilidad
La irrupci¨®n de Vox en Castilla y Le¨®n ha dividido a la derecha y a la izquierda. El PP presenta una facci¨®n abierta a aliarse con los de Santiago Abascal y otra que reniega de las posiciones m¨¢s extremas de este partido; una parte del PSOE defiende abstenerse con un ¡°cord¨®n sanitario¡± que a¨ªsle a la ultraderecha y deje gobernar en solitario a los conservadores y otra insta a que sean estos quienes lidien con la ¡°responsabilidad¡± de haber adelantado elecciones y que irrumpiera Vox. Este debate ha aparecido ya entre los alcaldes socialistas: los de Valladolid y Le¨®n prefieren que el PSOE se haga a un lado y los de Burgos, Segovia y Soria lo rechazan.
La cuesti¨®n emergi¨® cuando el regidor de Valladolid (298.000 habitantes), ?scar Puente, pidi¨® ¡°coherencia¡± ante esa extrema derecha que se ha considerado tan ¡°peligrosa¡±. As¨ª, emplaza a actuar para que esa ideolog¨ªa no empape las instituciones. Para ¨¦l, es ¡°l¨®gico ofrecer una alternativa y distinguirse de lo que hizo el PP en 2019¡å, cuando los comicios auton¨®micos los gan¨® el socialista Luis Tudanca pero el PP, por medio del hoy presidente en funciones, Alfonso Fern¨¢ndez Ma?ueco, se ali¨® con Ciudadanos para gobernar en coalici¨®n. El alcalde insiste en que su postura es tan solo ¡°una reflexi¨®n¡± e insta a que sean los aparatos org¨¢nicos del partidos quienes tomen decisiones y las remitan a la militancia. Este martes Tudanca ha indicado que esa hipot¨¦tica abstenci¨®n llegar¨ªa solo si el PP se la pide y, en ese caso, que se ampl¨ªe a un ¡°cord¨®n sanitario¡± en todas las localidades o comunidades donde los populares tienen acuerdos con los ultras. Por la tarde, el presidente del Gobierno, Pedro S¨¢nchez, ha coincidido: ¡°Si dicen que la ultraderecha es un peligro, a lo mejor nos podemos entender¡±.
La tesis de Puente ha encontrado consenso en Le¨®n (122.000 habitantes), pues el alcalde socialista, Jos¨¦ Antonio D¨ªez, aprueba facilitar el mando de Ma?ueco para eliminar a Vox de la ecuaci¨®n. ¡°Durante mucho tiempo hemos hablado de cordones sanitarios a la ultraderecha y tenemos la oportunidad de evitar que el PP tenga que pactar con ellos para gobernar¡±, expone el leon¨¦s, que entiende lo complejo del asunto pero lo supedita a lo ¡°grave y peligroso¡± de que la extrema derecha llegue al poder. ¡°Ser¨ªa retroceder en democracia¡± que se apliquen medidas como las que el candidato auton¨®mico, Juan Garc¨ªa-Gallardo, ya ha exigido: retirar la ley de igualdad y la de Memoria hist¨®rica. ¡°Ni siquiera hablan de despoblaci¨®n o reindustrializar¡±, critica Diez, que no cree que el electorado castigara esta decisi¨®n en pos de ¡°impedir pol¨ªticas retr¨®gradas¡±.
Esta postura encuentra su oposici¨®n en los dem¨¢s consistorios socialistas del territorio. El primer edil de Burgos (174.000 habitantes), Daniel de la Rosa, se indigna ante esta posibilidad: ¡°El PP la ha liado para nada, para tener un socio m¨¢s beligerante que va a tener m¨¢s peso en las pol¨ªticas¡±. De la Rosa, que destaca que el posicionamiento no depende de los regidores sino de los consejos org¨¢nicos, tilda de ¡°surrealista e injust¨ªsimo¡± que un movimiento electoralista se haya vuelto en contra de Ma?ueco y que ahora sea el PSOE quien deba responsabilizarse del resultado de este ¡°antojo¡±. El burgal¨¦s censura que el PP no aclare ¡°si est¨¢ c¨®modo o no con Vox¡± y que se descargue sobre los socialistas la b¨²squeda de una v¨ªa alternativa. Para ¨¦l, su formaci¨®n debe mantener la ¡°oposici¨®n responsable¡± pero en ning¨²n caso abstenerse para ayudar al PP en unas elecciones ¡°que no fueron ordinarias¡±.
Mismo discurso emite la alcaldesa de Segovia (51.500 habitantes), Clara Luquero, quien tacha de ¡°error hist¨®rico¡± que los conservadores hayan seguido ¡°el dictado de G¨¦nova¡± y ¡°abran la puerta de las instituciones a la extrema derecha, que ya sabemos qu¨¦ pide¡±. ¡°Se me revuelve el est¨®mago¡±, sostiene la segoviana, ante un escenario producido porque ¡°el PP ha convertido a esta comunidad en un campo de pruebas¡±. Por tanto, ellos deben ¡°asumir las consecuencias de esta irresponsabilidad¡±, pues la aspiraci¨®n de Ma?ueco era conseguir un Ejecutivo en solitario y con una amplia mayor¨ªa pero sus 31 esca?os no bastan y debe buscar aliados o abstenciones.
Su hom¨®logo en Soria (39.000 habitantes), Carlos Mart¨ªnez, sentencia: ¡°No nos toca esta responsabilidad, ellos han sacado la confianza mayoritaria y deben decantarse¡±. El alcalde expone que Ma?ueco debe ¡°trabajar¡± para gobernar y trazar presupuestos, ahora ¡°sin cabalgar sobre Igea [Francisco Igea, exvicepresidente de la Junta, de Ciudadanos]¡±. Mart¨ªnez presenta al PSOE como ¡°alternativa y ant¨ªtesis¡± de PP y Vox, que est¨¢n ¡°en el centro del tablero¡±, y por ello los socialistas no tienen nada que hacer ante este dilema: ¡°No puede ser que solo miren al PSOE en los momentos cr¨ªticos para buscar soluciones¡±.
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