22 a?os de c¨¢rcel para el hombre que fingi¨® una colisi¨®n de tr¨¢fico para matar a la mujer a la que acosaba
El fallo constata que Jos¨¦ Eir¨ªn espiaba a la v¨ªctima y que actu¨® con premeditaci¨®n y alevos¨ªa. Ve agravante de g¨¦nero y no da credibilidad a que choc¨® por culpa de la medicaci¨®n que tomaba
La Audiencia de Pontevedra, de acuerdo con el veredicto de culpabilidad del jurado, ha condenado a 22 a?os de c¨¢rcel a Jos¨¦ Eir¨ªn, de 43 a?os, como autor de un delito de asesinato por empotrar deliberadamente su coche contra el de su vecina, J¨¦ssica M¨¦ndez, de 29, un brutal impacto que acab¨® con su vida. La sentencia no deja lugar a dudas de que Eir¨ªn cometi¨® el crimen, ocurrido en la localidad pontevedresa de Barro el 17 de marzo de 2022, por la ¡°indiferencia¡± mostrada hacia ¨¦l por la v¨ªctima.
El tribunal aprecia la circunstancia agravante de que Eir¨ªn cometi¨® el crimen por razones de g¨¦nero. Adem¨¢s, le ha impuesto la prohibici¨®n de aproximarse a menos de 500 metros de los familiares y de la que era pareja sentimental de la mujer, as¨ª como de su domicilio, lugar de trabajo o cualquier otro en el que se encuentren, y de comunicarse con ellos por cualquier medio, de forma directa o indirecta, durante 32 a?os.
En la sentencia, difundida este viernes por el Tribunal Superior de Galicia, el magistrado presidente relata que ya el jurado consider¨® probado que el acusado, ¡°con el prop¨®sito de acabar con la vida de la v¨ªctima¡±, dirigi¨® ¡°intencionadamente¡± el veh¨ªculo que conduc¨ªa contra el de ella, que se encontraba detenido, aguardando para incorporarse a la N-550 desde una carretera secundaria. El impacto contra la zona centro-lateral izquierda se produjo a una velocidad aproximada de 80 kil¨®metros por hora.
El fallo considera acreditado que ¡°el modo en que el acusado dirigi¨® su veh¨ªculo e impact¨® violentamente contra el de la v¨ªctima elimin¨® cualquier posibilidad de reacci¨®n defensiva¡±. Eir¨ªn mat¨® a M¨¦ndez por su ¡°indiferencia¡± hacia a ¨¦l y el hecho de que tal ¡°indiferencia¡± proviniese de una mujer ¡°fue lo que determin¨® su decisi¨®n¡± de provocar la colisi¨®n, se?alan los magistrados.
Este ¨²ltimo hecho, considerado probado por unanimidad, ha determinado la aplicaci¨®n de la agravante de g¨¦nero. El jurado, tal y como consta en la sentencia, afirm¨® en el acta de votaci¨®n que Eir¨ªn que ¡°somet¨ªa a la v¨ªctima a seguimiento y vigilancia desde hac¨ªa a?os¡±, una situaci¨®n de control que el compa?ero sentimental de la mujer confirm¨®, y que, seg¨²n su testimonio, se agrav¨® cuando comenz¨® una relaci¨®n sentimental y estable con ella.
¡°La falta de reconocimiento a la mujer-v¨ªctima de un ¨¢mbito de libertad personal y de autodeterminaci¨®n igual al del var¨®n-autor pone de manifiesto la asimetr¨ªa en la relaci¨®n entre ambos que la sentencia del Tribunal Supremo 99/19 considera el presupuesto exigible para la aplicaci¨®n de la agravante en los casos ajenos a las relaciones de pareja¡±, explica el magistrado presidente en el fallo. Y sostiene que el veredicto de culpabilidad alcanzado por el jurado est¨¢ ¡°respaldado por una valoraci¨®n racional y suficientemente motivada e individualizada de las pruebas practicadas en el juicio oral¡±.
La Audiencia sostiene adem¨¢s que el acusado ¡°eligi¨® de forma consciente, para ejecutar su prop¨®sito¡± un medio que aseguraba ¡°el resultado de muerte perseguido¡±, por lo que concluye que existi¨® alevos¨ªa. La sentencia no es firme y cabe presentar recurso ante el TSXG.
El fallo desmonta la estrategia de defensa
Eir¨ªn no quiso declarar en el juicio. ¡°Soy inocente. Yo no sab¨ªa qui¨¦n iba dentro del coche, y no pude hacer nada para evitar el accidente¡±, se limit¨® a decir y rechaz¨® responder al interrogatorio del fiscal y la acusaci¨®n particular. Su abogado ha sostenido durante la vista, que concluy¨® el pasado 15 de marzo, que su coche arroll¨® al de M¨¦ndez accidentalmente, debido a que perdi¨® la visi¨®n durante ¡°unos segundos¡± por los f¨¢rmacos que le recetaron para tratar una lesi¨®n en una mano. ¡°Fue un tr¨¢gico accidente¡±, proclam¨® el letrado, para incidir en que su cliente hab¨ªa sido v¨ªctima de un juicio paralelo en los medios de comunicaci¨®n. El jurado popular y ahora la sentencia han rechazado esta hip¨®tesis.
Durante los cinco d¨ªas de juicio, el novio de M¨¦ndez, familiares, amigos y vecinos relataron varios episodios sobre la vigilancia a la que Eir¨ªn somet¨ªa a la v¨ªctima. Uno de sus hermanos explic¨® que tuvieron que instalar una c¨¢mara en su casa despu¨¦s de que el coche de la chica apareciese con las ruedas pinchadas. El asesino de M¨¦ndez lleg¨® a ser sorprendido dentro de su vivienda detr¨¢s de unas vi?as e incluso saltando el portal del inmueble hacia el exterior.
Los miembros del jurado precisaron cuatro d¨ªas para alcanzar un veredicto. Tuvieron que ce?irse al relato de los 19 testigos que comparecieron en este proceso, ya que Eir¨ªn no quiso declarar, aunque s¨ª aprovech¨® su ¨²ltima oportunidad de dirigirse al tribunal para pedir perd¨®n y darle el p¨¦same a la familia de M¨¦ndez. ¡°Ojal¨¢ aquel d¨ªa no hubiera cogido el coche¡±, se lament¨®.
Los testimonios m¨¢s relevantes para determinar el delito de asesinato se escucharon de los peritos del Equipo de Reconstrucci¨®n de Accidentes de Tr¨¢fico (ERAT) de la Guardia Civil, que explicaron al tribunal c¨®mo llegaron a la conclusi¨®n de que la embestida fue premeditada. Su informe, que recoge el an¨¢lisis del escenario del asesinato y las diversas simulaciones del accidente, fue una de las principales pruebas documentales del caso. ¡°Hubo una conciencia y voluntad del conductor de provocar la colisi¨®n¡±, concluyen los peritos de Tr¨¢fico. Sus an¨¢lisis descartaron alg¨²n fallo mec¨¢nico o el¨¦ctrico del veh¨ªculo. La v¨ªctima ¡°no tuvo ninguna posibilidad de esquivar el coche que se le vino encima, cuyo impacto la desplaz¨® m¨¢s de 16 metros¡±.
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