El Samur Social de Madrid renuncia a hacerse cargo de las personas sin hogar positivas en coronavirus
¡°No podemos hacernos cargo de ninguna persona que sea positivo en Covid-19¡å, se?ala una circular interna, ante la falta de recursos disponibles
Aleksandr desayuna molletes de pan sumergidos en vino tinto. Sentado sobre el bordillo de una oficina bancaria, observa con extra?eza a quien pasea, como si hablaran un dialecto extinguido, como si el rumor obedeciera a leyes nuevas y desconocidas. Hac¨ªa mucho tiempo que este croata de 58 a?os, a quien la calle ha tostado la piel, no se instalaba en un cajero: ¡°Te echaban para que permitieras el paso¡±. La pandemia, que lo limita todo, tambi¨¦n restaura viejas rutinas.
Las oficinas bancarias que est¨¢n cerradas conceden un techo, de nuevo, a quien vive en la calle. Desde que comenzara esta crisis, el Samur Social -dependiente del Ayuntamiento de Madrid- no ha podido ayudar a m¨¢s de 440 personas con y sin s¨ªntomas. As¨ª consta en su registro de solicitudes. Algunos nunca se hab¨ªan encontrado en desamparo, gente que ha tenido que empezar a vivir en la calle por las consecuencias de la emergencia sanitaria. Huyen de la violencia dom¨¦stica o llegan del desalojado Centro de Internamiento de Extranjeros (CIE) de Aluche; otros de centros de menores y pisos tutelados. No hab¨ªa sitio para ellos en ning¨²n recurso, pese a la adaptaci¨®n hace tres semanas del pabell¨®n 14 de Ifema y del centro deportivo Marqu¨¦s de Samaranch, con 150 plazas cada uno.
Adem¨¢s, el servicio municipal de atenci¨®n a emergencias sociales renuncia a hacerse cargo de las personas sin hogar infectadas por coronavirus. Una circular remitida el pasado s¨¢bado a los trabajadores, a la que ha tenido acceso EL PA?S, sugiere la saturaci¨®n del Samur Social: ¡°No podemos hacernos cargo de ninguna persona que sea positivo en Covid-19, ni en la calle ni en hospitales. No tenemos alojamiento de ning¨²n tipo. Deber¨¢n permanecer en el hospital o se deben comunicar con 112 y desde all¨ª les dar¨¢n indicaciones¡±. Esta directriz sirve de recordatorio y empapela la sede central del servicio, una atalaya desde la que se vigila la desigualdad y donde recibir a quien demandada asistencia.
Un portavoz del ?rea de Gobierno de Familias, Igualdad y Bienestar Social ¡ªque dirige el concejal de Ciudadanos Jos¨¦ Aniorte¡ª subraya que el Samur Social no es un recurso sanitario: ¡°Estamos trabajando para ampliar la oferta dirigida a personas de la calle con sintomatolog¨ªa. Alojar a una persona infectada en un albergue, rodeado de otros sanos, es m¨¢s que desaconsejable. Mientras tanto, consideramos que estar¨ªan mejor en un hotel medicalizado¡±. Pero los hospitales solo los derivan a estos establecimientos si no tienen adicciones ni deterioro cognitivo.
Hubo plazas para enfermos en el centro de acogida Juan Luis Vives y en el Puerta Abierta, pero ahora est¨¢n completas. A d¨ªa de hoy hay 14 personas infectadas en la red, seg¨²n ha revelado Dar¨ªo P¨¦rez, jefe del departamento. Los sintecho que presentan sintomatolog¨ªa d¨¦bil acuden al hospital por sus propios medios. Puesto que muchos tienen un delicado estado de salud, suelen practicarles la prueba. Si el resultado fuera positivo, y tras comprobar que viven en la calle, los m¨¦dicos prescriben cuarentena y contactan con el Samur Social, que debe atender la emergencia: ¡°Nos desplazamos hasta all¨ª solo para comunicar que no podemos recogerlos¡±, relata un auxiliar del servicio que prefiere no dar su nombre.
En la plantilla temen represalias. Est¨¢n contratados por Grupo5, una firma especializada en la misi¨®n social. Ning¨²n trabajador consultado quiere hacer p¨²blica su identidad, aunque el influjo de la ¨¦tica profesional los anima a hablar: ¡°Estamos desbordados. Nuestra labor estos d¨ªas consiste en dar negativas. Me paso el d¨ªa diciendo que no hay sitio en ning¨²n lado¡±, cuenta uno de ellos. Los equipos de calle se han incorporado a la emergencia del coronavirus. Las unidades m¨®viles que realizaban traslados ahora trabajan en la central, el primer filtro en caso de necesidad social. Y los turnos se alternar para evitar contagios entre el personal.
Nadie sabe exactamente cu¨¢nta gente dormir¨¢ a la intemperie esta noche: ¡°Ni si quiera conocen ese dato las administraciones p¨²blicas¡±, asegura otro miembro del Samur. El Ayuntamiento alerta de un ¡°efecto llamada¡± de personas sin hogar que proceden de otros municipios. Se apoya en que tres de cada cinco usuarios del albergue de Ifema est¨¢ empadronado fuera de la ciudad. El ¨²ltimo recuento nocturno de sintecho, dicen, es menor que las plazas habilitadas para la pandemia. Sin embargo, aquel censo excluye asentamientos como los de Chamart¨ªn, Vallecas o Villaverde. Zonas que se vac¨ªan por miedo al virus.
La mayor¨ªa de quienes estos d¨ªas esquivan los recursos de pernocta son toxic¨®manos, alcoh¨®licos o tienen problemas de salud mental: ¡°En ocasiones el c¨®ctel combina todos esos factores a la vez y puede explotar en cualquier momento¡±, agrega el trabajador. La calle es una endiablada espiral: ¡°Algunos ten¨ªan esos problemas y acabaron sin hogar. Otros, sin embargo, contrajeron vicios precisamente por no tener un techo. A corto plazo las sustancias ayudan a aguantar el fr¨ªo, los golpes, la soledad y el desprecio¡±.
La estancia en los centros est¨¢ reglada. De no ser por esa disciplina, el caos devorar¨ªa los albergues. Con todo, los trabajadores sugieren que ese c¨®digo debiera adaptarse al confinamiento: ¡°Hay normas de convivencia y respeto, pero no todo el mundo est¨¢ en condiciones de cumplirlas. Sobre todo, cuando hay adicciones de por medio. No puedes esperar que un alcoh¨®lico respete la cuarentena si sufre el s¨ªndrome de abstinencia. Necesitan beber¡±. Una botella de cerveza o un cart¨®n de vino como los que mueven el universo de Aleksandr.
Informaci¨®n sobre el coronavirus
- Aqu¨ª puede seguir la ¨²ltima hora sobre la evoluci¨®n de la pandemia
- As¨ª evoluciona la curva del coronavirus en Espa?a y en cada autonom¨ªa
- Preguntas y respuestas sobre el coronavirus
- Gu¨ªa de actuaci¨®n ante la enfermedad
- En caso de tener s¨ªntomas, estos son los tel¨¦fonos que se han habilitado en cada comunidad
- Pinche aqu¨ª para suscribirse a la newsletter diaria sobre la pandemia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.