Ayuda ¡®made in¡¯ Wuhan
La comunidad china se volc¨® en aportar material m¨¦dico a los Ayuntamientos de la regi¨®n en lo peor de la pandemia y lleg¨® a enviar respiradores desde la zona cero de la pandemia
El coronavirus azota Alcal¨¢ de Henares (Madrid) con la fuerza de un tif¨®n. Es 15 de marzo, Espa?a acaba de decretar el estado de alarma, y la ciudad se ha convertido en uno de los epicentros de la expansi¨®n de la enfermedad en el pa¨ªs. Se acumulan los contagiados y los muertos. Falta material. Y de repente, una concejal de Ciudadanos, Susana Ropero, lleva al Ayuntamiento una oferta sorprendente: unos chinos residentes en Wuhan, la zona cero del virus, se ofrecen a donar 18 respiradores. Tras una odisea administrativa, de Wuhan a Alcal¨¢ pasando en avi¨®n por los aeropuertos de Shangh¨¢i y Barajas, el material, valorado en 90.000 euros, llega a la ciudad en mayo. No es una excepci¨®n: muchos ayuntamientos de la regi¨®n recibieron donaciones de la comunidad china en lo peor de la pandemia, cuando no hab¨ªa de nada y faltaba de todo.
¡°Cuando el virus lleg¨® a Espa?a, nosotros ya sab¨ªamos lo que iba a pasar, porque ya hab¨ªa pasado en nuestro pa¨ªs¡±, afirma Paco Qian, presidente ejecutivo de la Asociaci¨®n de la Nueva Ruta de la Seda, que recuerda el dispositivo que se organiz¨® para distribuir el material que ten¨ªan empresarios y familias chinas al personal hospitalario, del Samur y la polic¨ªa. ¡°Sab¨ªamos que era muy importante que tuvieran mascarillas, guantes y geles porque son las personas que hacen los trabajos esenciales en la sociedad, ellos no pod¨ªan parar y ten¨ªan que estar protegidos¡±, contin¨²a. ¡°Cuando lleg¨¢bamos, no se lo pod¨ªan creer¡±.
El grueso del material se concentra en una nave de Fuenlabrada situada en el pol¨ªgono de Cobo Calleja. El Ayuntamiento de esa ciudad, por ejemplo, recibe 16.000 mascarillas gracias a la asociaci¨®n local de empresarios chinos. El de Alcorc¨®n, 3.000 batas de protecci¨®n, y 1.350 monos. En Legan¨¦s se donan 1.200 pares de guantes, 200 mascarillas y 25 kits de protecci¨®n con guantes, gel y mascarilla. En Getafe, siete cajas de guantes y tres cajas de mascarillas.
?Y en Madrid ciudad? Una lluvia de ayudas. Asociaciones chinas donan 130.000 mascarillas de uso quir¨²rgico, 360 batas, y 1.400 equipos de protecci¨®n. Universidades del gigante asi¨¢tico, por su parte, proporcionan 26.000 mascarillas, 1.720 batas, y 1.400 equipos de protecci¨®n. Desde otras ciudades del gigante asi¨¢tico llegan 2 respiradores, 2 sistemas de medici¨®n de temperatura, 500 term¨®metros infrarrojos, 77.000 mascarillas, 200.000 equipos de protecci¨®n, 625.000 batas, 315.000 cubrezapatos, y 15.000 gorros m¨¦dicos desechables. Y entre empresarios y particulares asentados en Espa?a hacen llegar otras 150.000 mascarillas.
No es el ¨²nico papel que juegan los chinos residentes en Espa?a en la lucha contra la expansi¨®n de la enfermedad. En lo peor de la pandemia, cuando nadie logra hacerse con el material necesario, Isabel D¨ªaz Ayuso, la presidenta regional, se lanza a comprarlo en China. Desde entonces, 22 aviones cargados de mascarillas, guantes o batas han llegado a Madrid, totalizando m¨¢s de 1.600 toneladas.
En esa operaci¨®n, que arranca con grandes dificultades, y acumula al principio una decena de d¨ªas de retraso, intervienen intermediarios chinos que se encargan de navegar la selva en la que se convierte el mercado asi¨¢tico durante los peores d¨ªas de pandemia. Unas dificultades que conoce bien Javier Rodr¨ªguez Palacios, el alcalde de Alcal¨¢, que ve c¨®mo pasan d¨ªas y m¨¢s d¨ªas hasta que llegan los respiradores donados desde Wuhan.
Respiradores donados en pleno pico
¡°Fue un sinvivir, todo complicaciones¡±, recuerda. ¡°Una concejala de Cs, por su vida profesional, ten¨ªa contacto con una espa?ola de origen chino originaria de Wuhan que le coment¨® que hab¨ªa un grupo de gente de esa provincia dispuesta a donar respiradores¡±, explica. ¡°Hablamos con una empresa de importaciones, porque nosotros ten¨ªamos que traerlo. No cobr¨®, y todo nos sali¨® por unos 3.000 euros, las tasas¡±, sigue.
¡°Tardamos un mes y pico en conseguir los permisos, hubo que implicar al hospital, porque el Ayuntamiento no pod¨ªa recibir la donaci¨®n directamente¡ y cuando lleg¨® el material, las instrucciones solo ven¨ªan en chino¡±, a?ade. ¡°El hospital tuvo que decir que conoc¨ªa ese modelo y se responsabilizaba de su uso. Sin el estado de alarma, que facilitaba las importaciones de material sanitario, no habr¨ªamos podido traerlo¡±.
La angustia provocada por la combinaci¨®n letal de contagios y falta de material de protecci¨®n queda reflejada en la documentaci¨®n que acompa?a a la importaci¨®n de esos respiradores.
¡°Procedo a donar este material m¨¦dico al hospital Pr¨ªncipe de Asturias por las circunstancias excepcionales, la emergencia sanitaria, y especialmente la falta de equipos de protecci¨®n para los equipos m¨¦dicos¡±, explica la empresaria que sirve de puente entre Wuhan y Alcal¨¢. Todo para que finalmente lleguen cinco pesadas cajas hasta el hospital, donde hoy se siguen usando esos respiradores en planta (no en la UCI).
Hubo empresarios chinos que hicieron donaciones, como tambi¨¦n los hubo que hicieron jugosos negocios con las exportaciones a Europa. Ahora que lo peor ha pasado, y hay material en abundancia, como demuestra que la Comunidad tenga un stock a 45 d¨ªas por si hay un rebrote, no bajan la guardia.
¡°Ya no estamos en estado de alarma, pero yo siempre digo que la alarma sigue¡±, dice Qian, de 46 a?os, 30 de ellos vividos en Espa?a. ¡°El virus no se ha ido y esto no puede ser considerado una nueva normalidad, hay que tener m¨¢s cuidado que nunca¡±.
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