Abierto el plazo del nuevo plan municipal de vivienda
Tras paralizar durante m¨¢s de un a?o las subvenciones de 24.000 familias, el Ayuntamiento de Madrid las anima a inscribirse en Rehabilita2020, un programa de presupuesto insuficiente para todas
Esta semana se ha abierto el plazo de solicitudes de Rehabilita2020, una remesa de ayudas en materia de regeneraci¨®n urbana. Provista de nueve millones de euros, la iniciativa municipal sale adelante pese a la deuda heredada de los distintos planes de vivienda de Carmena, que asciende a 120 millones seg¨²n datos oficiales. M¨¢s de 24.000 familias esperan a que se resuelvan sus subvenciones, pero solo hay dinero para la mitad. Antes de comunicarles las concesiones y desestimaciones, el Consistorio anima a la participaci¨®n en este nuevo programa de escaso presupuesto.
Rehabilita2020 subvenciona obras de eficiencia energ¨¦tica, conservaci¨®n y accesibilidad, sufragando entre un 40% y un 75% de la inversi¨®n. Las ayudas est¨¢n abiertas a todos los barrios de la capital, pero su presupuesto ni tan si quiera sirve para saldar la deuda acumulada en materia de rehabilitaci¨®n. El programa, eso s¨ª, se publicita con vehemencia: ¡°Si te quedaste fuera de anteriores convocatorias, ?ap¨²ntate!¡±, dicen los carteles que cuelgan de las marquesinas de autob¨²s. Pero el ?rea Delegada de Vivienda, cuyo titular es el popular ?lvaro Gonz¨¢lez, admite que a¨²n no ha empezado a cursar los 1.500 expedientes pendientes de resoluci¨®n desde 2018. Los vecinos, por tanto, desconocen si est¨¢n fuera o dentro ¡°de anteriores convocatorias¡±.
Nadie les ha explicado c¨®mo actuar ante el nuevo plan consistorial. ¡°?Perderemos nuestras ayudas si no nos inscribimos?¡±, se pregunta Manuela Navarro, de 65 a?os y vecina del Poblado Dirigido de Orcasitas. En su barrio 60 bloques se presentaron a la ¨²ltima edici¨®n de Mad-re (Madrid Recupera), las ayudas dirigidas a barrios en deterioro que public¨® el anterior Consistorio. Primero, por el estado defectuoso de las fachadas, de donde se han desprendido antepechos de hasta 1.200 kilos de peso. Segundo, porque el programa inclu¨ªa la colocaci¨®n de un aislamiento t¨¦rmico que consigue reducir la factura energ¨¦tica de las viviendas. Y el ahorro, en uno de los barrios m¨¢s pobres de Madrid, no parece balad¨ª.
¡°Nuestro caso resulta especialmente flagrante porque estos edificios con peligro los construy¨® en los a?os 80 el antiguo Instituto de la Vivienda (IVIMA)¡±, apunta Navarro. Arreglar cada bloque cuesta unos 350.000 euros. Mientras esperaban las subvenciones, una docena de cantos de los forjados se han despegado de los bloques del barrio. Reparar este perfil de los balcones sale a 6.000 euros por cada uno. ?ngel de Andr¨¦s, otro vecino de 55 a?os, cuenta que en su escalera han incrementado el recibo de la comunidad y alimentan una hucha com¨²n o caja de resistencia: ¡°Vamos juntando algo de dinero con el objetivo de costear los desperfectos y acumular la entrada de la obra¡±. Tambi¨¦n, prosigue, se cubren las espaldas por si ¡°esto terminara como lo de los ascensores de Aguirre¡±.
La expresidenta del Ejecutivo regional inaugur¨® decenas de elevadores bajo la promesa de unas ayudas que tardaron en llegar y lo hicieron con dificultades. Los beneficiarios se encontraron con que la convocatoria final reduc¨ªa el tope de las ayudas con car¨¢cter retroactivo, pasando de 50.000 euros a 15.000 por unidad. Muchos madrile?os hab¨ªan comenzado ya las obras y contrajeron deudas bancarias con las que solventar la diferencia. En municipios como Alcal¨¢ de Henares, el dinero regional tard¨® hasta una d¨¦cada en ingresarse. Eso mismo teme Yolanda Merino, vecina de Moratalaz, que pueda suceder con los planes de rehabilitaci¨®n que administra el actual Ayuntamiento. La suya es una de las 187 fincas que a¨²n esperan a recibir la financiaci¨®n concedida en 2017.
La instalaci¨®n de su ascensor se finaliz¨® hace a?o y medio. ¡±Nos cost¨® 82.000 euros, a repartir entre 20 vecinos. La ayuda cubr¨ªa dos tercios de la obra y la mitad se cobraba por adelantado, pero a¨²n no ha llegado nada¡±, cuenta Merino. ¡°Para afrontar su parte hubo quien necesit¨® un pr¨¦stamo, que se concedi¨® a nombre de la comunidad. Si ahora no puede pagar la letra, porque le hayan aplicado un ERTE con la pandemia, tenemos que hacernos cargo los dem¨¢s¡±, agrega. Su barrio es uno de los m¨¢s envejecidos de la capital. El 26% de los vecinos son mayores de 65 a?os: ¡°Hemos hecho un gran esfuerzo de gasto porque los m¨¢s longevos no se pod¨ªan permitir subir todos los d¨ªas las escaleras de un quinto¡±, relata.
La edil socialista Mercedes Gonz¨¢lez argumenta que el alcalde Almeida ¡°deber¨ªa cerrar primero los planes heredados y aprobar despu¨¦s uno propio¡±. Una posici¨®n recogida en los Pactos de Cibeles, el gran acuerdo global alcanzado por los cinco partidos pol¨ªticos con el que Madrid afrontar¨¢ la reconstrucci¨®n tras la pandemia: ¡°El ?rea Delegada de Vivienda debe continuar la agilizaci¨®n de los pagos que quedaron pendientes en la anterior legislatura, a las comunidades de propietarios que se encuentran inmersas en un proceso de rehabilitaci¨®n, que se torna en estos momentos una carga econ¨®mica m¨¢s a sumar a la complicada situaci¨®n actual¡±, reza el texto pactado.
?lvaro Gonz¨¢lez asegura que est¨¢n dando curso a ¡°todos y cada uno de los expedientes que el anterior equipo dej¨® abandonados¡±. Esta legislatura Vivienda ha ingresado 26 millones de euros a los vecinos, correspondientes a ayudas reconocidas en 2016 y 2017. Pero al tiempo confirman que todav¨ªa no se ha firmado la encomienda de gesti¨®n con la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo (EMVS) para comenzar con las diligencias de las solicitudes de 2018. Jos¨¦ Manuel Calvo, concejal de M¨¢s Madrid, entiende que esa ¡°ineficacia hace peligrar muchas obras de mejora que el Ayuntamiento ya se hab¨ªa comprometido a financiar¡±. Y agrega: ¡°Rehabilita2020 genera desconfianza en la Administraci¨®n, como ya sucedi¨® con los ascensores de Esperanza Aguirre¡±. La sombra de la expresidenta planea de nuevo.
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