Salvador Sobral inaugura al ritmo de un latido los Veranos de la Villa
El disco ¡®bpm¡¯ incluye canciones que el ganador de Eurovisi¨®n en 2017 compuso convaleciente de un trasplante
Al entrar a Conde Duque se escucha un piano. Es el m¨²sico Salvador Sobral (Lisboa, 31 a?os) que, bajo un techo improvisado con pl¨¢sticos, prueba el instrumento que sonar¨¢ horas despu¨¦s este martes, en una actuaci¨®n que abre los conciertos de Veranos de la Villa. Va a presentar su nuevo disco, bpm (Warner), que hace alusi¨®n en portugu¨¦s a los latidos por minuto; un poco por la pantalla que indicaba los suyos hace ya cuatro a?os, cuando recibi¨® un trasplante al coraz¨®n y, sobre todo, por conexi¨®n con las melod¨ªas, que le mantienen vivo. ¡°Al inicio, cuando estaba en el hospital, no ten¨ªa ganas de escuchar m¨²sica, sent¨ªa que no pertenec¨ªa a ese espacio, que era demasiado sagrada como para estar ah¨ª. Al cuarto mes traje un altavoz. Y la inspiraci¨®n de entonces ha llegado ahora¡±, rememora.
Su estancia en la cl¨ªnica le ayud¨® a crear, tambi¨¦n estudiar psicolog¨ªa hasta el tercer a?o, irse de Erasmus a Mallorca o haber ganado el concurso de Eurovisi¨®n en 2017 con Amar pelos dois. No todo de la misma forma, pues este festival le puso en el punto de mira del panorama internacional, y provoc¨® que viviera su enfermedad en medio de la fiebre medi¨¢tica. ¡°Tuve esa fase de fama exagerada. La gente invad¨ªa mi privacidad en el hospital. Los periodistas entraban, quer¨ªan fotos o entrevistas... Es muy loco. Despu¨¦s pas¨®, porque sano ya no intereso tanto¡±. Ahora le queda lo mejor, poder vender todas las entradas ¡°sin tener que ir a El Hormiguero¡±, como puntualiza ¨¦l. ¡°Estoy en ese punto de tranquilidad, aunque tampoco cobro lo que cobraba en el 2017. Felizmente el dinero me da igual, porque nunca me falt¨®¡±, reconoce, sentado en una mesa en la parte trasera del escenario. Le hace gracia que algunos periodistas se muestren inc¨®modos cuando le preguntan por el concurso televisivo: ¡°Piensan que voy a reaccionar mal porque lo hice en el pasado, pero ya estoy en paz con eso. Me trajo cosas buenas¡±.
Para este tercer ¨¢lbum, Sobral se encerr¨® con Leo Aldrey, un compositor y productor venezolano que vive en Barcelona. Un mes despu¨¦s tuvo que seguir en su casa por culpa de la pandemia. La canci¨®n m¨¢s escuchada en Spotify es sangue do meu sangue, que cuenta con 210. 900 reproducciones. ¡°Leito y yo ten¨ªamos ocho semillas de temas cuando nos separamos. En ese momento me entraron ganas de escribir esta letra sobre el paso del tiempo y lo que dejamos en esta vida. Se la envi¨¦, y ¨¦l en tres horas me mand¨® la estructura arm¨®nica y la melod¨ªa. En un d¨ªa ya estaba lista¡±, rememora. Para el artista, es la creaci¨®n m¨¢s representativa de bpm, por el ¡°color y la identidad que muestra¡±.
En sus 14 canciones interpreta jazz, porque ve el g¨¦nero como una oportunidad de libertad que experimenta junto a su banda, sobre todo en vivo: ¡°Cada uno hace lo que siente e interacciona con el p¨²blico. Esa simbiosis energ¨¦tica es esencial y es la filosof¨ªa del jazz, que est¨¢ presente en el disco. Hay un inter¨¦s por otros estilos y por suscitar curiosidad t¨ªmbrica a la gente¡±.
La inspiraci¨®n que le genera el p¨²blico no se aplica a su manera de componer. ¡°Me siento con diccionarios de rimas, de expresiones idiom¨¢ticas y de sin¨®nimos, y empiezo a escribir letras. Nunca me surgi¨® una canci¨®n de la nada, nunca tuve una inspiraci¨®n divina; lo rom¨¢ntico y po¨¦tico me pasa ah¨ª, cantando¡±. Sigue el procedimiento con todos los idiomas que usa en el disco, como su portugu¨¦s natal, el ingl¨¦s o el que habla en la entrevista; un espa?ol con acento entre andaluz (vivi¨® en C¨¢diz) y venezolano (que le ha pegado su amigo y compa?ero Aldrey). Ese inter¨¦s por ser pol¨ªglota le viene por la necesidad de comunicar y por su madre, que es traductora.
Sobral lleva calcetines con estampados y desparejados ¡°para preservar el lado infantil¡±, y tiene un Nokia amarillo con el que manda mensajes de textos. Considera que gan¨® su edici¨®n de Eurovisi¨®n porque era el personaje ¡°m¨¢s rarito¡±; el ¨²nico sin purpurinas, luces y decoraciones. Solo ¨¦l y su voz. ¡°Despu¨¦s de ?dolos [el Operaci¨®n Triunfo de Portugal] me fui a Mallorca para huir de la televisi¨®n, y al final acab¨¦ haciendo Eurovisi¨®n. Siempre me estoy contradiciendo, pero tambi¨¦n lo hizo Fernando Pessoa en sus poemas. Si lo hace el poeta m¨¢s grande que tenemos, yo puedo. Y si te ocurre esto, es porque piensas¡±.
Sus continuas dudas hacen que quiera repetir una segunda parte con Leo Aldrey y a su vez que le apetezca emprender un proyecto con su hermana, Lu¨ªsa Sobral: ¡°El otro d¨ªa me dijo que le encantar¨ªa escribir un disco entero para m¨ª y me gust¨® la idea¡±. Ella, fue la creadora de Amar pelos dois, una canci¨®n que Sobral canta poco en directo. Cuando lo hace, toca tan solo un fragmento, al piano: ¡°No quiero ser reh¨¦n de esa melod¨ªa. Tengo que ser fiel a lo que siento¡±.
Los intereses espa?oles de Sobral
A Sobral le encanta que en los bares madrile?os la gente hable muy alto; y le parece po¨¦tico que la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel D¨ªaz Ayuso, defienda que es muy dif¨ªcil encontrarse a un ex por las calles de la capital. ¡°?Ella viene hoy?¡±, pregunta, y le sorprende que una pol¨ªtica de derechas diga una frase as¨ª. De los m¨²sicos espa?oles admira a Silvia P¨¦rez Cruz, a quien llama ¡°la reina del Tibidabo¡± por su residencia. ¡°Cuando va a hacer los conciertos en Lisboa duerme en mi casa, pero todav¨ªa no consigo humanizarla porque yo la veo como un ser superior¡±. Y de C. Tangana valora que en su ¨²ltimo disco se ve que est¨¢ en b¨²squeda de algo, y su curiosidad.
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