Misa cantada en la Gran V¨ªa

Un gal¨¢n moden¨¦s tom¨® en esta calle la decisi¨®n de ordenarse sacerdote. Se trata de Jacobo Gratii, el Caballero de Gracia, que hab¨ªa llegado a Madrid en 1578 como enviado vaticano. Cuenta Pedro de R¨¦pide en su historia del nomencl¨¢tor madrile?o que aquel era hombre rico y poderoso, pero tron¨® el cielo cuando intent¨® enamorar a una mujer casada. No fue otra la se?al que convirti¨® al libertino en un benefactor al cual se honra en este oratorio bautizado con su nombre. Se trata de la ¨²nica iglesia con acceso desde la Gran V¨ªa, a la que asoma una discreta cruz sobre el ¨¢bside curvo, obra de Carlos Luque, que reformul¨® los exteriores del templo en 1916, cuando naci¨® la nueva arteria de la capital.

La entrada principal se encuentra, con todo, en la calle del Caballero de Gracia. La fachada fue un proyecto de Juan de Villanueva, autor del Museo del Prado y el Observatorio Astron¨®mico, que proyect¨® aqu¨ª su ¨²nico templo. El arquitecto salv¨® la falta de perspectiva en esta estrecha callecilla con una simulaci¨®n de p¨®rtico excavado. Residente un tiempo en Italia, depur¨® los modelos neocl¨¢sicos, lo que le llev¨® a dise?ar este edificio basilical de una sola nave, aunque parezcan tres por sus pasos laterales con columnas de granito. Estos pasillos permiten deambular por el edificio sin interrumpir las cinco misas diarias que aqu¨ª se celebran. Como hace Eulogio Mart¨ªn, de 48 a?os, que cada d¨ªa se arrastra desde una cercana residencia de personas sin hogar para visitar el Ostentorio del Sant¨ªsimo, una pieza policromada en oro que data del siglo XIX y acapara todas las mitradas. ¡°Frente a ella encuentro la paz¡±, declara antes de bisbisear un padre nuestro.

Cunde la sensaci¨®n de que este enclave es ¡°un secreto muy bien guardado¡±. Al menos as¨ª lo califica Margarita Cu¨¦llar, de 82 a?os, vecina del barrio y parte de la Asociaci¨®n Eucar¨ªstica del Caballero de Gracia, creada por el propio apost¨®lico italiano y con sede en este templo desde 1795. Su origen hay que encontrarlo en un convento de franciscanas concepcionistas que intersecaba con la calle del Clavel. Fueron varios los borbones afiliados a la congregaci¨®n, y as¨ª, con el respaldo del tambi¨¦n devoto rey Carlos III, surgi¨® la idea de construir una capilla independiente que pidi¨® Gratii regalar a las monjas. El edificio, sin embargo, se ha reformado varias veces. La primera, destinada a amoldarlo a la Gran V¨ªa, se coron¨® con una vidriera de la ¨²ltima cena fabricada por la c¨¦lebre casa Maumejean.

A esta le siguieron otras cuatro intervenciones tras su declaraci¨®n como Monumento Nacional. Destacan los cuidados al Cristo de la Agon¨ªa, cuya rodilla, tallada en el siglo XVII, se mutil¨® durante la Guerra Civil. Cuentan que fueron dos milicianos anarquistas quieren echaron abajo el dosel que lo proteg¨ªa para destruir la imagen despu¨¦s. En el Museo del Prado, a donde se traslad¨® en septiembre de 1937, se conserva un expediente sobre sus desperfectos. Tambi¨¦n ha tenido que recibir tratamiento contra el deterioro un Eccehomo datado en 1783 y copiado en Ja¨¦n o Los Caballeros de Granada (1720), transposici¨®n de la imagen de bulto que a¨²n se venera en la ciudad andaluza. Bajo su atenta mirada Joaqu¨ªn, de 19 a?os, hinca las rodillas en el reclinatorio. ¡°Siempre vengo a confesarme aqu¨ª, es un sitio de recogimiento en pleno centro¡±, explicar¨¢ minutos m¨¢s tarde.

La incorporaci¨®n de nuevos congregantes se celebra con una homil¨ªa, pre?ada de simbolog¨ªa, tras la firma de los estatutos. La ¨²ltima de ellas tuvo lugar en octubre, cuando ingresaron seis personas y estuvo dirigida por el nuncio filipino Bernardino Auza. Este se refiri¨® al oratorio como ¡°un lugar donde se condensa la espiritualidad espa?ola del siglo de oro¡±. Y felicit¨® a los presentes por los avances en la beatificaci¨®n del Caballero de Gracia, cuyo proceso ha incoado Roma en su clausura diocesana de 2019. Ahora el postulador en el Vaticano preparar¨¢ una biograf¨ªa detallada en la que se recoja el modo de vida del piadoso moden¨¦s y sus virtudes morales. M¨¢s all¨¢ del credo particular, el estudio pretende arrojar nuevas evidencias sobre su paso por la corte madrile?a. Una biograf¨ªa longeva ¡ªse dice que vivi¨® 103 a?os¡ª con luces y sombras que motivaron la ¨²nica iglesia que hay en la Gran V¨ªa.

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