Sin PET ni First: los centros biling¨¹es de Madrid se quedan sin examen de nivel de ingl¨¦s hasta el curso que viene
La Comunidad declara desierto el contrato de la prueba, y busca alternativas ¡°lo antes posible¡± mientras encarga a los profesores que hagan los informes
Tercer curso de pandemia y tercer curso que las pruebas de evaluaci¨®n externa del Programa Biling¨¹e de la Comunidad de Madrid son un desastre. Este a?o no hay empresa que haya ganado el concurso de licitaci¨®n para realizar los ex¨¢menes a los alumnos de sexto de Primaria y cuarto de la ESO de los centros biling¨¹es, los que cada a?o pasan por esa prueba por dos razones: conseguir un t¨ªtulo oficial y decidir su futuro acad¨¦mico dentro de un centro biling¨¹e. Si van por el itinerario de...
Tercer curso de pandemia y tercer curso que las pruebas de evaluaci¨®n externa del Programa Biling¨¹e de la Comunidad de Madrid son un desastre. Este a?o no hay empresa que haya ganado el concurso de licitaci¨®n para realizar los ex¨¢menes a los alumnos de sexto de Primaria y cuarto de la ESO de los centros biling¨¹es, los que cada a?o pasan por esa prueba por dos razones: conseguir un t¨ªtulo oficial y decidir su futuro acad¨¦mico dentro de un centro biling¨¹e. Si van por el itinerario denominado Secci¨®n, estudiar¨¢n tres asignaturas en ingl¨¦s; si acceden al Programa, solo una. Una diferencia vital para muchos de ellos. PeopleCert International Limited, que realiz¨® el curso pasado unos ex¨¢menes ca¨®ticos cuyos resultados adem¨¢s entreg¨® tarde, present¨® este curso la ¨²nica oferta, y a la baja, para realizar la prueba, por lo que la Administraci¨®n ha declarado el procedimiento ¡°desierto¡±. Y sin empresa, no hay examen. La Comunidad de Madrid promete realizarlo ¡°lo antes posible, antes de que termine 2022¡å. Para algunos puede ser demasiado tarde. Para otros, el s¨ªntoma de que algo falla en Madrid.
¡°?Por qu¨¦ no se presentan empresas serias?¡±, pregunta Esteban ?lvarez, portavoz de los directores de Secundaria (Adimad). ¡°Porque aqu¨ª todo es un desastre. Huyen de Madrid porque las condiciones econ¨®micas que proponen no son rentables¡±.
La Consejer¨ªa de Educaci¨®n escribi¨® la semana pasada un correo a los centros, al que ha tenido acceso EL PA?S, lamentando que ¡°este a?o el procedimiento ha quedado desierto¡±. ¡°La intenci¨®n¡±, contin¨²a en el escrito, ¡°es iniciar un procedimiento alternativo que permita que todos los alumnos puedan realizar el examen antes de que finalice el a?o¡±. ¡°Debido a este retraso¡±, avanza, las decisiones en el proceso de asignaci¨®n del alumnado a las v¨ªas de Secci¨®n y Programa se tomar¨¢n atendiendo prioritariamente al expediente acad¨¦mico y al informe de final de etapa del alumno, ¡°tal y como ya se hizo en abril de 2020¡å.
A pesar de haber mandado ese correo a los centros, la Administraci¨®n ha insistido a este peri¨®dico que los ex¨¢menes se har¨¢n ¡°lo antes posible¡± y que ¡°no hay una fecha fija a¨²n¡±, sin aclarar si conseguir¨¢, o no, que haya pruebas antes de que acabe este curso.
La Comunidad de Madrid ¡ªque cuenta con 597 centros p¨²blicos biling¨¹es, de los que 194 son institutos; y 223 concertados, con unos 358.000 alumnos matriculados en total¡ª ha defendido desde hace m¨¢s de una d¨¦cada su compromiso activo de incorporar el ingl¨¦s como primera lengua extranjera. De hecho, desde el 2004 lleva a cabo un programa propio de ense?anza biling¨¹e donde las asignaturas en ingl¨¦s ocupan al menos un 30% del horario lectivo.
Para evaluar lo que se convirti¨® en una de las propuestas estrellas del Gobierno de Esperanza Aguirre, el Gobierno regional prometi¨® a los alumnos que se acogieran al programa que tendr¨ªan acceso gratuito a las pruebas de evaluaci¨®n externas.
Era un instrumento para medir y garantizar la calidad del Programa Biling¨¹e a trav¨¦s de los ex¨¢menes que supuestamente realizan prestigiosos centros de evaluaci¨®n en ingl¨¦s, como el Trinity College, de Londres, o el Cambridge English Assessment, que depende de la Universidad de Cambridge. Pero el prestigio lleva a?os por los suelos. Tanto, que estas empresas con una reputaci¨®n a sus espaldas ya ni se presentan al concurso de licitaci¨®n anual.
El resultado de todo eso, este curso, lo sufrir¨¢n sobre todo los alumnos que pasen a Secundaria, que optar¨¢n al itinerario Secci¨®n o al de Programa en funci¨®n de un informe que realizar¨¢ su equipo docente, lo que deja en el aire si se pierde o no la objetividad resultante de un examen externo y pone en el foco a los profesores, saturados desde que comenz¨® la pandemia. Y con el aliento ahora de los padres detr¨¢s.
?scar Centeno, portavoz de los directores de Primaria, admite que esta circunstancia ¡°supone una complicaci¨®n m¨¢s¡± porque requiere mayor coordinaci¨®n de los docentes que tendr¨¢n que elaborar un informe lo m¨¢s objetivo posible. Aunque Centeno tambi¨¦n entiende la espera. ¡°El a?o pasado fue un desastre y las notas las entregaron tarde, por lo que ya nos vimos obligados a hacer lo mismo que este curso. Y el anterior, pues lo mismo, porque en aquel momento no se pudo hacer por el confinamiento. Llevamos haciendo ese informe desde que comenz¨® la pandemia¡±.
Cada a?o, la Comunidad de Madrid saca a concurso la licitaci¨®n por un precio que ha ido aumentando desde los 2,5 millones de 2015 hasta los 5,4 millones de este mismo curso. La empresa que lo gana examina de las cuatro destrezas (comprensi¨®n y expresi¨®n, oral y escrita) a los menores de sexto de Primaria, que se suelen presentar al A2 o al B1 (lo que seg¨²n la nomenclatura de Cambridge English Assessment equivale al Key English Test, conocido como KET, o al Preliminary English Test, el PET) y a los de cuarto de la ESO, que se preparan para el B2 o el C1 (el First o Advanced Certificate, respectivamente). En los ¨²ltimos seis a?os se presentaron unos 200.000 alumnos.
Pero ese examen lleva tres cursos seguidos de pol¨¦mica en pol¨¦mica. En 2020, debido a la pandemia, las pruebas se cancelaron y el Gobierno regional prometi¨® a los estudiantes que las realizar¨ªan al a?o siguiente. Sin embargo, tuvieron que salir en diferentes medios de comunicaci¨®n protestando porque incumplieron su promesa. Finalmente, lo realizaron a?o y medio despu¨¦s.
Pero lo m¨¢s sangrante ocurri¨® el curso pasado. PeopleCert International se hizo cargo de las pruebas y en algunos centros los examinadores llegaron con horas de retraso, no sab¨ªan qu¨¦ deb¨ªan hacer exactamente e incluso se equivocaron de centro, llevando las pruebas a uno que no tocaba.
La empresa se ha visto perjudicada por aquella experiencia a pesar de presentarse este a?o con una oferta de m¨¢s de un 40% a la baja con respecto al presupuesto fijado por la Comunidad.
¡°Anormalidad¡±
¡°Se constat¨® que en ambos lotes la oferta concurr¨ªa en presunci¨®n de anormalidad [al ser] un 41,7% y un 42,3% inferior al presupuesto base de licitaci¨®n¡±, explica la Administraci¨®n en el portal de contrataci¨®n, que aprovecha para enmendarle la plana a la empresa. ¡°La realidad es que la prestaci¨®n del servicio [en el curso 2020-21] fue defectuosa, afectando a 2.285 alumnos de 6? de Educaci¨®n Primaria, (lote 1), y a 2.985 alumnos de 4? ESO (lote 2) (...). Remarcar que en el caso del Lote 2 este servicio defectuoso afect¨® a m¨¢s del 12% de los alumnos que ten¨ªan que hacer las pruebas (...)¡±.
Mientras, los profesores se preparan para asumir una responsabilidad extra. Esther L¨®pez de Ochoa, coordinadora biling¨¹e de un centro de la regi¨®n madrile?a, admite que la objetividad de una prueba externa se pierde en su sentido m¨¢s estricto, aunque a?ade algo que podr¨ªa ser positivo: de esta manera pueden corregir ¡°un mal d¨ªa de un alumno en un examen¡±. ¡°El problema de esto es que el concurso de licitaci¨®n lo sacan el mismo curso que se tienen que hacer los ex¨¢menes. Deber¨ªan estar ahora decidiendo los del a?o que viene¡±, sugiere. Ante este nuevo imprevisto, ella ha pensado que para que su informe sea lo m¨¢s completo posible realizar¨¢ una prueba de ingl¨¦s similar a la de Cambridge English Assessment para evaluar a sus alumnos. ¡°Es algo que no ten¨ªa previsto. Pero como lo que he estado trabajando hasta ahora se va a la basura, intentar¨¦ enmendarlo de esta manera¡±.
Esa opci¨®n, sin embargo, depender¨¢ de cada uno de los maestros, porque no est¨¢n obligados a hacerlo. ¡°Cuando se acerque el final del curso sufriremos la presi¨®n de los padres, que nos preguntar¨¢n en qu¨¦ nos basamos para elaborar el informe de sus hijos¡±, avanza.
Carmen Morillas, presidenta de la Federaci¨®n de Asociaciones de padres Francisco Giner de los R¨ªos, apunta a una pregunta recurrente tambi¨¦n por los directores, los profesores y CC OO: ¡°El problema es que se externaliz¨® este servicio para que lo hicieran empresas privadas. ?Por qu¨¦ no lo hacen las Escuelas Oficiales de Idiomas que est¨¢n perfectamente preparadas?¡±. La respuesta, sin embargo, es de fondo: el t¨ªtulo conocido internacionalmente lo expiden esas empresas. ¡°Entonces nuestros gobiernos deber¨ªan luchar para reivindicar el valor de las escuelas y sus t¨ªtulos¡±, insiste L¨®pez de Ochoa. Ese horizonte es lejano. El cercano consiste en arreglar el tercer a?o de entuertos con el certificado de ingl¨¦s de los alumnos madrile?os.
Las empresas privadas cobran hasta 210 euros por cada prueba
Que, por ahora, ninguna empresa haya ganado el concurso de la Comunidad de Madrid no significa que los alumnos no puedan realizar ese examen a tiempo, es decir, a finales de curso, como cada año. Como todo, quien quiera pagar por hacerlo, tendrá su certificado, porque siempre se puede recurrir a la vía privada. Los exámenes individuales cuestan entre 105 euros el más barato hasta 210 el más caro, un extremo al que hasta ahora se acogían los mayores, los que pasan a Bachillerato, por si necesitan el título oficial para pedir una beca o, más tarde, para acceder a grados universitarios que exijan esa titulación en el idioma.
La Consejería de Educación insiste en que los alumnos realizarán los exámenes “lo antes posible”, aunque lo cierto es que todavía no se ha sacado un nuevo concurso. “Se están estudiando diferentes posibilidades para contratar el servicio”, resume un portavoz, sin aclarar nada más.
Eso sí, cuando los directores recibieron el correo de la Consejería de Educación la semana pasada, solicitaron a la Administración que si el examen se realizaba después de verano —como todo apunta que va a pasar, por lo que han trasladado a diferentes grupos de padres en reuniones en los centros educativos— que se hiciera a partir de octubre. “Septiembre es un mes muy malo para los chicos, que entran en un nuevo curso”, explica Óscar Centeno, el portavoz de los centros de Primaria.
“El Gobierno de Madrid va sin rumbo en el proyecto bilingüe. Todo cuantitativo para la propaganda y están deteriorando lo cualitativo”, critica Isabel Galvín, portavoz de Educación de CC OO. “La falta de planificación y organización de la Consejería causa un daño al alumnado que será mayor o menor en función de la capacidad económica que tenga su familia”, lamenta.
Galvín también apunta como causa de un problema de fondo a la externalización de las pruebas con empresas privadas. “El año pasado fueron una chapuza y este año quedan desiertas porque las empresas que acceden a estos concursos quieren hacer negocio, tener beneficio”.
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